del amor al odio hay un solo...¿pato?[Omegaverse][TERMINADA][Corregido]

-Vaggie -

Vaggie estaba cansada, Dios se estaba quedando momentáneamente en el hotel y no dejaba de mirarla y observarla, se sentía un poco incómoda. ¿Y si quería hacerle algo a su bebé?

- Alastor- Vaggie se acercó al otro Omega, quien le dio una gran sonrisa como siempre.

- ¿Qué pasa, querida? ¿También quieres venado podrido con helado y piña? - Alastor ofreció y Vaggie suspiró. Si sus gustos de embarazo eran raros, los de Alastor eran cuatro veces peor.

- No... solo... no quiero estar sola. Todos están fuera y él no deja de mirarme - Vaggie suspiró con los brazos cruzados, mientras Alastor observaba la mirada psicópata que Dios tenía en la cara.

- Se ve como... un degenerado común - Alastor sonrió desde su tv.

- Los estoy escuchando~ - Dios canturreó.

- Y un secuestrador - Vaggie aceptó el té; este era de Melisa y la ayudaría a calmarse un poco.

- Ey, los escucho - Dios se acercó.

- Bueno, supongo que es de familia. Lucifer también se veía así cuando comenzó a cortejarme - Alastor sonrió con el recuerdo, estaba seguro de que esta noche molestaría a Lucifer con eso, seguro que se avergonzaría.

- Charlie se veía más como... si fuera una acosadora. Recuerdo que miraba cada paso que daba para ver si no me caía por mi nueva perspectiva sin mi ojo - Vaggie suspiró.

- Estoy aquí - Dios lo volvió a intentar.

- Sabemos que estás aquí - Vaggie le gruñó y Dios le sonrió a la pequeña angelita.

- ¿Por qué observas tanto a Vaggie? Es decir, su rudeza natural llamaría la atención de cualquiera. Pero sigue siendo raro... - Alastor sonrió, sirviendo té, mientras Dios hacía aparecer una silla y se sentaba junto a ellos en la mesa; él bebía licor.

- Bueno, es... es el primer ángel que se junta con un demonio. Un ángel puro. Yo no la desterré del infierno, así que sigue siendo un ángel puro, y eso me lleva a pensar... que debería estar en el cielo - Dios le sonrió a Vaggie, que lo miró sorprendida.

- No, no, eso está fuera de discusión. Quiero estar con Charlie, es mi alfa, es mi pareja y vamos a tener un bebé juntas - Vaggie se cubrió el abdomen con los brazos.

- Ella también puede ir al cielo - Dios le sonrió a la chica; era fuerte y brillante, quería ponerla bajo sus alas. Podría ser una gran líder del cielo.

- Si en sus sueños, majestad. ¿Sabe cómo se pondría Lucifer si trata de llevarse a uno de su manada al cielo, más... una Omega de la manada en embarazo? - Dios suspiró; Alastor era perspicaz, por algo era el Omega de su hijo.

- Bueno, en realidad, quería llevarme a toda la manada al cielo, eso incluyendo a Lucifer - Dios sonrió, pensando que sus argumentos eran lo más lógicos.

- Él se negará de todas maneras. Está poniendo mucho esfuerzo en el infierno, demasiado como para dejarlo e ir al cielo - Alastor se rió.

- Bueno, puede seguir bajando cuando él quiera. Pero viviría en el cielo - Dios miró a ambos Omegas con un puchero, y cuando los vio negar con la cabeza al mismo tiempo, suspiró.

- ¿Entonces de verdad no hay nada que pueda hacer para que ustedes quieran subir al cielo? Nunca pensé que tendría que pronunciar esas palabras - Dios se rió de sí mismo.

- No, me gusta mi hogar. Además, no es que no vayas al cielo de vez en cuando para que vea a la manada y a los demás - Alastor sonrió mientras comía su mezcla.

- ¿Eso no le va a hacer mal al bebé? - Dios miró con recelo el plato de "comida".

- Bueno, lo hará fuerte - Alastor siguió comiendo.

- La verdad, creo que es extraño. He visto antojos de embarazos de un nivel raro, como yo que ayer quería comida china con chocolate, sandía y yogurt todo junto, Pero... ¿Eso al? - Vaggie y Dios miraron interrogantes al Omega que suspiró.

- Bien... pero no pueden decirle a Lucifer. Se supone que es un secreto para cuando el bebé nazca - Alastor miró a ambos, que asintieron rápidamente, muertos de curiosidad.

- El bebé viene con alas, y exige... más cosas de lo normal - Alastor suspiró.

- No me jodas... - Vaggie armó rápidamente el rompecabezas en su mente. ¡Tu bebé también nacerá como mestizo! ¿Pero cómo? - Vaggie miró a Dios, que parecía a punto de reventar de la emoción.

- Bueno... tal vez... ¡Podría ser porque a Lucifer lo recibimos nuevamente en el cielo con el poder de un ángel original! Eso explicaría el nivel de energía que exige el bebé, además de que Lucifer ya no gasta su poder en barreras y todas esas cosas - Dios comenzó a murmurar mientras Alastor seguía comiendo.

- ¿Estás seguro de no decirle nada a Lucifer? Podría ser... - Vaggie suspiró. El doctor se lo había advertido; podía ser peligroso y decidió tomar el camino.

- No se lo diré, porque aún teniendo la protección del mismo Dios, si se entera, tratará de que aborte - Alastor lo sabía; a Lucifer siempre le importaría más su vida que la del bebé, porque no podía permitirse perder a su pareja destinada, no después de todo lo que han pasado.

- Tiene razón. Además... tienen mi palabra, nada les pasará, están protegidos de todo - Dios sonrió mirando a ambos Omegas.

-¿Cuándo le vamos a encontrar un Omega a Amenadiel? Quiero decir, ¡Emily debe querer la familia completa! - Vaggie y Alastor comenzaron a reír.

-Ese chico no le pone el ojo a ninguna de mis creaciones- Dios suspiró, él también quería una pareja para su hijo.

-Tal vez deberías enviarlo a la Tierra para que conozca más a fondo esas creaciones- Ángel apareció por detrás bebiendo chocolate caliente.

- Eso es sexo loco-  Vaggie le tradujo a Dios.

-Oh, Amenadiel es demasiado casto para eso, ya intenté encasquetarle a San Pedro-, Dios suspiró.

-Bueno, tal vez solo dar unas vueltas, tal vez conozca a alguna psicóloga o algo por el estilo que le dé un pequeño angelito- Alastor miró a Dios y al rey del cielo se le ocurrió una idea, sonrió, se despidió y se fue al cielo.

-Creo que lo metimos en un problema- Ángel se sentó.

-¿Y ahora qué, tú?- Alastor y Vaggie atacaron mientras Ángel se atragantaba.