"Con este matrimonio nuestras empresas se fusionaron, convirtiéndose en la más importante y poderosa del gremio. Somos socias con los mismos deberes y derechos.
Ella me odia, soy la mujer que arruinó su vida, solo un contrato...
A penas hablamos y...
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Después de algunas horas en la oficina recibo una llamada de Olivia para informarme que nuevamente T-WIZZLE insiste en reunirse con nosotros.
¿Cuál es la insistencia de Taylor?
—Dile que tus jefes no están ahora. No se invéntate algo, pero NO les des cita.
—Está bien Señora. cuelgo y me voy a casa para cenar con mi madre, hoy les voy a decir que Taylor y yo nos divorciamos, espero que no se arme un escándalo.
Cuando llego me recibe Anabelle, mi ahijada de cuatro años, lo más hermoso que tiene esta casa, es castaña de ojos verdes, muy tremenda y parece mentira pero también es ahijada de Taylor.
Esa fue una ocurrencia de mi prima Aurora, por más que le dije que no iba a aceptar aún así se lo propuso, y sorpresa me llevé cuando aceptó sin pensarlo dos veces.
—Madrinaaaa. -sale corriendo a mis brazos. —¡Mira mi vestido nuevo! Es bello ¿Verdad? Me lo puse para ti y mi madrina.
—Estás muy hermosa princesa, pero la madrina no viene hoy.
—Pero mami dijo que había llegado de su viaje. -pone su carita triste con pucheros, se ve tan tierna. No se cómo es que Taylor le robo el corazón a esta muñeca.
—Vamos a hacer algo, te tomamos unas fotos y se las mandamos para que vea lo hermosa que te ves, ¿Si?
—¡¡Siii!! -se baja de mis brazos saltando y en eso aparece Aurora, mi prima, con toda la elegancia que la caracteriza. No parece que tuviera una hija de 4 años.
—Cada día estás más inteligente y hermosa. -le digo mientras la saludo.
—Ojalá y haya heredado tu inteligencia, porque la mía y la del padre no da para mucho. ¿Dónde está Taylor? Sé que ya volvió.
—No va a venir, ni hoy ni nunca más. -me mira asombrada y vemos a mi mamá bajando las escaleras.
—Hija llegas temprano. -me acerco y le doy un beso, pueden ser distante y fría, pero la amo, es mi madre y es todo lo que tengo.
—Si es que tengo una reunión más tarde pero no quería dejar de venir, además necesito hablar contigo.
—Claro, pasemos al despacho, ven, dame un abrazo. -me sorprendo, pero se lo doy.
—Cuéntame mamá, ¿Cómo te fue en punta cana? -mamá se fue el mes pasado a tomar una actualización en su especialidad como médica cirujana, y regresó a penas hace una semana pero no habíamos podido hablar.
—Muy bien hija, es un lugar muy colorido y la gente ni se diga. Te traje unos regalos, tu tía quería traerse toda la tienda.
