31

567 68 42
                                    

TAYLOR

No me había despegado de al lado de Nick desde que su padre había salido de esta casa.

A Nick le habían vuelto los ataques de pánico. Sabía que alguna vez le habían dado, pero verlo tal débil y roto lo hacía todo mucho peor. Verlo roto de dolor, ver como todo lo que había construido estos meses junto a mi se derrumbaba en tan solo un segundo; dolía y dolía por que lo amaba y verlo sufrir me hacía sufrir a mi.

Lo tenía tumbado encima de mi desde que habíamos decidido subir a su habitación. El cuerpo de Nick encima del mío, su rostro en el hueco de mi cuello, sus manos acariciando mi cabello y las mías trazando dibujos imaginarios en su espalda.

Estábamos en silencio desde hacía un buen rato. Pero los momentos de silencio con Nick últimamente no eran nada incómodos. Al contrario, me gustaba escuchar su respiración tranquila cuando estaba conmigo.

- Vida - Nick habló contra mi cuello.

- Dime, bonito.

- Gracias por estar hoy aquí.

- Te dije que estaría siempre - dejé un beso en su cabeza.

- Has conseguido calmar mi ataque de pánico. Nunca nadie lo había logrado.

Nick subió su mirada y me miró de una forma en la que nunca había hecho. Unos ojos brillantes, como si frente a él estuviera viendo algo único y especial.

- ¿Por qué me miras asi? - le pregunté - me miras diferente a otras veces.

- Por que frente a mi tengo al mejor hombre del mundo. A mi primer amor y al amor de mi vida.

¿Podia comerlo a besos ahora mismo?

- Y por que te adoro - dejó un beso en mis labios - y por que te amo como nunca he amado a nadie - otro beso en mis labios.

- Juro que ahora mismo cogeria una maleta para irnos a cualquier lado para que ese hombre no siga lastimandote.

- ¿Lo harías, dejarías todo por mi?

- Con tal de verte feliz haría cualquier cosa bonito.

- Suena bien - dijo en un susurro - tú y yo, lejos de aquí en donde nada ni nadie pueda hacernos daño.

Nick volvió a esconder su rostro en mi cuello. Desde que su padre había salido por la puerta de esta casa, se había aferrado a mi como un niño asustado, como si tuviera miedo de soltarme y que me fuera de su lado.

Sabía lo que sentía ahora mismo; miedo a que lo dejara, a que me marchara y destrozarle el corazón como una vez hizo su padre con Cat.

Pero estaba seguro de que si alguna vez, alguno de los dos rompería el corazón del otro, ese no iba a ser yo. Nunca podría dejarlo y tampoco tenía intención de que la vuelta de su padre hiciera que Nick dudara sobre lo nuestro. Estaba dispuesto a desmostrarle que lo amaba, que amaba sus defectos e inseguridades. Pero sobre todo, que lo amaba a él y que iba a cuidarlo hasta que él quisiera tenerme a su lado.

Seguí pasando mis dedos por su espalda; subiendo hasta su cabello y bajando de nuevo. Lo miré y se estaba quedando de nuevo dormido. Con su respiración en mi cuello que me hacía cosquillas y con su mano puesta en mi corazón.

I Hate You || TAYNICK || TAYLOR ZAKHAR & NICK GALITZINE ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora