Seamos Infinitos

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Dos horas después mi pequeño exigía su botella de leche, se la preparé y se la di, Jungkook no estaba conmigo, como se supone que había dicho que lo haría, eso me hizo sentir triste, no quise checar si estaba en la sala o no, pero imagino que si es verdad que quiere estar con nosotros, no salió, así como tampoco va ir de puerta en puerta buscando a Sung. Al final duermo solo, con un poco de frío.

El sonido de un cascabel y unos pequeños balbuceos me despiertan.

-Buenos días pequeño.

Me levanto de la cama y mi bebé sacude con fuerza sus brazos y piernas, solo le sonrío y lo cargo para sacarlo de la cuna, aún es temprano, pero desde que duerme en la cuna, yo puedo dormir y no solo dormitar por cuidarlo, así que no me quejo.

Lo ataco con besos en sus mejillas, en su cuello y él ríe sin parar, lo acuesto en la cama para quitarle el pañal, se lo cambio y lo acomodo en la cama para estar un rato con él, le cuento sus dedos, le acaricio su cara y él solo me mira, balbucea, hace trompetillas, mi bebé amaneció muy feliz hoy. Pega un grito y yo me río otro poco cuando Jungkook entra al cuarto y lo ha visto, pareciera que le ha dado gusto ver a su padre, lo levanto un poco y se lo entrego a Jungkook.

-Hola campeón, cómo dormiste.

Mi bebé patalea con fuerza y Jungkook lo abraza, es una escena muy bella sin duda.

-Iré a preparar el desayuno. –Les digo.

-Te ayudaré a cambiarlo al rato, después de bañarlo, me iré como a las cuatro.

-Bien.

Me levanto y paso junto a ellos, le tomo la mano a mi hijo y se la beso, salgo de la recámara y preparo el desayuno, un rato después Jungkook pone al bebé en la silla y empezamos a desayunar, no decimos mucho sino es que nada, Jungkook se enfoca en el bebé y como no piensa hacerme la plática, ni yo hablar del tema de ayer, me levanto de la mesa, recojo y me pongo a lavar los platos y a asear un poco la casa, mientras Jungkook juega con mi hijo.

Preparo todo para que mi hijo y yo nos bañemos, así como la ropa que deberá ponerle Jungkook, el baño es pura risa cuando mi galletita quiere ver a su padre por el otro lado del vidrio, cuando terminamos el baño y le entrego al bebé, Jungkook nota mi tristeza.

- ¿Pasa algo?

-... galletita llora cuando lo baño y no estás del otro lado del vidrio, solo me estoy haciendo a la idea del llanto que tendrá mañana.

Jungkook y yo nos miramos un momento, bajo la mirada para ver a mi hijo y le tapo el pecho.

-Ve a cambiarlo, no quiero que se resfríe.

Cierro la puerta de vidrio y me sigo bañando, no me tardo, pero si disfruto un ratito más de la ducha. Al final salgo y mi pequeño está cambiado, Jungkook lo está peinando con su cepillo de cerdas suaves, le ha preparado un biberón y el pequeño parpadea lentamente.

No tarda en quedarse dormido y lo pone en la cuna, me gusta la delicadeza con la que lo hace, lo cubre y apoya su biberón con una pequeña almohada para que mi pequeño siga bebiéndola, por mi parte ya me he cambiado y solo me siento en la cama, me peino igual, despacio.

Jungkook abre sus piernas y hace que recargue mi cuerpo en el suyo.

-Has pensado qué hacer.

-... No hay nada qué hacer... tú te irás, yo seguiré aquí.

-Jimin... ¿Y si nos vamos? Estoy seguro que mis padres no pondrán objeción en que vivamos por un tiempo en su casa, en lo que tengo lo suficiente para nosotros.

Me levanto de la cama, guardo el peine y checo que mi bebé no jale aire del biberón.

-No quiero vivir en casa de tus padres, si fuera eso, viviría en casa de mi madre. No tengo planeado complicarle la vida a nadie por mis decisiones, puedo perfectamente cuidar a mi hijo, lo he hecho bien hasta ahorita, si Jin me pidiera su casa, entonces pensaría qué hacer, tomaría otra decisión, pero no es el caso. Lo siento, pero no.

- ¿Piensas algún día vivir conmigo? ¿Piensas acaso darme la oportunidad de vivir con ustedes?

- ¿Y adónde iremos Jungkook? Ninguno de los dos tiene un trabajo que pague lo suficiente, la ropa que tiene mi hijo, la mayoría son de los hijos de Misha, casi todo lo que tengo son regalos de mis amigos, o de nuestros padres, ninguno de los dos siquiera terminó la preparatoria como para que nos den un trabajo con un mejor sueldo... aunque quiera formar una familia... ¿A dónde iremos Jungkook?

Vuelvo a sentarme en la cama, abatido por completo, Jungkook me jala y nos adentramos más a la cama.

-Solo quiero que estén seguros, los quiero conmigo, eso es todo.

-Lo sé, solo que no es fácil.

-Lo sé, pero si encontráramos una manera de estar juntos... ¿Me aceptarías?

-... Nunca dejaré de tener miedo Jungkook.

-... Me ganaré tu confianza.

Y entonces las palabras de Sung vienen a mi mente ¡Que no entiendes que solo te hará daño! ¡Que solo va a jugar contigo, una vez que tenga toda tu confianza, alejará a tu hijo de ti! ¿¡Eso es lo que quieres!?

Me giro para ver a Jungkook, firme y decidido.

-Mi hijo es lo único que tengo en la vida, haré todo porque él esté bien.

-Daré todo mi esfuerzo porque ustedes dos estén bien, si tú estás bien, entonces nuestro hijo lo estará, te dije que tendríamos citas, si en algún momento no renace ese amor por mí, lo entenderé, tal vez te pida ver a mi hijo de vez en cuando... pero te amo, haré lo mejor para los tres.

Tal vez podría haber esperado una respuesta diferente, algo que me hiciera saber que quiere solo al bebé y no a mí, pero su respuesta me deja tranquilo, nos acomodamos mejor en la cama, me abraza, ambos vemos a nuestro hijo y me imagino las tardes de descanso así, nuestro bebé durmiendo después de haber jugado con nosotros, feliz y riendo y yo en brazos de Jungkook.

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Sí, una de las escenas más lindas!!!

Nos leemos pronto!!