Nunca beses a alguien en una fiesta con antifaz porque no sabrás quién se esconde detrás de él.
No importa si es irresistiblemente atractivo. Y definitivamente no deberías volver a besarlo cuando sabes que una relación con él puede traer serias cons...
Tom caminó con Melanie empalada sobre su miembro, cargándola como hizo la noche que la llevó al baño del bar sin saber que era su alumna, hasta la cama donde estaban otros dos follando ruidosamente.
Amara gemía con cada embestida de Bill , se mordió el labio inferior, sonriente al ver a Tom acercándose con Melanie.
Tom la sentó sobre uno de los buros de su cama sin salirse de su cuerpo. Bill y Melanie estaban de pie.
Tom seguía enterrado en su alumna.
–Me dijiste que te gustaba como se movían las pechos de Amara mientras se la follan.
–¿Quieres tocarlos?
Más excitada que nunca, pero a la vez aprehensiva, Melanie miró el rostro de Amara y luego sus senos acarisindolos obscenamente cerca de ella.
–¡Ay sí! ¡Por favor Melanie!.
Melanie extendió la mano, maravillada ante la provocadora suavidad que estaba apretando.
–¡Las dos! ¡Melanie las dos!.
Obediente, hizo lo que le pidió, agarrando sus pechos como dos frutas maduras que colgaban justo a su alcance.
–Se vuelve loca cuando le pinzan los pezones... Dijo Bill sin dejar de embestir a su novia.
–Así... Dijo Tom apretando los botones de de Melanie con más fuerza. Melanie resolló por el intenso estímulo que estaba en la frontera entre dolor y placer.
–¡Hazlo otra vez! .....jadeó.
Tom lo hizo, metiendo y sacando lentamente su longitud en su abertura.
Melanie sintió como el chispazo eléctrico hizo una ruta directa desde sus pechos hasta su clítoris y gimió. Imitó lo que Tom le había hecho a ella, tomando los botones de Amara, apretándolos con fuerza, arrancando un gemido desesperado de su garganta.
–¡Ay sí! ¡Dios! ¡Sigue, por favor sigue!.Suplicó.
Melanie lo mantenía firmemente agarrado, pellizcando, retorciendo sus pezones sensibles.
Amara echaba las caderas hacia atrás con fuerza, empotrándose sobre Bill , con cada embestida el y cada vez eran más duras.
– ¡Dios me voy a correr! ¡Voy a correrme!.
Su clímax estalló, consumiendo cada célula de su cuerpo en una energía irrefrenable de éxtasis. Cuando la intensidad de su orgasmo había terminado, aminoró su ritmo pero no se detuvo. Bill hincaba sus dedos en la carne de su culo, entrando y saliendo de su canal resbaladizo, contemplando como su pene estaba cubierto por el placer de Amara, y eso iso estallar al hombre terminando dentro de Amara pues el si había disfrutado de ver como la aprendiz novata de Tom había seguido su consejo, provocando un orgasmo delicioso en su novia, le costaría aún más contenerse al ver lo que sucedería a continuación.
–¿Te provoca comerte a esta deliciosa aprendiz Amara?. Preguntó Tom.
–Uy sí, anoche desde la ventana vimos como la devorabas sobre la mesa de la cocina.
-Muero de ganas por probarla.
Tom se salió de su caliente sexo, y Melanie se sentó en la cama, abriendo las piernas frente a de la rubia.
Antes de poder decir cualquier cosa, Amara apoyó sus manos sobre sus muslos, separándolos aún más y lamió su vagina rosada. Melanie soltó un gemido al sentir la lengua de Amara invadir su sexo; Tom estaba de pie, y se recostó en la cama cercas a la altura precisa de su boca y comenzó a restregar la longitud de su erección contra sus labios. Melanie empuñó su miembro, guiándolo a su boca, envolviendo su glande hinchado con los labios, chupando y lamiendo su punta.
Bill contemplaba la escena que se desenvolvía ante sus ojos, su miembro hinchado y sus bolas apretadas al ver como su chica ponía a la morena a gemir con la boca llena del pene de su hermano que chupaba con excitación desesperada. Su semen estaba a punto de salir nuevamente y con una fuerte estocada sintió como el primer chorro de leche salió disparado, bañando a Amara por dentro nuevamente, llenándola con la evidencia viscosa de su orgasmo, el placer irradiaba por todo su cuerpo con cada eyaculación.
Amara apretó sus músculos internos al percibir que Bill se estaba corriendo, ordeñaba su miembro con su sexo mientras enterró dos dedos en la cadera de Melanie; cuando rodeó su clítoris con los labios y chupó, la morena alzó las cadera, su culo rebotando con las sacudidas descontroladas de su cuerpo al sentir como la rubia le provocó otro orgasmo.
El deseo desesperado la hacía chupar el miembro de Tom con más intensidad, gritaba alrededor de este cuando sintió el líquido caliente aterrizar sobre su lengua, gemía mientras se tragaba su leche espesa, pero el volumen que estaba eyaculando en su boca mientras la agarraba por el cabello salía más rápido de lo que podía beber, quedando parcialmente incapacitada al estar sometida a la explosión de su propio clímax. El líquido blanquecino se desbordaba por su mentón, mientras Tom se follaba su boca de manera feroz y Amara no paraba de meter y sacar los dedos de su entrada mientras bebía golosa el jugo cítrico que manaba de ella.
———————————————————— Muy muy fuerte nos iremos al infierno todos 🔥🤩 pero si es con Tom no importa.
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