"Con este matrimonio nuestras empresas se fusionaron, convirtiéndose en la más importante y poderosa del gremio. Somos socias con los mismos deberes y derechos.
Ella me odia, soy la mujer que arruinó su vida, solo un contrato...
A penas hablamos y...
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Ana de armas as Amelia Ricciardi
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A ella le encanta desesperarme.
vengo enfurecida porque fue a ver a Calvin justo después de lo que intentó hacerle y la señora me recibe recién bañada en short y blusa deportiva, su cabello húmedo, sin ninguna gota de maquillaje en el rostro y...
Dios se veía tan sexy de esa forma.
No es que nunca haya admirado su belleza o deseado solo que...
Karlie por un lado y la pérdida de nuestro hijo es algo que me hace sentir culpable por si quiera mirar a Amelia de una forma diferente.
Y por otro lado está Amelia siendo diferente a lo que me dicen y lo que he pensado.
Pero ahora estoy aquí viendo cómo se come un sándwich después de una conversación sin sentido viendo quién de las dos es más pesada y sarcástica.
—¿Puedes dejar de mirarme como a una cosa extraña?
—Estoy tratando de analizar cómo siendo tan bella puedes ser tan cruel y despiadada. -me vira los ojos.
—Mírate al espejo y lo entenderás. Eres bella, pero cruel, fría, despiadada además está de más decir lo imbécil e ingemia que eres.
—¡Ningún ingenua!
—Si tu lo dices. Pero te haz dejado manipular por tu noviecita y llenas cinco años odiándome por sus mentiras, ahora ella regresa y lo sigues haciendo. Así que para mi eso es ingenuidad.
—¿Ves que te encanta hacerme enojar? -la miro con mi creciente enojo.
—Yo te digo tus verdades y te enojas conmigo, el resto te dice mentiras sobre mi y te enojas conmigo. ¿Cuál es la diferencia? Vives enojada conmigo haga o no haga nada.
—¿Y cómo no voy a estar enojada? Haces unas locuras que me preocupan.
—Bueno como sea. ¿Te has dado cuenta que desde que llegaste no me has dicho lo que quieres? Solo haces pregunas estúpidas y me miras como si fuera una cosa extraña, es incómo Taylor.
—Te dejo comer, te hago preguntas simples y no me respondes ni una.
—No me interesa explicarte cosas para que luego tu familia y novia lo nieguen y yo siga siendo la mala, asi que te vuelvo a repetir. ¡NO ME MPORTA LO QUE PIENSES! Ahora muéstrame el diseño del que hablas para que te puedas ir y me dejes en paz en mi hogar.
