No estoy segura si William esta tratando de crear un habito conmigo o simplemente quiere mantenerme vigilada. He intentado evitarlo para no vernos en persona siempre diciéndole que estoy ocupada desde aquella vez en el centro comercial, cuando me dejó en el departamento mi cabeza daba tantas vueltas que me mareaba, no quiero volver a sentirme así.
Todas las mañanas supongo que cuando se despierta me llama, pregunta que hare en el día y no sé más de él hasta las 3 o 4 de la tarde que empieza a mensajearme de cualquier cosa hasta que le digo que voy a dormir. Muy en el fondo de mi ser sé que no me debería de gustar esto.
Justo ahora estoy preparando todo en el avión privado mientras que Sofia y Margaret hablan de algo que no me he concentrado mucho, en una hora despegamos a Argentina. Tengo un enorme dilema, quiero verlo, pero al mismo tiempo no me quiero sentir como aquella tarde, con una guerra entre lo que no debería hacer y lo que quiero.
—Escuché de otra tripulación que el joven William ya tiene novia y que es hace meses. Que la conoció porque es cuñada de su amigo Alexander Bustamante —habla bajo Sofia, eso llama por completo mi atención.
—Deja de llevar chismes de un lado a otro, Sofia. Es de mala educación —la regaña Margaret .
Sofia sonríe con inocencia y eso me saca una sonrisa a mi.
—No dejas que uno se divierta —se queja.
—Tu forma de diversión es rara —contesta Margaret.
—El chisme es divertido —esta vez hablo yo.
La mayor nos mira a ambas, niega con la cabeza y sale del área de cocina. Esa acción nos roba otra sonrisa a Sofia y a mi.
Zahir y Eduard nos informan que ellos ya esta listos para el despegue, y nosotras también terminamos de ordenar todo lo que necesitamos cuando uno de los hombres que estaba con William la otra tarde en el centro comercial llega en una jeep plateada y nos informan que ya están por llegar.
Todos bajamos de avión para ordenarnos en fila y recibir a los hermanos. Pero justo cuando se estacionan dos autos me arrepiento de no revisar la lista de pasajeros, porque va a viajar la familia completa.
Sale del primer auto Fabian Zambrano junto a su actual esposa, y del otro salen William, Salomé y un hombre que no identifico. Todos están excesivamente serios y distantes, como si se hubiesen peleado antes de salir.
—Bienvenidos a bordo —decimos todos en el mismo tono.
Mi mirada va directamente a William quien tiene un traje de tres piezas color burdeo que le queda a la perfección, las manos las tiene metidas en los bolsillos . Él también me esta mirando con las cejas arrugadas, pero a su izquierda algo llama mi atención, el otro hombre que viene con ellos me esta mirando fijamente y un desagrado se posa en la boca de mi estómago.
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At Night
RomanceEsa ciudad me asfixiaba. Cuando una de las personas más importantes en mi vida falleció me enamoré de mi trabajo, me hace volar a todas partes y volver a pasar tiempo con mi persona favorita. Pero hace tiempo que no quería volver, que solo quería ma...