At Night

1.-Espera que llegue a mi hogar.

Lily.

Actualidad.

Mis manos tiemblan y me cuesta un poco respirar.

Comenzar de nuevo nunca había sido tan aterrador, pero tenia que hacerlo, por mí, por mi estabilidad.

¿Qué mejor manera que un puesto como asistente de vuelo privado donde mi sueldo es buenísimo?

Aun así, cuando cierro la ultima cremallera de mi bolso de mano color violeta brillante mis manos están sudadas. He vendido lo poco que tengo y me he comprado algunas cosas a donde voy a vivir ahora, mi auto también lo tuve que vender para comprar algunas cosas que necesitaba.

Amaba esa cosa que gastaba mucha gasolina, pero debía hacerlo, no podía llevármelo, hay muchas cosas que no puedo llevarme.

Miro la habitación a mi alrededor vacía, solo queda la cama y las dos mesitas de noche, todo lo demás lo vendí, regalé o deseché.

Este es mi oportunidad, debo tomarla y aprovecharla.

—Lily— escucho la voz de Sam, mi mejor amiga entrando al pequeño departamento donde compartimos tantos años.

Ella aun se va a queda un tiempo, debe arreglar todo en su nueva casa. Su novio Alexander le ha comprado un lugar para ella, el día que llegó aquí llorando de la emoción supe que debía irme.

Se que ella va a estar bien, le confío su vida entera a Alex, se que la ama, así que ahora me toca a mi buscar mi propio camino.

Muy en el fondo yo siempre supe que no podíamos ser una misma para toda la vida.

—Holis—le sonrío.

—Pensé que ya te habías ido —camina hasta donde yo estoy para darme un abrazo—Estaba dispuesta a correr al aeropuerto y hacer que ese avión no despegue hasta poder darte un abrazo.

Sonrío al mismo tiempo que le devuelvo el abrazo, la amo, después de la muerte de mi mamá ella es todo lo que tengo en la vida.

El año pasado fue un año demasiado difícil para ella, y aunque no quería irme para quedarme a su lado, ella me amenazo.

—Tranquila, el vuelo sale en 3 horas, todavía tengo hora y media para llegar.

—¿Estás lista? —pregunta mirando todo a su alrededor.

—Sí, solo faltabas tú.

—¿Nos vamos? —pregunta con un nudo en la garganta.

Yo solo asiento y suspiro.

¿Cómo voy a sobrevivir sin ella?

—Voy a pedir un Uber —digo tomando mi celular.

—Alex esta abajo esperándonos, se ofreció a llevarnos—me informa.

—Alexander me ama, yo lo sé—digo en broma.

Ella sonríe y toma una de mis maletas. Yo tomo las otras dos maletas y mi bolso de mano para salir del lugar.

Algo extraño se posa en la boca del estómago, miro a mi alrededor y unas enormes ganas de llorar me invaden, este fue mi hogar junto a Sam durante tanto tiempo que me cuesta.

Aprieto más la correa de mi bolso y le doy una ultima mirada al departamento antes de cerrar la puerta y suspirar para no llorar.

Después que el novio de mi amiga me saluda todo el camino al aeropuerto es silencioso, llegamos, dejo mis maletas, hago todo lo que debo sin decir una sola palabra, tengo un nudo inmenso en mi garganta.

Justo cuando ya voy a hacer el ultimo chequeo para entrar al área de embarque me paro frente a Sam.

—Cuídate, por favor —susurra cerca de mi rostro —Eres una de las personas mas importantes en mi vida, necesito que estés bien.

Le doy una sonrisa de boca cerrada.

—Voy a estar al otro lado del país, pero si me necesitas así sea para elegir un vestido me llamas, que yo tomo el primer vuelo aquí.

A Sam se le sale una lagrima del ojo izquierdo que yo limpio con cariño.

Nadie se imagina lo mucho que la amo.

—Yo voy a estar bien, y sé que tú también lo vas a estar —me envuelve en un abrazo —Te amo demasiado—susurra en mi cabello.

—Yo me siento muy amada por ti—le contesto con sinceridad.

Una vez vimos un video que decía que la mejor forma de contestar un "te amo" o un "te quiero" es diciendo lo mucho que la otra persona se siente correspondida, lo vimos tan hermoso que empezamos hacerlo.

Sam se separa de mi con los ojos llorosos y el mundo en el estómago se intensifica.

Yo me acerco a Alex para darle una sonrisa.

—Espero te vaya bien —me dice el hombre frente a mí.

No tengo que advertirle nada sombre Sam, porque me ha demostrado mas de una vez que esta dispuesto a morir por mi amiga, le tengo tanto cariño que lo considero parte de nuestra pequeña familia.

Apenas tenga tiempo te paso el tono de lila que quiero para mi habitación —bromeo y él sonríe.

Sam me ha dicho que en su nueva casa hay tantas habitaciones que quieren amueblarme una para cuando yo venga de visita.

Nos damos un abrazo rápido antes de darme la vuelta para abordar mi avión.

Mientras camino por el pasillo de abordaje miro a mi alrededor; aquí comienza mi nueva vida.

Mi madre lucho mucho tiempo con un tipo de cáncer muy agresivo y a la final perdió la batalla, mi mejor amiga y hermana sufrió tanto que yo lo hice con ella.

Ya no tengo un novio que me reprime, soy libre.

Pero ya acepté que la muerte no es un castigo, es un descanso. Y mi amiga esta bien, me toca a mi retomar mis sueños, volver a recuperarme.