—¿Qué edad tiene? —quería saber. Al decirme esto, debe ser una persona inteligente o mayor que yo, aunque parece de mi edad.
Soltó una risita; no comprendía por ese gesto, si no dije nada gracioso. —Perdón, pero no dije nada gracioso —dije avergonzada.
—Apenas me preguntas eso, después de tanto rato. Usualmente eso es lo que preguntan primero, o quiénes son tus padres, si tienes hermanos, pero tú te enfocaste tanto en esto, que solo hiciste una pregunta sobre mí y casi todo el viaje fue solo interés por este lugar. Solo me causó gracia que ahora quieras saber sobre mí. —Al ella reírse otra vez, solo sonreí, ya que no sabía qué hacer si la ofendí o debí haberlo conocido un poco más antes de hacer esas preguntas, acaso. Me sentí una torpe, no sé qué es lo que debí hacer en ese momento.
—Diecisiete, tengo diecisiete años. ¿Y tú?
—Quince, am... Siéndote sincera, no sé qué preguntarte.
—Bueno, creo que ya puedo contarte una historia si quieres. —Es la primera vez que me da una sonrisa; es una chica muy bella, y su collar me gustó mucho. Tiene dos colores, negro y rosa; pensé que era un tatuaje, pero al verlo bien, es un collar ajustado a su cuello.
—Sí, claro, me gustaría escucharlo, y por cierto, lindo collar.
—Oh, gracias —dijo tocando su collar. —Bueno, esta historia no sé si te la han contado, esto de... ¿Cómo empezó todo esto? ¿Cómo llegamos a ser esta ciudad?
—No —al ver una risa en su rostro, ella bajó una cortina.
—Genial —digo sonriendo. Ella estiró su mano; brilló un poco un color celeste al verlo bien. Ella hizo algo; es como un proyector. —Hace siglos cayó un meteorito en nuestro planeta. —Mientras ella lo contaba, podía ver cómo se veía todo lo que ella me contaba. Es impresionante, es como ver una pequeña maqueta; se puede ver bien que todo es de color celeste, tiene detalles. —Y tres hombres fueron a investigar, pero no sabían que eso cambiaría todo. Antes no existía la magia, solo éramos personas—. Ella soltó un enorme suspiro antes de contarme el resto de la historia. Presté mucha más atención al cómo ver todo lo que ella hacía con sus manos.
—Qué increíble, ese es tu superpoder.
—Sí, puedo mostrar aquello que pienso. Cuando hice las 80 horas de servicio, estaba en una guardería; me ponían de cuentacuentos. Mi poder me ayudó mucho.
—Debió de ser increíble hacer eso.
—Sí, bueno, hay que seguir con la historia.
—Sí, está bien.
—Pero al ellos investigar, encontrar las gemas, pensaron que solo eran piedras que al caer se formaron por la velocidad que venía; se forman esos cristales, pero uno de ellos al tocarlo le mostró lo que realmente era. Él se los compartió a sus amigos, pero a los pocos días los tres manifestaron cosas diferentes. Uno podía manifestar su energía de muchas formas, otro podía controlar las plantas —me hizo recordar el poder que tiene Olivia— y el último tenía una fuerza como ningún otro, pero al él querer más poder, él tomó dos cristales; luego manifestó más poderes, pero no fue suficiente.
—Qué increíble —al ver cómo ella creaba esos hombresitos, es maravilloso.
—Gracias —vi su sonrisa; creo que se sintió halagada, pero espero que ella se sienta orgullosa de tener un poder así, de increíble. —Al querer obtener más, su cuerpo no resistió tanto poder; esto hizo que se desintegrara. Al ver esto, uno quería ocultarlo al mundo, que nadie lo supiera, pero el otro solo quería compartir su descubrimiento con el resto y lograr controlar su poder. Al discutir durante un tiempo, ellos se separaron, tomaron caminos diferentes. Nuestro fundador, él ocultó la mayoría de los cristales que pudo tomar y su amigo solo quería recuperar lo que él se llevó, y él lo buscó, además esparciendo esos poderes a quienes lo merecen. Pero en realidad se los daba a sus fieles seguidores, haciendo su propia justicia

ESTÁS LEYENDO
Yumbrel: nada es lo que parece
Avontuuren un universo fracturado por la guerra y la traición, descubrir que mi familia puede ser mi mayor enemigo. Confié en la persona equivocada y aprendí que la traición puede venir de aquellos mas cercanos, hubiera sido mejor morir aquel día que vivir...