💐 *:･ﾟ 𝓞𝓶𝓮𝓰𝓪 𝓢𝓸𝓫𝓻𝓮𝓹𝓻𝓸𝓽𝓮𝓬𝓽𝓸𝓻 ﾟ･:* 💐 YoonMin

🌸 𝓒𝓪𝓹𝓲𝓽𝓾𝓵𝓸 𝓓𝓸𝓼 🌸

Jaeh giró los ojos y se tragó las ganas de bufar solo porque su hijo le estaba cubriendo la boca con la mano, ya que se acercaba el momento en donde el padre preguntaba si alguien se oponía a la boda y a la mierda, claro que él quería oponerse  a la boda porque Zael solo tenía veintiocho años, no debía casarse todavía.

— Si alguien se opone a este casamiento, que hable ahora o que calle para siempre.

Ni mierda.

Ni babeando la mano de YoonGi pudo hablar.

— Entonces, los declaro Alfa y Omega. Pueden besarse.

Ante eso, YoonGi le cubrió rápidamente los ojos como para que no le diera un derrame cerebral por ver que YajaTzael besaba a Zael.

— Felicidades.

Cuando todos los invitados se pusieron de pie para aplaudir en forma de felicitaciones, YoonGi también se puso de pie luego de soltarlo para poder aplaudir, fue ahí en donde desvió la mirada hacia los otros asientos y vio al ser más hermoso que pudo haber pisado el Planeta Tierra.

Por todos los Dioses de la belleza.

Tuvo que restregarse los ojos entre las manos para poder darse cuenta de que no era una alucinación. Sus ojos felinos y perezosos estaban captando al Omega más bonito de todos, era la cosa más preciosa que había visto.

— Una foto dura más, gatito.

Tras escuchar a su papá, él salió rápidamente de su ensoñación y luego apartó la mirada con las mejillas calientes al darse cuenta de que se había quedado embobado por ese Omega de hebras rubias.

— ¿Estás viendo al rubio o al pelinegro?

— Ru-Rubio...

— Es JiMin — Informó Jaeh — Es el sobrino del estúpido que se robó a tu tío y el que está a su lado es su hermano mellizo, TaeHyung.

YoonGi sonrió con timidez.

Hasta el nombre de ese Omega era hermoso.

— Vamos, debemos ir a felicitar a los novios.

Jaeh hizo una mueca y pudo jurar que su lengua se durmió en cuanto dijo esa oración.

— Ve-Ve tú, yo ya voy.

— Está bien, pero te estaré vigilando — Asintió — Todavía estás muy pequeño para coquetear con alguien.

YoonGi asintió con la mirada baja y si pensaba que no podía sentirse más avergonzado, justo él dejó un beso sobre su frente cuando JiMin y TaeHyung voltearon a su dirección.

¿Por qué?

— Espera... Va-Vamos los dos juntos.

— Está bien, gatito.

Jaeh sonrió y debido a que era demasiado amoroso, tomó su mano para llevárselo de ahí, cosa que lo avergonzó más porque sentía la mirada de los mellizos sobre él.

Qué mala primera impresión para un par de lindos Omegas.