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Pasaron más semanas y ya se acercaba el baby shower de Santiago. Gracias a Dios por
mis amigos que me ayudaron en todo, porque estresado y dolorido como estaba, este té no
salió adelante.
¡Nick fue el responsable de los chistes, por supuesto! Soph responsable de la decoración
de la sala. Dul responsable de los souvenirs y Mai quien hizo las invitaciones y organizó las
comidas y bebidas.
Yo era básicamente responsable de impedir que Santiago llegara antes del té y de asistir
ese día.
Mis padres y mis suegros regresaban a nuestra casa y de lo que decían se quedaban hasta
que naciera Santiago.
Así que elegí marcar el té cuando ya estaba a principios del octavo mes.
Mi enorme barriga ya me estaba matando, me dolía la espalda y no podía soportarlo por
mucho tiempo.
Tenía miedo de no aguantar y no disfrutar del baby shower que preparaban con tanta
devoción.
Puse un vestido pequeño blanco con un lazo azul justo debajo de los senos y un gateador
blanco muy cómodo. Me metí el pelo en una caprichosa cola de caballo y me maquillé
ligeramente. 
Santiago vino a cambiar todo mi cuerpo, pero ¿a quién dije que llamé? Estaba
completamente enamorado de todos los cambios que sucedieron en mi cuerpo, desde el
vientre enorme, los pies hinchados, la cara redonda y descarada. Pero no me importó, me
sentí como la mujer más bella del mundo.
Toc-toc
La puerta se abrió y vi a Sara entrar a mi habitación con la cabeza gacha. Llevaba un
pequeño vestido azul y movía la punta, parecía nerviosa.
- ¿Qué era princesa? - Pregunté llamándola.
La niña levantó los ojos y me miró fijamente, soltando entonces el aire.
¡mamá, quiero hablar, una cosa sería contigo!
Abrí los ojos, asustándome.
- Poate vorbește!
- ¡No quiero ir a tomar ese té! - ella se soltó y prácticamente me desplomé. Sara siempre
estuvo muy contenta con la llegada de Santiago, ¿y ahora vino con ella? ¿Había dejado de  prestarle atención en los últimos meses?
¿pero por qué Sarinha? - Pregunté.
- No soporto a mamá - ella volvió a suspirar sentada en la cama.
- Nu va stai ce???
- Mama... ¡No quiero que hagas un té Santi! - dijo simplemente. - Amo a mi hermano
pequeño mamá, ¡y realmente pensé que tú también lo amabas! Pero luego vino esta
historia de cómo preparar un té con él, pero pensé que te darías por vencido... ¡Pero hasta
ahora nada! ¡Mamá, no quiero que Santi se convierta en té!
No pude soportarlo y me reí muy bien.
- ¡Aiii Sara! - Hablé abrazándola. - ¡Princesa, baby shower no significa que prepararemos un
té en Santiago!!!
- ¿Cómo es eso??? - - me preguntó con ojos confusos.
sara, el baby shower es una forma de hablar... ¡Nunca prepararía un té en Santiago! Así
llaman a la fiesta que hacen las mujeres embarazadas para recibir un bebé, ¿sabes? En este
té vienen los amigos de mamá y papá y le dan regalos a Santiago, ropa, pañales,
pomadinhas, botellas!
juras que nadie le hará ningún daño a Santi, ¿verdad?
¡Te lo juro, princesa mía!
- ¡Así que sí! - ella sonrió y me agarró la mano. - ¡Digamos que creo que ya llegamos tarde!
Me reí y bajamos las escaleras.
-/-
Mai había arreglado todo muy bien. Hizo el evento parte de la casa para mujeres y la parte
del jardín y la barbacoa para hombres.
Dijo que siempre le resultaban muy aburridos esos tés de bebé que sólo van a las mujeres,
al fin y al cabo la mujer embarazada también tiene amigos y familiares hombres, ¿no?
Ella me pidió mi consentimiento y por supuesto acepté.
Tan pronto como terminé de bajar las escaleras, Sara ya salió corriendo a jugar con unos
primos que venían de Monterrey.
Encontré a Dul y fui hacia ella. Me di cuenta de que tenía los ojos muy rojos, concentrados
en terminar de atar el lazo azul a los souvenirs de Santiago.
- Dul? - Llamé y ella levantó los ojos, olfateando entonces. - ¿Qué pasó? ¿Por qué estás con
esos ojos rojos? ¡No me digas que peleaste contra Ucker otra vez!
Sonrió mostrando todos los dientes, sacudió la cabeza y levantó la mano derecha que
mostraba un enorme anillo de oro.
Abrí los ojos y me di cuenta de que había llorado de felicidad.
- ¡Me propusieron matrimonio a Annie! - ella sonrió más abiertamente y derramó algunas
lágrimas más.
- Wauuuuu!!! - și zâmbește. - Ce frumos Dul!!!!
preguntó hoy antes de que viniéramos aquí... Por eso esta cara enorme e hinchada de
llanto... ¡Me tomó por sorpresa! 
- Ce a făcut-o??
- Bun... Ayer durmió en la casa y Chris en su casa con Mai... Ya sabes cómo es, ¿verdad?
Privacidad. - ella se rió y yo la seguí. - Luego se despertó hoy todo serio, aunque medio seco
en las respuestas... ¡Le pregunté qué había pasado y él simplemente dijo que no era nada!
Empecé a enojarme...

nueva alumna Donde viven las historias. Descúbrelo ahora