¡Han Jisung, un chico de 16 años, estaba acostumbrado a una vida de lujos. Sin embargo, todo cambió cuando sus padres fallecieron en un tragico accidente. De repente, se encontró en una situación desesperada y no tuvo más opción que buscar trabajo e...
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La niña estaba muy entretenida viendo unos adornos en una tienda, pero especialmente uno que le gustó.
Era una cajita redonda color blanca de porcelana, y cuando la pequeña giraba la mariposita, en el centro de la cajita giraba un bailarín, teniendo de fondo una musiquita melodiosa.
La pequeña tenía varias horas viendo aquella cajita mágica, ver al muñequito le recordaba a su hermano, recuerda claramente la vez en que lo vio bailar en su habitación sin que el se diera cuenta.
Jisung era la persona que ella admiraba, el era un bailarín, sus movimientos eran hermosos, ese dia se veia hermoso, por eso ese día se prometió así misma ser una bailarína cuando fuese grande, quería ser como el, quería algún día estar en un escenario con luces alrededor suyo y muchas personas que le aplaudieran, especialmente quería que jisung se sintiera orgulloso de ella.
— ¿necesitas ayuda pequeña?. — le pregunto una mujer que parecía alguien de unos treinta cinco años.
— mmm... — pareció pensarlo, hablaba coreano y le entendía perfectamente, pero temía que descubriera que estaba sola. — no, estoy bien.
— ¿donde están tus padres?. — pregunto la mujer.
Yumy no sabía que responder, se había quedado sin más mentiras que no sabia que mas decir. — están fuera esperando.
— ¿te dejan comprar sola?. — pregunto asombrada.
— si, se cuidarme sola. — respondió valiente. pero pronto la realidad la azotó, se había tardado más de lo planeado y no sabía que hora era. — disculpe señora, ¿que hora tiene?.
La mujer sacó su móvil y vio la hora.
4:00 PM.
— Son las cuatro de la tarde.
A yumy casi le salieron los ojos cuando escuchó la hora, había caminado mucho para encontrar alguna tienda que contenga obsequios hermosos, entro en varias pero ninguna le pareció gustarle, y lo malo es que no tenía con ella algún reloj o móvil para saber cuando regresar.
No sabía en qué momento el tiempo pareció ir rápido, su estómago hacia estragos por el hambre que sentía, en el camino se había comido las galletas y bebido la botella de agua pero ahora ya no tenía que más comer.
Agarró la cajita en sus manos, teniendo cuidado en no romperla, se acerco al mostrador y se puso de puntillas para ver a la mujer quien estaba en caja.
— ¡disculpe señorita, me cobra esto!. — hablo, pero la mujer solo ladeo la cabeza sin entenderla.
Yumy dejo la cajita encima del mostrador y luego bajo su mochila para sacar el dinero. Se colocó de nuevo su mochila y señaló la cajita junto con el dinero que llevaba en mano.
La mujer entendió lo que quería, agarro el dinero de la niña, pero había un problema, el dinero que la pequeña le estaba dando para comprar la caja musical, eran wones y no euros, no podía aceptarlas.
