Sábado, 8 de marzo.
La tentación es algo horrible. Al menos eso es lo que pensó Ferb mientras miraba todos los bocetos completados del día anterior. Fueron brillantes. No había ninguna duda al respecto.
Era tarde y él estaba sentado en el garaje mirándolos. Había decenas.
Phineas y él habían trabajado unas horas el día de ayer. Dibujaron, escribieron fórmulas y crearon una lista de suministros hasta que fuera estaba demasiado oscuro para ver.
El tiempo había pasado muy rápido. Trabajaron juntos de manera tan perfecta. Se acercaron el uno al otro, agregando cosas y corrigiendo los errores del otro. Todo fue tan fluido.
Phineas no se interpuso ni una sola vez en su camino. El chico parecía saber como moverse alrededor de Ferb. Era como si hubieran trabajado juntos un millón de veces.
Eso enojó a Ferb.
En ese momento había sido tan dependiente de Phineas. No solo había sentido curiosidad por saber como funcionaba la mente del contrario. Necesitaba saberlo. Necesitaba ser parte de ello. Se había sentido tan desesperado.
Que deplorable, pensó Ferb.
Depender de otras personas nunca llevo a nadie a ninguna parte. En especial a alguien como Ferb.
La gente no era perfecta. La gente decepciona a otras personas. Ferb lo sabía muy bien. Y cuando dependes de alguien, es como si los empujará a decepcionarte. Eso era cierto para cualquiera.
Sin embargo, para Ferb fue un poco diferente. Ferb no era agradable. No era el tipo de persona que la gente conocía y simpatizaba al instante. El no se relacionaba con la gente y viceversa. Hizo que fuera fácil para la gente no preocuparse por él.
No se acercaban a él, y eso bueno porque la mayoría de las personas parecían sentir desagrado al británico. Pero en una o dos ocasiones en que alguien se acercó, lo único que hicieron fue joderlo sin pensarlo dos veces. Y fue difícil para ellos porque —para empezar— no lo consiguieron.
Incluso cuando se preocupaba por alguien era como si no pudieran verlo.
Tal vez solo era él.
Quizás era un poco frío y difícil de leer. De todos modos pensó que no tenía sentido angustiarse por eso. Nunca iba se alguien por el quien otra persona más se preocuparía por él a largo plazo. Demonios, su propia madre ni siquiera le importo su bienestar. En el mejor de los casos, siempre sería alguien con quien la gente se intrigaba por un momento y luego se iría.
Y eso estaba bien, porque realmente no quería tener que ver con la gente que conocía. Preferiría estar solo que lidiar con ellos.
Una vez más miro los bocetos que tenía delante.
La idea de acercarse más a Phineas lo atormentaba. Era muy inteligente. La primera persona que Ferb había conocido que estaba realmente a su nivel, pero también sabía que era alguien que necesitaba con desesperación un salvavidas... alguien a quien aferrarse.
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Apartamento vacío [Phinerb] || Traducción
RomanceTurnpike Tavern es como el hogar de Ferb. El lugar perfecto para fumar, beber y todo los demás que le pueda gustar al británico. Su vida puede no ser tan decente, pero él es feliz. Al menos es lo que él dice. Phineas vive el sueño de estar en la es...