del amor al odio hay un solo...¿pato?[Omegaverse][TERMINADA][Corregido]

-enredos -

Lucifer pensaba que a Alastor no le gustaba, porque a él no podía gustarle un beta. Era todo menos tonto. Sabía que aunque era posible, nunca podría marcar a un beta, como le pasó con Lilith.

Lucifer bajó relajado de la vida. Había un aroma muy dulce esa tarde en el hotel. Cuando llegó abajo, Alastor estaba temblando mientras Ángel trataba de llevarlo a su "nido", y entonces el cerebro del Rey del Inframundo hizo corto circuito.

Ángel y Vaggie se llevaron al cervatillo hasta su cuarto.

¡Charlie! - el Rey del Infierno tomó del brazo a su hija, quien le dio una buena mirada de ojos abiertos.

¿Qué pasa, papá? - Charlie lo miró con duda. Estaba un poco ocupada; tenía que encargarse del hotel y su productor había entrado en celo sin previo aviso.

¿Alastor es omega? - Lucifer preguntó con los ojos bien abiertos.

Sí... papá, ¿recuerdas que Alastor ayuda a Sir Pentious a hacer su nido? - Charlie preguntó, no podía creer que su padre no se hubiera dado cuenta.

Oh... - por la mente de Lucifer pasaron todas las estrellas y las galaxias que hizo de una sola vez.

Bueno, supongo que puedes confundirlo porque Alastor esconde muy bien su aroma para hacerse pasar por beta. Dice que así puede evitar a los molestos alfas - Charlie se rió nerviosa, en realidad era la mejor opción para los omegas del infierno.

Claro, ve, estás ocupada - Charlie se fue a ordenar unos documentos sobre el hotel, mientras Lucifer se quedó pensando. ¿Le gustaba Alastor? No podía estar seguro por solo algunas interacciones con el demonio de la radio... ¡si no le daba un buen beso! ¡Entonces sabría si le gustaba el omega!

Lucifer caminó con una gran sonrisa hacia la zona omega. Solo tenía que besar a Alastor y entonces tendría la respuesta, pero se detuvo cuando Vaggie se paró frente a él con los brazos cerrados.

¡Vaggie, necesito ver a Alastor, es realmente importante! - Lucifer sonrió mientras esquivaba a la chica, pero se paralizó cuando sintió el aroma de una omega enfadada con la mano sobre su hombro y se dio la vuelta nervioso, no quería que la novia de su hija no lo quisiera.

No, alfas en la zona de los omegas - Vaggie gruñó.

Pero... ¡Charlie! - Lucifer miró a su hija que sonreía nerviosa.

Lo siento, papá, son las reglas del hotel. A menos que tu pareja esté en la zona omega, ningún alfa puede entrar a buscarte. Lo mismo en la zona alfa y beta, y Alastor no tiene pareja, así que dentro de la zona nadie lo molesta - Charlie suspiró cuando su padre se rindió.

Está bien, entonces esperaré a que salga - Lucifer sonrió mientras salía del hotel.

Cuando se aseguró de que nadie lo estaba siguiendo, corrió hacia la parte de atrás del hotel donde estaban las ventanas y se lanzó en vuelo, buscando ventana tras ventana para ver dónde estaba Alastor, hasta que se dio cuenta de que en lo más alto había un balcón abierto de par en par.

Lucifer se dejó caer en el balcón y miró hacia adentro. Una voz salía de la esquina, solo velas iluminaban la habitación y su corazón palpitó al ver a Alastor cantando mientras tomaba sus prendas para su nido que tenía guardadas, escondidas para que nadie las encontrara.

Lucifer decidió que esperaría a que Alastor se diera cuenta de su presencia mientras él disfrutaba de la vista.

¿¡Qué haces aquí!? - Alastor tomó con fuerza su micrófono, no necesitaba a otro vox en su vida, le bastaba y sobraba con los 3 acosadores personales que tenía.

Oh, nada, solo veía un poco de la construcción de tu nido, tenía curiosidad, como eres tan ordenado, pensé que tu nido sería más... organizado - Alastor se enfadó ante esto, su nido ni siquiera estaba construido aún.

Aun no está terminado - Alastor gruñó mientras apuntaba a Lucifer con su micrófono listo para atacar al imbécil.

Lucifer sonrió y se desvaneció para aparecer detrás de Alastor sosteniendo su cintura, lo dio vuelta para que ambos quedaran mirándose cara a cara.

¡Suéltame! - Alastor no se sentía bien gracias a su celo, menos con este alfa idiota molestando. - Voy a llamar a Char - Alastor fue callado, los brazos de Lucifer lo rodearon con una fuerza pasional que no había sentido en años, y entonces sintió la embestida brutal de los labios naufragos de Lucifer chocando contra las olas de los suyos mismos, una oleada de calor que los invadió a ambos dejándolos paralizados de amor, la mirada de Alastor se iluminó de la nada, Lucifer se estremeció mientras devoraba la boca del otro, esta conexión que habían leído en los libros de cuentos de hadas, Lucifer quería más, se separó para dejar que Alastor tomara aire y antes de que se despegara, hizo que Alastor inclinara la cabeza por encima de su hombro y lo besó, suavemente esta vez, pero pronto no se contuvo más, tuvo una creciente intensidad de empujar, se obligó a sí mismo a agarrarse de Alastor al ver cómo trataba de separarse de su conexión, la boca insistente de Lucifer devoraba entre bocanadas de aire los labios que temblaban del demonio de la radio, evocando sensaciones que Alastor nunca tuvo oportunidad de vivir en vida, y de alguna manera eso lo asustaba, y antes de que el vestigio lo lanzara sobre la cama a merced de Lucifer, Alastor reaccionó rápidamente, poniendo sus manos sobre los hombros del Rey del Inframundo y empujando para escapar de ese beso encadenante.

-Suéltame, por favor, ya... no-Alastor suspiró con las orejas abajo y los ojos acuosos, intentando mirar débilmente hacia otro lado para persuadir al ala de dejarlo ir.

Los ojos de Lucifer estaban lanzando llamas y Alastor se sintió intimidado, maldito enano.

-¡Charlie!- El grito salió tembloroso del demonio de la radio, que aprovechó la sorpresa de Lucifer para desaparecer entre las sombras.

-¡Papá, sal de aquí en este instante! -Charlie tomó de la mano a su padre, antes de que Vaggie los atrapara.

Lucifer no dejaba de mirar el cuarto, su omega...

Alastor cerró todo rápidamente, ese enano descarado era su alfa... no, su alfa no iba a ser ese patán y punto.