I Hate You || TAYNICK || TAYLOR ZAKHAR & NICK GALITZINE ||

EPÍLOGO 1

TAYLOR

6 MESES DESPUÉS

- ¡Taylor!

Escucho la voz enfadada de Nick desde la planta de arriba.

Habíamos decidido mudarnos juntos y probar a convivir ya que en la nueva casa que nos habíamos mudado éramos demasiadas personas. La casa se encontraba en la misma urbanización en donde Cat y mi padre habían decidido comenzar una nueva vida. En realidad la casa de ellos estaban tres casas más abajo de la nuestra.

Nuestra casa.

Parecía surrealista que a casi nuestros veinticinco años que cumpliríamos los dos el mismo día en a penas dos semanas, ya hubiera logrado tantas cosas.

Trabajos estables y una casa propia que estaba a nada de ser habitada por nosotros dos y en un futuro, quizá con niños corriendo por ella.

- Te estoy llamando ¿estás sordo?

Giro el rostro y lo encuentro parado en el umbral de la puerta con los brazos cruzados.

- Estamos descansando ¿verdad Dylan?

Dylan y yo estábamos sentados en el suelo mientras comíamos algo después de una mañana dura de mudanza.

- Hemos trabajado mucho, Nick - contesta Dylan con la boca llena.

- Me parece perfecto que me esté encargando yo solo de la mudanza.

- Bonito, no queda a penas nada por traer ¿por qué no vienes con nosotros y descansas?

- Me estoy encargando de la habitación que será de Dylan para cuando venga a visitarnos y lo estoy haciendo todo solo.

- Venga Nick - digo cansado - solo estamos descansando un rato.

- Parece que voy a mudarme yo solo en esta enorme casa.

Nick acaba abandonando la Sala dejándonos a Dylan y a mí solos. No tardé en salir detrás de él para buscarlo y hablar las cosas.
Llevaba días de mal humor y no culpaba por ello. Estar en una mudanza desde hacía un mes se estaba volviendo cuesta arriba.

Todos los días eran cajas tras otras. Muebles que íbamos comprando, limpiar y volver a ordenador hasta que todo llegara a su fin. Y luego estaba el tema de comenzar a vivir juntos, sabía que estaba nervioso por esta nueva vida, muerto de miedo por si las cosas no iban bien, y lo que Nick no sabía es que yo me sentía igual que él; con miedos e inseguridades por esta nueva etapa.

Cuando lo encuentro veo que está en la cocina, dándome la espalda y con sus manos apoyadas en la isla. Llego hasta él en silencio y rodeo su cuerpo con mis brazos, apoyando mi mentón en su hombro.

- No estés enfadado bonito - dejo un beso en su cuello - entiendo perfectamente como te encuentras. ¿Estás agobiado?

- Un poco - contesto con la voz baja - quiero que todo esté perfecto para cuando digamos de venir a vivir aquí.

- Y está quedando perfecto cariño - poco a poco le doy la vuelta para que quedemos de frente - la casa está quedando hermosa y estoy seguro que esta misma semana podemos comenzar a vivir aquí.