Felix está muy enamorado de su amigo, pero este no siente lo mismo por él. Luego de que Felix se le confesara por tercera vez y Hyunjin lo rechazara, nuevos cambios aparecen en sus vidas ¿Podrán estar juntos? ¿De verdad "la tercera es la vencida" o...
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Pov Narradora:
A Felix no le dieron el alta, recién se lo darán mañana prefieren tenerlo bajo observación toda la noche. Quienes se quedaron con él fueron Minho y Hyunjin, el pelinegro fue insistente con quedarse así que accedieron.
El pelirubio se enteró que el hombre que salvó no era nada más ni nada menos que su padre biológico, el menor quiso ir a verlo pero Minho no se lo permitió así que esperó a la noche. Mientras su hermano estaba durmiendo salió de su habitación, sabía que Hyunjin había ido a tomar aire afuera así que no había problemas o eso creyó.
- ¿Felix? ¿Qué haces despierto? - Hyunjin volvía a la habitación del pecoso - ¿Te sientes mal? ¿Quieres algo? - el menor negó - ¿Entonces?
- Quiero ir a ver a Min-ki - susurro el pelirubio. Tanto él como Minho lo llamaban por su nombre, de hecho Felix lo llamó así desde que aprendió a hablar.
- Mmh Felix...Tu hermano no quiere que lo veas - el pelinegro habló en voz baja.
- Él no puede decidir por mí, aparte ahora está dormido - el menor comenzó a caminar por el pasillo siendo seguido por el mayor.
- Ni siquiera sabes su habitación.
- No importa, voy a abrir puerta por puerta hasta encontrarlo - habló el menor terco cómo siempre. Hyunjin lo sostuvo de la mano.
- Te diré dónde es pero solo si me dejas entrar contigo - se colocó frente a él. Felix lo pensó un poco pero terminó accediendo - Por aquí - Hyunjin recordaba bien dónde Minho fue llevado por aquel doctor.
Al llegar ambos esperaron unos minutos, tenían suerte de el hombre seguía ahí ya que también quedó bajo observación, los adolescentes entraron lentamente a la habitación esperando encontrarlo despierto.
El hombre para sorpresa de los jóvenes se encontraba despierto, leyendo un libro sentado en la cama, el mayor dejó un lado su lectura quedando sorprendido al ver a su hijo ahí parado.
- ¿Yongbok? - Minho y él siempre lo llamaron con su nombre coreano, su padre solía decir "estamos en Corea no en Australia, cuando estemos allá (Australia) lo llamaré por su nombre en inglés" tal parece que Minho copió esa manera de pensar.
- P-..Min-ki. Tú...¿Estás bien? - Felix no sabía muy bien que decir, pues de todos modos ¿Qué le dices a un hombre que dice ser tu padre quién te abandono a los dos años? Es decir, Felix vió a su padre (luego de la separación de su madre) unos años más pero solo unas horas cada mes, era mucho verlo dos veces al mes.
- Si ¿y tú? Me enteré que fuiste tú el que me salvó - el menor asintió sentándose en la cama, todo bajo la atenta mirada de Hyunjin, quién se quedó parado de brazos cruzados al lado de la puerta. El hombre vió al pelinegro mirándolo, haciendo que el hombre se ponga nervioso - ¿Quién eres tú? - trató de que su voz no se notara nerviosa.
- Él es...- Hyunjin lo interrumpió.
- Soy Hwang Hyunjin - el chico hizo una pequeña reverencia - Novio de su hijo - el pecoso lo miró sorprendido, sus ojos de agigantaron de una manera increíble. Hyunjin lo dijo de una manera tan seria y tan segura que lo hizo sonrojar.
- Emm...sí - habló sonrojado.
- Oh entonces, me alegro por ustedes - Hyunjin asintió serio y Felix con media sonrisa - Yo, no sé cómo empezar, estoy tan arrepentido por todo lo que hice en el pasado, por abandonarlos y dejarlos solos - el pelirubio volvió a su cara de póker — Yo intenté contactarme con ustedes, quería que se enteraran de mi nuevo trabajo. Yo dejé mis malos hábitos — la apuesta — Pagué todas mis deudas gracias a mi trabajo estable — el pelirubio quiso sonreír pero aún así no lo hizo — Después de enterarme de la muerte de Choon-Hee intensifique la manera de contactarme y ¿sabés qué? Lo logré, contacté a Minho pero él no quería saber nada conmigo y lo entiendo yo tampoco querría saber de mí. Así que respete su decisión, yo le mandé dinero por un tiempo — Felix se sorprendió al oírlo — Pero Minho me pidió que deje de hacerlo, él siempre devolvía lo que le mandaban, también me prohibió acercarme a tí — el hombre suspiro.
— ¿Por qué usas un bastón? — preguntó cambiando de tema.
— Hace unos cuatro años mi actual jefe me chocó, dejándome casi innmóvil de la pierna. En ese entonces me encontraba en la calle, no tenía casa pero él me ayudó, al principio fue porque se sintió culpable después forjamos un fuerte lazo.
— Me alegro por ti entonces, es bueno que te hayas hecho un amigo.
— Si...Al principio éramos amigos. Hace dos años estamos casados — Felix abrió los ojos con sorpresa — Supongo que nunca vieron la carta de invitación — sonrió triste.
— No, no lo ví y estoy seguro que Minho tampoco — Felix sentía lastima por su padre, se veía bastante cambiado o por lo menos eso aparentaba — Oye — lo volvieron a interrumpir.
— Min-Ki te traje algo de beber y también unos bocadi...Oh ¿Hola? — un hombre alto de espalda ancha entró a la habitación. Portaba un pantalón azul y una camisa celeste viejo, y en sus manos sostenía su saco azul junto a una corbata y una bolsa en la otra.
— Juwon él es mi hijo menor Yongbok — el nombrado se puso de pie e hizo una reverencia. El recién llegado sonrió y respondió la reverencia — Y él es mi yerno — señaló a Hyunjin quién también hizo una reverencia siendo correspondida.
— Hwang Hyunjin...
— Un gusto a ambos, bueno ya escucharon mi nombre jeje — sonrió nuevamente — Soy esposo de Min-Ki — Felix sonrió.
— Yongbok, eres un héroe ¿lo sabías? ¿Ya te sientes mejor? — el menor asintió, caminando a lado de Hyunjin.
—Si, solo que tengo un poco de sueño, creo que ya es hora de irnos.
— Claro, descansa — habló Juwon.
— Gracias por venir Yongbok — el nombrado sonrió. Se despidió y ya se dió la vuelta para irse junto a Hyunjin, pero algo lo hizo detener ¿qué pasa si nunca más ve a su padre?
— Yo...— volvió a acercarse a su progenitor — ¿Puedes anotar mi número? — los ojos de Min-Ki brillaron — No perdamos contacto nuevamente p..Min-Ki — el mayor asintió y anotó el número dictado por el pecoso.
Ahora sí los adolescentes salieron de aquella habitación, apenas aparecieron en el pasillo, Felix abrazó a Hyunjin comezando a llorar al instante. El chico pelinegro le daba pequeñas caricias a modo de consuelo.
Después de unos minutos, volvió con Hyunjin de la mano a su habitación. Ambos estaban felices de tenerse uno al otro en este momento.
