-𝐋𝐨𝐠𝐫𝐞 𝐞𝐧𝐜𝐨𝐧𝐭𝐫𝐚𝐫𝐭𝐞- [Buzz X Mr P]

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16 : 45 p.m.

•Narra Lola•

Mientras me preparo para salir junto a Gray, un sentimiento, repentinamente, se ha vuelto más fuerte. Hace que me sienta inquieta y algo ansiosa. Me pregunto qué podría estar pasando, y la idea de algo saliendo mal me da una sensación extraña y muy agradable...
Esto me asusta, pero, es como si quisiera una parte de mí experimentar ese miedo, ese sentimiento horrible y delicioso a la vez.

Se que ese "algo" tiene que ver con mi presa principal, P. Será, ¿una desilusión amorosa?, o ¿alguien de su hotel ocasionó un desastre?. Sea lo qué sea, tenia que averiguar, no iba a perderme una oportunidad como esta, bueno, si resulta ser real.
Lamentablemente, desde mi teléfono, no puedo contactarme con P, ni con su amigo. Ese estúpido de Buzz ya esta sospechando... Yo lo se. El mismo me bloqueó de todas sus redes sociales, y para empeorar las cosas, me denuncio e incluso me reporto en las cuentas de P.
Pero yo no me rendire tan facil, no señor.

—Oye Gray.—Llame a mi "mascota".

—¿Si?...

—Prestame tu celular, necesito hacer algo.—Ordené, extendiendo mi brazo hacia el. Moviéndola una y otra vez, de manera insistente.

—¿Es muy importante?.—Me observó con confusión. Odio que lo haga, parece estupido.

—Si, dámelo ahora.

Sin mucha alegría, sacó de su bolsillo aquel aparato tecnologico. Rápidamente, lo desbloqueo con su huella digital, para después, dármelo en mis manos.

—Gracias, ¿ves que no era tan complicado?.—Agradecí, mientras escribía con rapidez, el número de P en los contactos de Gray. Hasta que, logre encontrarlo.—Ya te tengo, escoria.

Apreté el botón de llamada, al mismo tiempo que, caminaba lejos de mi compañero.

—Vamos marica, contesta.—Corte para después volver a llamar, y seguidamente, volvía a repetir el mismo patrón una y otra vez. Aver si de ese modo obtenía resultados convincentes.

Ya cuándo empecé a enojarme, agarre el celular con ambas manos, y justo, en ese momento que estaba totalmente decidida a hacerlo mierda, P me devolvió la llamada, inesperadamente.

Volví a acomodar el teléfono, cerca de mi oido como lo estaba desde un principio. Con una mano lo sostenía, y con la otra, atendí.

—Hola, P. ¿Como estas?.—Salude amablemente, finjiendo como si el me importará.

—...

—¿Hola?.

—...—Seguia sin contestar, pero a lo lejos, se escuchaba como si algo se hubiera caido.

—P, si estas haciendo una broma. Me es de mal gusto, asi que, deja de hacerlo.—Dije nerviosa.

—Disculpame...—Respondio demasiado desganado.—¿Qué quieres?.

—Solo quería hablar contigo, también deseaba saber si estaba todo bien.

—Ah...

Un silencio incomodo se hizo presente en menos de unos segundos. Debo insistir, asi me cuenta algo por lo menos.

—Oye, cariño. Si algo paso, puedes contarmelo.—Agregue ya algo harta de su actitud bajoneada.

—No quiero...—Hizo una pausa para tomar aire, podia oir como su respiración era agitada y algo nerviosa.—...Hablar de eso, no quiero.

—Oh, ¿Paso a verte?, ¿donde estás?.

—No vengas... No quiero ver a nadie.—Respondio intenso.—Quiero  estar solo...