One and Only.

Capitulo 17.

Cap. 17.

Invito a mi amiga a sentarse en el sofá de mi sala, ella aun esta congestionada y sollozante. Ella se sienta, pero no se acomoda, sino que se queda erguida, mostrando su ansiedad y desesperación.

-tranquila, Bride- murmuro poniendo mi mano en su hombro buscando darle algo de apoyo pero se tensa.

-¡¿Cómo quieres que me tranquilice?! ¡El amor de mi vida está en el hospital y no tengo idea de lo que le pasa! ¿Qué harías tu si Aydan estuviera en esa situación?

Frunzo el ceño

-¿Aydan?- me mira

-sí, el, Sunshine- reta ella y respiro profundo, pensándolo bien, un tiempo atrás me hubiera vuelto loca, pero ahora... no lo sé. Así que solo me limito a encogerme de hombros. Ella resopla poniendo sus manos en su frente, enterrando sus dedos en su pelo rojo. -¿Qué hago aquí?- se pregunta ella, en un susurro – debería estar con él-

-¿quieres que vallamos?- pregunto y ella me mira sorprendida

-pero estas cansada, no Sun...-

-eres mi mejor amiga- le digo severamente – y ya no es una pregunta, vamos a ver a Justin-

Salimos del edificio donde vivo y nos montamos en su auto, ella, decidida, lo enciende y se integra al tráfico de NY.

-¿sabes en que hospital esta?-

-si- dice –y creo saber por qué está ahí- asiento y rezo porque no le haya pasado nada realmente malo. Sería devastador ver a Bride destrozada si a su chico le pasara algo.

Veinte minutos después, llegamos al hospital, nos estacionamos y cruzamos las rápidamente, bueno, Bride lo hace y yo intento seguirle el paso. Ella se acerca a la recepcionista y llama su atención chocando su palma de su mano en la superficie de mármol de la encima.

-¡oye, quítate esos auriculares! ¡Te estoy hablando!- grita Bride. La rubia, con una paciencia exasperante se los quita y dirige su verde mirada a nosotras sin dejar de masticar su goma de mascar...rosada.

-esperen su turno, señoras- murmura

-Justin McDonald ¿en qué habitación esta?-

-dije que esperen su...-

-Justin McDonald, señorita ¿en qué habitación esta?- insiste Bride, empezando a ponerse roja, la recepcionista resopla frustrada, escupe su chicle hacia donde me imagino que hay un zafacón detrás de la encimera y teclea algo en el ordenador

-¿Justin McDonald, dijo?- pregunta ella

-si- decimos al unísono

-está en cirugía-

-¡¿Qué?!- exclama Bride y comienza a llorar de nuevo, llamando la atención de todo el mundo; intento calmarla pero ella se aleja de mi con un manotazo –no puede ser- solloza, cubriendo su pecho con sus brazos, desesperadamente y una señora mayor se acerca a mí, con una lastimosa mirada.

-créame que lo siento en el alma, parecía ser una buena persona-

-gracias- murmuro y le sonrío leventemente tratando de mantenerme fuerte para ayudar a mi amiga, me acerco nuevamente a ella y esta vez se deja abrazar –ya nena, lo están ayudando, el no está muerto, no es el fin- susurro y ella solo asiente secando sus ojos y sorbiendo su nariz. Un doctor se acerca a la recepcionista y ella inmediatamente se quita sus auriculares para ponerle atención comiéndoselo con los ojos, literalmente.

-¿ya te comunicaste con los familiares del Sr. McDonald?- pregunta el, con una voz muy, muy sepxi enserio... pero que estoy pensando...

-¡somos nosotras!- exclamo llamando su atención, el sonríe mostrando un par de profundos y celestiales hoyuelos y llega hasta nosotras, me ofrece su mano, yo la tomo y el la sacude en forma de saludo.