33

239 44 14
                                    

Tocan a la puerta domingo ocho de la mañana, apenas puedo abrir los ojos, llegué cerca de la una de la mañana de trabajar, estos dos días si he cantado y para mi sorpresa a los clientes les he gustado, tanto que no pude salir del trabajo hasta que se fueran.

Así que tengo sueño, me siento en la cama y tallo mis ojos, me levanto y camino hacia la puerta, al abrirla me sorprendo, pero salto de gusto.

- ¡Jin!

-Hola pequeño, ¿Cómo estás?

-Bien, que gusto que hayas venido.

Dejo pasar a Jin abriendo más la puerta, pero saca dos maletas grandes de la cajuela, trato de ayudarle, pero me dicen que pesan y no quiere que las cargue, así que solo las empujo cuando están dentro de la casa.

- ¿Te mudarás?

-Son tuyas pequeño.

- ¿Mías?

-... Tú padre sacó todas tus cosas de la casa, las mandó a tirar... la señora que cuida la casa, las juntó, cuando fui a ver a tu padre como cada día, se acercó a mí con precaución y me dijo lo ocurrido, le di las llaves de mi coche para que metiera todo y me hice el loco diciéndole a tu padre que había olvidado decirle algo, pero solo hice tiempo para que ella pudiera guardar las cosas, lo lamento.

-...No te preocupes Jin, sé que jamás podré volver a casa, la verdad ni siquiera lo quiero hacer, trato de no guardarle rencor a mi padre, deseo que mi mami despierte y que ella sea mediadora, pero la verdad es que... cada que veo las cicatrices que ahora tengo... no deseo ver a mi padre nunca más y creo que es lo mejor, no quiero que mi bebé vaya a sufrir lo mismo que yo y que él pague las consecuencias de mis errores.

-Pequeño, un hijo nunca es un error, tal vez el tiempo y las circunstancias no son las mejores, pero un bebé es un pedacito de ti y que ahora deberás cuidar. Y dime ¿Te has cuidado?

-Sí, Tae me ha enseñado muchas cosas, ahora sé dónde está la clínica, cada mes deberé de ir por mis medicinas y vitaminas, también sé dónde comprar frutas y verduras y ¿Sabes qué más?

- ¿Qué pequeño?

- ¡Tengo trabajo!

-Espera, cómo que tienes un trabajo.

-Tae me presentó con un amigo, fue dulce conmigo, necesitaba ayuda en su restaurante, pero como no quiere que cargue cosas pesadas y pues bueno, no sé hacer nada, pues me dio trabajo como cajero y también canto por las noches... ¿Jin? ¿Estás enojado?

- ¿Cómo se le ocurre darte trabajo? ¡Si eres menor de edad!

-Jin... no te enojes, no puedes solventar mis gastos.

- ¡Claro que puedo!

-Pero no quiero. Jin, todo esto es mi responsabilidad, y debo asumirlo, ya bastante me ayudas dándome casa, pero debo pagar mis gastos solo, no me sentiré bien si solo gasto y no ayudo para ello, además que es mi hijo y debo pagar por su leche, su ropa, sus consultas, es mi hijo y es mi obligación.

-Pero no estás solo.

-Lo sé, increíblemente ahora tengo amigos, cosa que ni en la escuela los tenía, tengo un trabajo que no es pesado, te sigo teniendo a ti y cuando mi bebé nazca también los tendrá a ustedes.

Abracé a Jin muy fuerte y él me devolvió el abrazo, sé que está preocupado por mí y por eso se enoja, mi mami hacía lo mismo, pero no estoy solo y ahora tengo mi ropa, ya no deberé preocuparme por ello, las cosas se van acomodando.

- ¿Ya desayunaste?

-No, acabo de despertar, ayer salí tarde de trabajar.

Jin me miró con desaprobación, pero comencé a calentar café y a platicarle de todas las cosas que ahora sé hacer. Pude disfrutar de Jin todo el día hasta que atardeció y me pidió que lo acompañara a un lugar, fuimos caminando, hasta llegar a una casa cerca del trabajo, pero hacia el otro lado de la casa de Jin y entonces tocó.

- ¿Jin?

-Buenas tardes Joonie.

Vaya, por alguna razón siento que estorbo, hemos llegado a la casa de Nam y entre ellos se ven de una manera, yo diría que íntima, Nam abre la puerta y nos permite pasar, nos sentamos en la sala y nos ofrece agua, pero Jin declina y por consiguiente lo hago también.

- ¿Estás enojado?

- ¿Sabes en el gran problema en el que te estás metiendo por darle trabajo a un menor de edad?

-...En mi defensa, lo hice por ti. Además, que cualquiera que le pregunte, hemos quedado en decir que tiene dieciocho.

-Pero tú sabes que no es así, mira, sí, estoy enojado, pero también te agradezco que hayas pensado en su situación, en no ponerlo a cargar cosas pesadas, en no forzarlo a hacer trabajos extremos, pero no puedo dejar de preocuparme por ti.

- ¿Aún te preocupas por mí? Jin...

-No vine a hablar del pasado Nam... pero sí, me preocupo por ti, ahora Jimin es mi responsabilidad también y no quiero tener que ocuparme de ti más adelante, podrían cerrarte el restaurante y lo sabes.

-... Nadie dirá nada, solo quiero ayudar a Jimin y si de paso te quito un poco de carga a ti... pues lo haré.

-... siempre tan atento...

-Sólo contigo Jin.

Definitivamente no sé qué hago aquí, en mi cabeza solo grito "¡Bésense ya!" a leguas se nota lo mucho que se aman, Jin nunca me ha hablado de su vida personal, todo es trabajo y sé que siempre se ha preocupado por mí, incluso si mamá estaba muy ocupada, él me llamaba para saber si ya había comido, hecho los deberes o lo que sea, siempre estaba al pendiente de mí.

Los veo y hacen una linda pareja, ambos trabajadores, altos, con personalidad, no sé qué pudo pasar como para que no estén juntos, aunque lo único o lo primero que se me viene a la mente, es la distancia.

Después de una media hora, en lo que hablan de si le va bien a Nam en el restaurante o si no ha sido pesado su trabajo para Jin, se enfocan en mí, ambos quedan en acuerdo que seguiré trabajando, que Nam me cuidará y que incluso le reportará a Jin si algo pasa, cosa que a Nam le agrada mucho, yo solo me río porque soy la excusa perfecta para que puedan hablar y si por mí regresan, porque para mí que estos tuvieron algo que ver, sería muy agradable ver a Jin feliz.

Jin se va como a las ocho de la noche, dejándome dinero, mi ropa y muchos abrazos y diciéndome que tratará de venir a verme cada ocho días, que me reportará cualquier cosa de mi mami con Tae. Le sonrío y lo despido feliz, solo que, como cada noche, me siento solito y con miedo, pero sé que ese miedo lo iré perdiendo poco a poco. 

.

.

.

.

.

Me acordé de un fanmeet donde Nam le tira besos a Jin jajaja adoro a mi NamJin!!!!


Seamos InfinitosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora