23

152 11 0
                                    

Estabamos en la sala de menesteres entrenando.
Faltaban dos semanas para el baile.
Harry habia decidido hoy empezar con los duelos de verdad.
-Utilizaremos hechizos basicos, como expelliarmus, levioso, el de ataque base, protego... nada de hechizos muy dañinos como confringo, no queremos salir chamuscados- sonaron algunas risas- ¿Quien quiere empezar?
Hubo un silencio hasta que sono la voz menos esperada.
-Yo- salio de la gente una cabellera rubia con túnica verde. Draco.
-Elige a tu contrincante.
-Foster- me quede parada unos segundos. No lo habia ni pensado.
Millones de cosas me pasaron por la cabeza cuando mis pies se movieron lentamente hacia el area de combate.
¿Por qué yo?
-¿Estas bien? No tienes por que hacerlo- me dijo Hermione a mi lado.
Ni siquiera gire la cabeza para contestar.
-Estoy bien.
-Preparar vuestras varitas- ambos alzamos nuestras armas y un mal presentimiento me recorrió el cuerpo.
Sentia la magia antigua activarse en señal de advertencia.
-¡Ya!- Draco empezó con una serie de hechizos que esquive como pude.
Nuestra batalla se convirtió en un baile de luces mientras nuestros pies se movian.
-Nada mal, Foster. Pero me esperaba mas- la rabia me subio por las venas y cada vez sentia que tenia menos control sobre mi misma. Tenia que terminarlo ya.
Rode sobre el suelo para esquivar un ataque y me encontré a Draco de cara.
-Me han dicho que Potter se te declaró. Que lastima me das- le empuje lejos y trate de calmarme, pero se complicaba.
-No quiero escucharte, Malfoy- le gruñi.
-No te gusta que te digan la verdad, ¿eh? En verdad haceis buena pareja. Los dos dais lastima- mis manos brillaban. El poder me pedia a gritos que le dejase salir.
-Sus manos...- escuche a alguien decir.
Tenia que parar. Necesitaba parar.
Lance un hechizo tras otro sin control ni orden, con la esperanza de que alguno le acertara.
Con suerte, se equivoco en un protego y logre tumbarle con un depulso.
Me acerque hasta donde estaba tirado, magullado.
-No vuelvas a hablar asi de mis amigos.
-¿Amigos? Yo me lo haria mirar- gimio- mi padre se enterara de esto- dijo mientras se levantaba.
Un silencio invadio la sala. Al girarme todos estaban mirandome.
-¿Que fue eso?- preguntó Neville.
-¿El qué?- diji extrañada.
-El brillo. Tus manos tenian una luz blanca
-No se de lo que me hablas.
-Lo hemos visto todos- dijo Harry. Le mire con una mezcla de miedo y rabia. No sabia que contestar.
-Seguir practicando los hechizos entre vosotros. Laura, ven- me indico Harry. Fuimos a una esquina donde nos aseguramos que nadie escuchaba- ¿Me vas a decir que fue eso?
-¿Ahora si me hablas?
-Laura, ¿que fue eso?- no contesté de inmediato. Dude en si decirle la verdad. A decir verdad, Malfoy tenia razón. Por eso me habia cabreado tanto.
Ya no sabia sin considerarles mis amigos.
-No lo se. Estoy igual que tu.
-Tenemos que hablar con el profesor Dumbledore.
-Pero si te ignora. Lleva haciendolo todo el año.
-Pero esto no puede ignorarlo. Tienes una especie de poder sobrehumano que podria ser muy beneficioso para la lucha.
-No quiero descubrirlo- me miro extrañado.
-¿Como que no quieres? ¿Y si esto es por lo que Sirius dijo que escucho tu nombre? Tienes un poder que no dejas salir.
-Harry...- intente decir.
-Ademas, contra Voldemort cualquier ayuda es buena...
-Harry...- volvi a intentar.
-...y si lo practicas y descubrimis que puedes conseguir.
-Ya basta- le espeté. Harry se calló- no quiero ser especial, ni que la gente me mire raro. No quiero que se corran rumores de un poder raro que tengo. No quiero que hagas nada.
Me miró detenidamente. Fruncio la boca en señal de que no estaba de acuerdo, pero dijo:
-Esta bien. Perdón- le dedique una breve sonrisa en señal de agradecimiento- pero sabes que puedes contarme cualquier cosa. Soy tu mejor amigo.
-Si, lo se- en realidad no lo sabia, pero no tuve el valor para decirlo.
Continuamos el entrenamiento y nos fuimos a nuestras casas.
Me tiré en la cama agotada.
-Hacia bastante que no dormias en la habitación- me diji Hermione.
Era cierto, esta semana habia estado durmiendo con Seb mientras hablabamos de temas sin importancia abrazados: conversaciones profundas sobre la vida y la muerte, temas politicos, aspiraciones, valores morales. Fue volverle a conocer en un ámbito totalmente distinto pero igualmente bonito.
-Ya- me limite a decir.
-No quiero estar asi contigo- me dijo, y note como el colchón de mi cama se hundia por su peso- deberia de haber estado contigo. He estado muy distante estos dias pero es que Ron y H...
-Ellos son ellos. Tu eres tu. Deberias de saber decidir por ti sola lo que quieres- me gire y la mire- al principio me apoyabas, ¿que ha cambiado?
Los ojos de Her se empezaron a llenar de lágrimas.
-Lo siento, no pude hacerles frente siempre. Tu hiciste nuevos amigos y sentia que sobraba. Ellos eran los únicos que sabia que se iban a quedar- mi rabia se transformó en tristeza. La abracé y se sumió en el llanto.
No lo habia visto de esa manera. Solo habia pensado en mi propio dolor. No me habia puesto en su lugar al ver que hacia otras amistades.
La habia juzgado.
A mi mejor amiga.
La culpa me comio el corazón. Me lo estrujó hasta que salió sangre en forma de lágrimas.
-Lo siento, Her- y nos abrazamos.
Duramos varios minutos hasta que nos separamos.
-Deberia de haberte hablado antes
-Deberia de haberte entendido. Pero Her, no puedes depender de ellos.
-Lo se.
-¿Y Theo?- una sonrisa salio de sus labios.
-Es encantador. Listo, amable, atento, guapo. Nis hemos acercado mucho estos dias. Creo...creo que me gusta.
-Me alegro mucho por ti, sereis una gran pareja- le sonrei- ¿Ves? Ya no solo estan ellos. Estoy yo, esta él, estan Pansy...
-Pansy me odia
-Pansy es complicada pero no te odia, te lo aseguro-
Me tumbé bajo las sabanas- No volvamos a separarnos asi, ¿vale?
-Vale.
-Te quiero, Her.
-Te quiero, Laura.

Prejudice [ sebastian sallow]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora