Prejudice [ sebastian sallow]

5

Era de noche. No podia dormir. Habia algo en aquella casa que simplemente me intranquilizaba. Leia un libro a la luz de una vela apoyada en la ventana intentando conciliar el sueño. A mi lado dormia Harry en una posición extraña que jamas habria imaginado viniendo de él.
Cerré el libro y me miré las uñas, empezando a divagar.
Acabe pensando en unos ojos color miel y un pelo alborotado castaño. Me lleve la mano al collar y lo apreté, intentando visualizar su figura delante mio, intentar tocarle, olerle, mirarle... creo que la magia no da para tanto.
Estaba sumergida en aquellos pensamientos cuando de reojo note una pequeña luz. Como la de la biblioteca. La que supuestamente estaba relacionada con la magia antigua.
Mi cuerpo se tenso al ver una figura parada en mitad de la acera, mirando directamente hacia la casa.
Me habia visto. Por mi cabeza pasaron varias opciones: salir y enfrentarme o avisar a alguien.
Opte por mirar directamente y no moverme.
De repente note movimiento detrás mio y tuve que hacee un esfuerzo increíble para darme la vuelta sin salir corriendo.
Harry estaba teniendo un ataque en mitad de un sueño, sudando y con espasmos. Inmediatamente me lance hacia él intentando despertarle.
-¡Harry por Merlin despierta!- sobresaltado Harry pegó un brinco de la cama. Los ojos abiertos de par en par y sus respiraciones agitadas. Hermione y Ron se levantaron.
-¿Que ha pasado?
-No lo sé. No recuerdo nada- diji Harry, como dije yo el dia anterior.
-Eso mismo le paso a Laura ayer- dijo Hermione. Harry y yo nos miramos con miedo. El no recordar nada lo hacia mas difícil averiguar que nos pasaba, y por qué él y yo.
Verificando que estaba todo bien, apagamos laa lices de nuevo.
Antes de meterme en la cama con Harry me asomé a la ventana: la acera estaba vacia.

. . .
1 de septiembre de 1995
Despues de ese dia todo transcurrió normal. Las noches se volvieron ligeras y no hubo mas pesadillas raras.
Acababamos de entrar al expresso de Hogwarts y yo solo podia pensar en una cosa: Sebastian.
Indirectamente le busque con la mirada, escudriñando cada rincon, pero nada.
No le vi hasta la cena del gran comedor, sentado en su mesa de Slythering. Y por Merlín, si antes me parecia guapo, ahora lo era mas. Su sonrisa abarcaba toda la mesa de su casa y alrededor tenia un grupo de chicas riendole las gracias. Pude distinguir a Pansy, pasando de él y mas centrada en Draco.
De las chicas de slythering, era la que mejor me caia. Hasta Her la toleraba, las habia visto hablar variaa veces en las fiestas de slythering .De por si la rivalidad entre gryffindor y slythering hacian complicadas las relaciones, sumandole que ni Harry ni Ron estaban por la lavor d ehacer ese tipo de amistades. Por mi parte me daba igual la casa.
De hecho, yo podria estar en esa mesa si hubiese querido, pero mi miedo a la soledad me ganó.

"Harry y Ron habian quedado en gryffindor, hasta la niña esa que habia irrumpido en nuestro vagón.
-Laura Foster- la profesora me llamó para la elección. Mis piernas temblaban mientras me acercaba. No queria ser el centeo de atención ni que todos me mirasen. ¿Y si se burlaban de mi? Igual mis rizos son demasiado voluminosos, o mi nombre demasiado raro.
Me senté en el taburete y senti al sombrero seleccionador posado en mi cabeza.
-Oh, cuanta inteligencia y amabilidad, veo que estas hecha para ser lider- ¿lider? Para nada.- Umm, veo ganas de superación, de querer ser mejor, slythering podría ayudarte...- por favor no, quiero ir con mis amigos, no quiero irme sola- ¿temes la soledad? Haras amigos igualmente en cualquiera de las casas, pero si asi lo deseas...¡GRYFFINDOR!"

Siempre he tenido miedo a que me juzguen, a que no me quieran. A no encajar.
Con el tiempo pude volverme capaz de entablar conversaciones sin temblar con personas ajenas, tambien debido a la inentendible popularidad que me rodeaba. De Harry lo entendia, pero yo solo era su amiga.
Cuando volvi a la realidad, me tope con unos ojos color miel que me miraban. La pequeña seguridad en mi misma que habia ganado recordando mis avances se desvaneció. Me le quede mirándome embobada hasta que Her me pellizco el brazo
-¡Auh!
-Te he dicho tres veces que me pases el pollo. ¿Que te pasaba?- miro en mi dirección, donde Sebastian ahora estaba riendo con una chica a su lado. Aquello hizo que mi corazón que quebrara un poquito.- Ah, ya entiendo. Lo siento.- la conversación finalizo ahi ya que Dumbledore, el director, llamó para hacer un anuncio.
-Alumnos, quiero anunciar varias cosas relacionadas con el curso escolar que viene. Primero, como petición popular, hemos accedido a realizar el baile de navidad- la sala estallo en aplausos.- Segundo, Filch quiere que recuerde que el pasillo del tercer piso está terminantemente prohibido para el que no quiera una muerte dura, asi como irse al bosque o merodear por los pasillos de noche- se que sabian que Seb y yo hemos salido por los pasillos infinidad de veces, o con los gemelos y Her ( cuando la sacaba de los libros) cuando vamos a alguna fiesta de las otras casas.- y por ultimo, quiero que den la bienvenida a nuestra nueva profesora de defensa contra las artes oscuras, Dolores Umbrige.