El día de la visita de Sana y Tzuyu a la ciudad había llegado. Nadie más de las chicas sabía, solo Chaeyoung, pues la taiwanesa le había pedido a su amiga mantener el secreto para poder darles una sorpresa al resto. Y aunque Chaeyoung tenía mucha curiosidad por saber lo que estaban tramando, sabía que intentar sacarle alguna información a Tzuyu era igual a hablar con una pared.
Faltaban solo unos días para el cumpleaños de Sana, así que Chaeyoung supuso que se trataba de una fiesta sorpresa o algo similar. Tzuyu solía ser una chica muy indiferente con esas celebraciones cuando de sí misma se trataba, pero cuando era sobre Sana su perspectiva cambiaba totalmente. Supongo que el estar realmente enamorados puede cambiarnos en muchos aspectos.
En ese momento Chaeyoung se encontraba en su apartamento, pues afortunadamente era su día libre. Tan solo estaba expectante al mensaje de sus amigas para ir por ellas hacia el aeropuerto y por fin despejar su curiosidad. Mina se encontraba aún durmiendo, ya que el día anterior había salido un poco tarde de la academia. Chaeyoung decidió levantarse tranquilamente a preparar el desayuno para ambas y así dejarla descansar un poco más.
Su celular vibró desde el mesón sacándola por completo de sus pensamientos. Se sorprendió de pensar que se tratase de Sana y Tzuyu informando que ya iban a llegar, pero no se trataba de ellas dos. Quien la llamaba era Eunha, su terapeuta, así que contestó.
—¿Eunha?
—¿Son Chaeyoung? ¿Acaso sigue usted viva?
—Por supuesto —rió un poco—. ¿Cómo estás?
—Sinceramente me siento sorprendida de escuchar su voz y corroborar que, efectivamente, no es por la falta del aire en sus pulmones que ha estado tan ausente.
—Ah, no necesitas ser tan formal, Eunha. Me siento rara —rió. La terapeuta la siguió en su risa.
—¿Qué sucede? Hace mucho tiempo que no vienes. Y bien sabes que no suelo llamar a mis pacientes, pero mi secretaria me dijo que la última vez que te llamó para confirmar la cita, no contestaste.
Chaeyoung suspiró sintiéndose un poco avergonzada. Sabía que ella decía la verdad. Había pasado mucho tiempo desde la última vez que había ido al consultorio de su terapeuta.
—Disculpa, he tenido semanas ajetreadas y ocupadas.
—Lo puedo comprender. Pero, ¿al menos todo está bien?
—Sí —susurró—. Solo problemas familiares y así, pero creo que puedo manejarlo.
—Quiero creer que es un hecho lo que me estás diciendo —masculló.
—Lo es.
—No puedo tener una "consulta" por aquí contigo, ya que no dispongo del tiempo. En un momento debo atender a personas, como sabrás, soy alguien que tiene ocupaciones. Pero si me gustaría que, al menos, fueras un poco honesta conmigo —pidió—. He tomado estos minutos que tengo libres para llamarte y asegurarme de que todo esté bien contigo, y por supuesto, también con Mina.
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𝕋𝕨𝕠 𝕎𝕠𝕣𝕝𝕕𝕤 𝔹𝕦𝕣𝕟𝕚𝕟𝕘 | 𝕄𝕚𝕔𝕙𝕒𝕖𝕟𝕘
Romance|Secuela de Two Worlds Collide| Myoui Mina y Son Chaeyoung habían logrado liberarse de aquellas ataduras que por tantos años las mantuvieron atadas en el pasado. Ya no eran aquellas adolescentes desesperanzadas e inseguras, ahora eran dos mujeres qu...