I Hate You || TAYNICK || TAYLOR ZAKHAR & NICK GALITZINE ||

12

NICHOLAS

Lo primero que hice al despertar fue mirar a la cama de Taylor, pero no se encontraba en ella; su cama perfectamente hecha y sin rastro de él por la habitación. Aunque su perfume se había adueñado de la habitación y eso solo significaba que ya no se encontraba.

Me levanté y ni siquiera intenté vestirme o arreglar mi cabello. Me miré al espejo y era un desastre; labios hinchados y pelo totalmente despeinado.

Pues si que anoche lo pasé bien. Bastante bien de hecho.

No me molesté ni en ponerme una camiseta y bajé hasta la cocina encontrándome con todos desayunando y al contrario de mí; Taylor si parecía una persona bastante decente.

- Buenos días - les dije mientras iba a servirme una taza de café.

Taza de café; que en verdad me hacía bastante falta, una tostada y me senté frente a Taylor como acostumbraba a hacer desde que había venido a vivir a esta casa.

¿Ibamos a seguir sin mirarnos y sin hablar cada vez que pasaba algo entre los dos?

Por que joder, lo de anoche fue simplemente increíble.

Moví la cucharilla del café para llamar su atención; si, como un puto crio pequeño. Lo miré y lo volví a mirar para que sintiera mi mirada, obviando el hecho de que todos se encontraban aquí y que podían descubrirnos. Pero me daba igual para ser sincero, sabía que no iban a juzgarme por nada y en ese aspecto estaba bastante tranquilo.

Taylor sintió mi mirada. Quitó la suya del plato de comida y conectó con la mía. Quería que me mirara y saber si estaba arrepentido de todo lo que había pasado anoche, pero me miró y volvió a bajar la mirada.

- Chicos - nos llamó la atención Rob - necesito que vengan a casa conmigo, tenemos que hablar del trabajo de la casa.

Rob se fue seguido de mi madre y a los segundos nuestras hermanas nos dejaron a mi y a Taylor completamente solos en la cocina.

Si no hablaba él, lo iba hacer yo.

- Siempre queriendo llamar mi atención - me dijo Taylor mientras se levantaba y llevaba los platos sucios al fregadero.

¿Qué yo que? ¿Llamar su atención?

Caminé hasta estar a su lado y apoyé la mitad de mi cuerpo en el fregadero; mirando a Taylor de frente.

- Podías disimular un poco ¿no? - me miró y siguió fregando los platos.

- Esa palabra no existe en mi diccionario.

- Pues deja de provocarme frente a tu familia Nicholas.

Y dale con Nicholas...aunque a veces o casi siempre me ponía realmente que me llamara por mi nombre, y está vez no era la excepción.

Las palabras "nunca más" resonaron en mi cabeza cuando me quedé como un gilipollas mirando a Taylor.

Los besos en la ducha. Sus labios por mi cuello. Sus manos recorriendo toda mi piel...habia sido sin duda uno de los mejores orgasmos de toda mi vida y sinceramente no sabía si iba a poder frenarme cada vez que lo tenía cerca de mi como ahora.

- No te estoy provocando - me crucé de brazos.

- Deja...de...provocarme Nicholas - me dijo despacio - deja de mirarme como lo haces, deja intentar llamar mi atención y deja de...joder... - notó como le miraba descaradamente los labios - para ¿vale?