nueva alumna

11

Cuando llegué al último paso, Poncho me vio y se puso extremadamente rojo.
- Perdón. - dije. - Espero que no te importe.. Mis amigos olvidaron poner su pijama en la
maleta - dijeron enfatizando la palabra olvidada.
Se levantó yendo a mi encuentro - Dios mío, no tienes ni idea de lo maravilloso que es - me. puso las manos en la cintura y me tiró de cerca - Esta camiseta se veía hermosa en ti..
Poncho - pregunté y sonrió, pegando nuestros labios.
Sus manos caminaban libremente alrededor de mi espalda, haciendo que la camiseta se
levantara un poco, y le tiré del cuello acariciando y rascándome ligeramente, cuando sentí
que su mano tocaba mi cintura, debajo de la camisa, me alejé estábamos muy rojos.
Er..Mejor vemos la película. - dijo dándole un sello.
- ¡Ok! - sonrió. - Lo siento por eso.. No era mi intención.. - entrelazó nuestros dedos, tirando
de mí para sentarme en el sofá. - Pero eso es lo que dije, ¡no puedo resistirme!
Me abrazó por la cintura y me acurruqué, casi acostado sobre su pecho.
¿Te gusta qué tipo de película? - preguntó.
- Cualquiera - dijo encogiéndose de hombros.
- ¡Terror! - me sonrió.
- ¡Menos terror! - Completé la risa y él se unió a mí.
- Ok... ¿Te gustan las películas de héroes?
- ¡¡¡Sí!!! - dijo con ojos brillantes Yo era un Nerd supuesto.
- Mmm... - buscó en televisión. - ¿Capitán América, Spider-Man, Super Man?Sólo hombre..
No quiero que babees con estos héroes sin camisa...
Rodé mis ojos. Perai, eso fue... ¿celoso?
- Ahhh basta.. Sé cómo controlarme... Pero simplemente no pongas al Capitán América,
porque Chris Evans.....¡Guau! - Necesitaba probarMe apretó la cintura y me acercó a él,
visiblemente perturbado Me reí - ¡¡¡Es una broma!!!
- Aun así... ¡Seguramente no será esto! - dijo estupefacto.
Volví a poner los ojos en blanco y sin siquiera pensar le di un simple beso en el hombro,
donde estaba apoyado Sonrió volviéndose hacia mí y besándome la frente.
¿Super Man? ¿podría ser? - dijo.
- ¡Seguro! - sonríe.
Empezamos a ver la película, aferrándonos como un par de novios No puedo creer que esté
así con él, Dios mío Es el padre de mi alumno Pero pronto me olvidé de ello cuando su
mano que estaba en mi cintura, o me acarició o me acercó más a él. Poncho ya ejercía un
poder sobre mí y ya no sabía cuánto tiempo podría controlarme.
Me di cuenta de que Poncho a veces me miraba durante la película, pero simplemente fingí
que no lo veía, porque sabía lo que esa mirada iba a ver.
La película ya estaba llegando a su fin y sucedió lo esperado de cada película, el beso de
los protagonistas.
Poncho me volvió a mirar y esta vez también me volví, nos miramos fijamente mientras yo
interiormente suprimía el deseo de hacer cualquier cosa Pero no funcionó muy bien, me
empujé hacia adelante, sujetándolo por el cuello de la camisa que llevaba y nos unió los
labios Poncho estaba asustado por mi actitud, pero en pocos segundos ya había tomado
las riendas de la situación.
Nos besamos por mucho tiempo Me acariciaba todo el tiempo, sus manos volvían a subir a
mi camisa, pero esta vez no me importaba, porque la mía también estaba dentro de su
camisa, acariciando y rascándose el pecho.
Bajó los besos hasta el cuello y me puso en el sofá Necesitaba detenerlo, tenía que hacer
algo, no podía dejar que tomara estas proporciones Ahora era el momento y debía
detenerlo, pero como si lo que más quería fuera que continuara? pero sabía que me
arrepentiría después... Pero, ¿cómo hacer que se detuviera si me encantaban esas cálidas
caricias y besos? cuando levantó la camisa que llevaba, casi quitándomela, lo empujé.

¡Poncho, no! - dijo jadeando bajando la camisa, pero eso no le impidió ver mi lencería Lo
empujé y me senté de nuevo en el sofá - Perdón...
- No, no. - se pasó las manos por el pelo. - Yo era un idiota. Estoy actuando como una
marimacho en la pubertad..
- Cuando uno no quiere, dos no se besan. - dijo poniendo su mano en su rostro, quien me
sonrió. - Resulta que todo esto es muy, eh...
Me miró curiosamente, como si no creyera.
- Annie. Eh.. Tú eres...
- Virgo.. ¡Sí! - dijo suspirando. - Fue mi elección. Quiero esperar al tipo correcto.. Mucha
gente no me entiende y dice que soy un tonto, pero estos son mis principios y esta es mi
forma de actuar...
- ¡Y te hace aún más hermoso! - dijo sosteniendo mi rostro y dándome una silla. - ¡No te
dejas llevar por los demás, ni por sus opiniones..Es una persona de carácter Annie, y eso te
convierte en la mujer perfecta!
Suspiré haciendo rodar los ojos, tenía algo que me devoraba, y si no preguntaba ahora, no
sabía si tendría el coraje o la oportunidad de hablar de nuevo.
- Poncho, ¿qué pasa aquí? - pregunté mirándote a los ojos.
Se pasó las manos por el pelo.
No conozco a Annie Hace tanto tiempo que no siento algo así que ni siquiera sé cómo
reaccionar ni qué hacer Me he sentido inmensamente atraído por ti, y no puedo dejar de
pensar en ti...
bajé los ojos, no esperaba esa respuesta, faltaba una cosa.
No soy como ese Poncho.. - dijo todavía con la cabeza gacha. - Esto es muy extraño para
mí.. ¡También me siento atraído por ti, es decir, muy atraído! tanto que no voy a actuar como
yo actúo cuando estoy contigo... Poncho, despiertas algo en mí que ni siquiera me
conozco! tanto que no voy a actuar como yo mismo!
- Y siento lo mismo contigo... Estoy enamorado de Annie.. - dijo y ensanché los ojos. - Sé
que suena loco, después de todo nos conocimos hace poco tiempo.. Pero no tengo otra
explicación para ello.. ¿Entiendes?
Sacudí la cabeza.
- Sí, porque siento lo mismo...
- Pero nada Annie.. Si sentimos esto, ¿por qué no vivir? Estuve años tan tristes con un
matrimonio roto, donde ella no me amaba y yo no la amaba, estuve tantos años sin sentir
este frío en el vientre y esta euforia por ver o hablar con alguien.. Tantos años no sé qué es
estar enamorado...
- Todo esto es muy hermoso Poncho, porque siento lo mismo.. - dijo sonriendo y poniéndole
la mano en la cara. - ¿Pero cómo vivimos esto?
- ¡Simple ue! - sonrió sosteniendo mi cara. - Quédense juntos, asuman para todos... Sé que
es complicado, eres el maestro de mi hija y esto podría incluso verse como poco ético, pero
no dejaré que te despidan así! juntémonos, salgamos con Annie? ¿quieres ser mi novia?
Sonreí casi sin creer lo que escuché.
eso es una locura, dijo, bajar los ojos.
Annie, no te preocupes.. ¡actúa con tu corazón!, ¿quieres o no?