61

258 44 9
                                    

Jungkook está en la sala con nuestro hijo, acabo de tener un mini infarto al despertar y no ver a mi hijo a mi lado, solo me asomé al piso pensando que había caído, pero no estaba, entonces recordé que Jungkook había venido en la noche, salté de la cama despavorido, un segundo infarto me había dado, al verlos sentados a los dos, sentí que mi alma regresaba a mi cuerpo.

Que miedo tan más profundo sentí, un miedo que estoy seguro nunca dejaré de tener, me digo a mí mismo que debo calmarme, que ahora tengo el apoyo de mi mami y el de los padres de Jungkook, pero solo de imaginar que pueda querer quitármelo, me deja el corazón completamente herido.

Me pongo un pantalón ligero y salgo a la sala, mi hijo ha terminado la papilla, con la cara completamente naranja, tiene una galleta en la mano con la cual está jugando y Jungkook lo mira y platica con él.

Yo me voy a la cocina y preparo unos huevos para él y para mí, solo lo observo desde lejos, Jungkook ha descansado su cabeza en la mesa y le toca la mano a mi bebé, solo la acaricia.

Mi bebé hace trompetillas y sigue jugando con la galleta y se la mete a la boca, la chupa y vuelve a azotarla en la mesa, claro que la galleta sigue desmoronándose, Jungkook le limpia la saliva que le cae a mi bebé, termino de hacer el huevo y lo sirvo en dos platos, solo caliento el café que sobró del día de ayer y por igual lo sirvo, me siento al otro extremo de la mesa a un lado de mi hijo, por lo que, tengo a Jungkook de frente.

No le digo nada, solo desayunamos, él me mira de vez en cuando, pero tampoco me dice nada, y es que, a estas alturas, qué podríamos decirnos.

Supongo que en algún momento le permitiré ver a nuestro hijo y supongo que como en muchas otras familias, solo tocará el timbre, le entregaré a mí hijo con todo y pañalera, se irá y por la tarde lo regresará.

Solo que ni estoy preparado para dejar a mi hijo a su cargo, ni para tener a Jungkook en mi casa, ni para... ¿Estar con Jungkook? Bueno esa solo es otra posibilidad que no debo meterme en la cabeza.

- ¿Terminaste?

Levanto la cara y Jungkook está de pie pidiéndome el plato.

-Sí.

Le entrego el plato, tira en la basura lo poco que quedó en ellos y empieza a lavarlos, jamás ni él ni yo habíamos hecho deberes de casa, agradecía la comida o los bocadillos en la cocina y nada más, es extraño verlo haciéndolo.

Cambio a mi bebé y quiero aprovechar para bañarlo, pero no me atrevo a decirle a Jungkook que se marche, pero si no lo baño ahora, se me hará tarde para ir a trabajar al rato.

- ¿En qué piensas?

-... Debo bañarlo.

A Jungkook se le iluminan los ojos, me río un poco, supongo que como es algo nuevo para él, todo le emocionará.

- ¿Me dejas ayudar? ... por favor.

-Supongo que está bien.

Su sonrisa es más amplía. Le entrego al bebé que carga con cuidado, mientras yo saco lo necesario y lo pongo en la cama, la toalla, el peine de cerdas delgadas, la ropita que le pondré, crema, pañal, todo lo necesario.

Cuando sé que está todo listo, volteo a ver a Jungkook.

- ¿Qué hago? –Me dice.

-Mmm bueno voy a bañarlo, tú lo cambias ¿Sí?

Jungkook voltea a todos lados sin comprender.

-... No tengo una tina para bañarlo, lo baño en la ducha.

-... ¿Y cuando sales, lo cambias? ¿No estás empapado?

Me encojo de hombros, Jungkook cierra los ojos y le da un beso en la cabeza a mi hijo.

-Entonces yo lo cambio.

Asiento y me meto al baño, templo el agua, me quito el pantalón y tomo la camiseta que siempre dejo secando en el baño cada día, me la pongo, me cubre el bóxer así que, aunque me siento apenado, abro la puerta y le digo a Jungkook que puede entrar.

Me meto en la ducha y le abro los brazos al bebé que ya está desnudo y Jungkook me lo pasa, enjabono su fibra suave y le lavo el cuerpo, la puerta de vidrio se va empañando y mi hijo busca a su padre, siento que es lógico ya que nunca habíamos tenido espectadores, por lo que, limpio el vidrio y Jungkook aparece, me da un poco de miedo que mi bebé quiere acercarse al vidrio y siento que se me puede resbalar en cualquier momento.

Así que, me acerco para que pueda verlo, Jungkook hace caras muy graciosas, tanto que hasta a mí me hacen reír, al final le lavo su cabello y es cuando se inquieta el bebé, ya que quiere seguir viendo a Jungkook, termino lo más rápido que puedo, con tanto movimiento, no quiero que le caiga jabón en sus ojitos.

Pero lo hemos logrado, Jungkook, abre la puerta corrediza y recibe al bebé con la toalla lista, mi bebé es todo gritos y risas.

-Termina de bañarte tú. Aquí te esperamos.

Miro a Jungkook con miedo, él pone una cara muy triste.

-Solo lo cambiaré, no me lo llevaré.

Asiento, él sabe de mi miedo, pero es la primera vez en meses que me bañaría tranquilo, así que lo hago, aunque los nervios de salir y que no estén, me carcome a cada segundo.

.

.

.

.

.

Que bonita escena la del baño. 

Un camino muy largo el que deberán vivir Jimin y Jungkook. La confianza que se pierde es difícil de recuperar, pero mis niños trabajaran mucho en ello. 

Es lógico y racional el miedo que Jimin tiene, ahora le toca a Jungkook hacer las cosas mucho mejor. 

Gracias por las lecturas!!!


Seamos InfinitosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora