Lilianna.
—Entonces se fueron a España prácticamente a cogerse —dice Sam a través del teléfono.
Yo carcajeo con el celular pegado a mi oreja, de camino al centro le he contando todo lo que pasó en España hace cuatro días. Hasta hoy decidí decírselo, pensé que me iba a decir lo loca que estoy, pero se me olvidaba que la única persona en el mundo que nunca me ha juzgado es la chica al otro lado del país.
—No era el plan, pero una cosa llevó a la otra y ahora lo ando ghosteando desde que llegamos—le contesto cuando llego al local.
Miro el lugar por completo y sonrío, llevo mucho tiempo queriendo hacer esto.
—¿Por qué lo estas haciendo? Pensé que estabas aceptando toda esta locura porque te gustaba Will.
—Y me encanta ese hombre, pero sentí miedo —empiezo hablar un poco mas bajo.
Entro al lugar y lo primero que llama mi atención es la decoración, es bonita y de tonos claros.
—No te estoy entendiendo.
—Hola, buenas tardes ¿En que podemos ayudarle? —me habla la chica del otro lado del mostrador.
—Buenas tardes —le sonrio —Vine porque me quiero hacer el nostril, por favor
—Claro, ¿Aro o punto? —vuelve a preguntar la chica.
—Aro.
—¿Te vas hacer un puto pircing en la nariz? —pregunta Sam al otro lado de la línea.
—Sep, me lo voy hacer hoy. Tenia ganas de hacérmelo hace tiempo —le contesto.
—Tiene a una persona por delante, por favor sientese y le aviso —me informa la chica señalando una sala de estar.
—Gracias —camino a una de las sillas para sentarme.
—Okey, lo del pircing lo veremos luego. Necesito saber sobre ese miedo.
Suspiro y volteo la vista al ventanal de la tienda para ver los carros pasar en una de las avenidas principales de la ciudad.
—Al otro día —me quedo en silencio por un momento analizando bien las palabras que van a salir de mi boca —Me desperté y él estaba ahí mirándome como si fuese la mujer mas hermosa de este mundo, luego cuando salimos a desayunar hablamos como si fuésemos amigos de toda la vida, es... me dijo que pidiera lo que sea que él me lo daba, Sam.
—Y eso es malo por... —deja la frase abierta .
—Porque me hizo sentir mucho, más de lo que soy—le confieso —él me hace sentir y pensar cosas que no soy yo, Sam. Eso me asusta, me esta sacando de mi zona de confort.
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At Night
RomanceEsa ciudad me asfixiaba. Cuando una de las personas más importantes en mi vida falleció me enamoré de mi trabajo, me hace volar a todas partes y volver a pasar tiempo con mi persona favorita. Pero hace tiempo que no quería volver, que solo quería ma...