Terminamos todos en el centro comercial: Lia, Nysa, mi manipulable novio y yo. Y claramente la emoción era palpable en el aire. Optamos por quedarnos en la cafetería frente a Starbucks, para tener una vista clara del lugar. Mientras saboreábamos nuestras bebidas, estábamos ansiosos, observando cada movimiento en Starbucks, esperando ver a la señorita Rossel.
De repente, una mujer rubia, alta y delgada entró. Lia señaló emocionada, —¡Ahí está! Esa es la maestra, la señorita Rossel—. La ironía de la situación no se perdió en ninguno de nosotros.
Miré a Nysa con una expresión cómica y exclamé— ¿Tu profesora es modelo?
— Fue modelo en su juventud— Comentó Lia asintiendo— ¿Quiere ver sus fotos?
— No— Negué volviendo a mi café.
La conversación en la cafetería seguía su curso, y Nysa intentaba tranquilizarme antes del encuentro planeado con la señorita Rossel.
—Mamá, tranquila, solo será una actuación— dijo Nysa con voz calmante.
Lia, queriendo aportar algo positivo, intervino— Usted es más guapa, señora Khan.
Sin embargo, Nysa corrigió rápidamente.
— Bueno, en realidad, mamá y Khan no están casados—, lo que causó un pequeño giro en la conversación.
Lia se disculpó de inmediato y rectificó— Oh, lo siento. Bueno, entonces no es taaaa..aan grave— exageró— No están casados—. Las palabras de Lia llevaron consigo un toque de humor, y las tres compartimos una risa ligera antes de volver a nuestra atenta observación del desarrollo de la "actuación" desde nuestra posición en la cafetería.
— Me gusta como suena el "Señora Khan"— Intervino Shahrukh besando mi frente. Mordí mi labio reprimiendo una sonrisa— ¿Kajol, puedo?
Con un gesto de complicidad, Khan buscó mi aprobación antes de dirigirse a Starbucks. Nuestros ojos se encontraron en busca de permiso, mientras él sostenía la carta para cubrir su movimiento.
Yo, con una mirada resignada pero comprensiva, asentí ligeramente. Sabía que era importante para Nysa resolver este asunto, y confiaba en la habilidad de Khan para manejar la situación con gracia.
Khan captó la señal y, con un ligero movimiento de la carta, cubrió el gesto que seguiría. Se inclinó hacia mí y depositó un beso suave en mis labios, ocultando el gesto de la vista de Nysa y su amiga.
Khan se preparó para enfrentar lo que fuera que encontrara en Starbucks.
— ¿Qué es lo peor que podría pasar, señora Kajol?— Nysa se rió del comentario de su amiga y yo negué encogiendo mis hombros— Le soy sincera, yo no habría mandado a mi novio a la boca del lobo.
— No, yo menos— Dijo Nysa bebiendo de su milkshake de leche de almendras y frutos rojos. Iba a responder apretando los dientes, pero mi hija se adelantó— Pero es mi tío Khan, ha estado enamorado de mi madre desde siempre, así que, no es tan tonto como para arruinarlo.
— Buen punto.
— Niñas, no me pongan nerviosa— Me rasqué la cabeza algo fastidiada antes de seguir a Khan con la mirada, quien se acercaba a la fila, justo detrás de la deslumbrante maestra.
Mientras Nysa y Lia se sumergían en sus estudios en la cafetería, mi atención se desviaba hacia la interacción entre Khan y Meredith Rossel. Desde mi posición, podía ver cómo se desarrollaba la conversación entre ellos, y no pude evitar notar la expresión encantada en el rostro de Meredith mientras hablaba con Khan.
La sonrisa radiante de Meredith y el brillo en sus ojos no pasaron desapercibidos para mí. Era evidente que estaba disfrutando de la compañía de Khan y que su presencia le causaba una impresión favorable.
Por otro lado, Khan se mostraba amable y cortés, como siempre. Su comportamiento era impecable, pero había algo en la forma en que interactuaba con Meredith que me hacía sentir un poco incómoda.
A pesar de mis sentimientos encontrados, decidí no intervenir. Confíaba en Khan y en su capacidad para manejar la situación de manera apropiada. Además, Nysa y Lia estaban ocupadas con sus estudios y no parecían estar prestando mucha atención a la interacción entre Khan y Meredith. Así que me limité a observar en silencio.
Y parecían bastante animados, hasta que ambos obtuvieron su café y llegó el momento de despedirse. No hace falta decir que mi uña se rompió de tanto morderla en impaciencia, cuando observé con creciente incomodidad cómo Meredith se despedía de Khan con un beso en la mejilla y escribía algo en el vaso de café que Khan acababa de dejar. Sentí un leve apretón en el corazón al presenciar ese gesto, y mi ceño se frunció ligeramente.
La acción de Meredith me hizo sentir una punzada de celos y molestia. A pesar de mis intentos por mantener la compostura, no pude evitar sentirme un poco incomprendida y preocupada por la conexión entre Khan y esta mujer.
Antes de que pudiera expresar mi incomodidad, Lia rompió el silencio con un comentario juguetón— Vaya, parece que funcionó mejor de lo que pensamos—, dijo con una sonrisa traviesa.
Su comentario, aunque hecho en tono ligero, solo sirvió para aumentar mi incomodidad. Me quedé en silencio, procesando mis emociones mientras observaba cómo Khan se despedía de Meredith y volvía a nuestra mesa.
A pesar de la inquietud que sentía en mi interior, decidí no dejar que mi molestia se apoderara de mí. Opté por guardar mis preocupaciones para mí misma por el momento, pero sabía que tendría que abordar este asunto con Khan más tarde.
Antes de que pudiera procesar completamente lo que había visto, Khan regresó a la cafetería y se acercó directamente a mí, envolviéndome en un cálido abrazo—. Preciosa— Sabía que se sentía culpable, pero dentro de todo, su gesto reconfortante me recordó que, a pesar de cualquier incomodidad que pudiera sentir, estábamos juntos en esto.
Mientras Khan me abrazaba, Lia intervino con su característico humor— Genial, la maestra te dio su número. Es hora de la fase 2, textear, dijo con una sonrisa traviesa.
Su comentario, aunque destinado a aligerar la situación, solo sirvió para aumentar mi inquietud. Nysa intervino con su habitual ingenio—La maestra tiene que enamorarse de ti, tío Khan—, dijo con un tono juguetón.
Khan se rió un poco— Esto se acaba aquí— se mostró reacio a la idea, dejando claro que no quería involucrarse demasiado con la maestra. Sentí un ligero alivio al escuchar su postura, pero también una preocupación persistente por la situación.
— ¡Pero tío Khan!— Rodé los ojos ante el comentario de Nysa, tratando de mantener la compostura a pesar de la creciente incomodidad que sentía. Mientras intentaba recuperar la calma, noté algo en la mejilla de Khan: un rastro de labial que parecía haber sido dejado allí por la maestra.
— Límpiate— Lo aparté mirando hacia otro lado y él se tocó ambos lados de la cara preocupado, tallando la mejilla derecha—La otra, Khan.
— Uh... creo que tendremos problemas— Lia murmuró.
Después de la serie de eventos en la cafetería, decidí que era hora de un cambio de escenario. Miré a Khan y sonreí, anunciando— Suficiente por hoy. Me llevaré a mi novio lejos de ustedes y su maestra. Tienes permiso para volver hasta las 10 de la noche.
Nysa, nerviosa asintió en silencio.
Khan, siempre dispuesto a seguir la corriente, me siguió con una sonrisa cómplice. Pero antes de que pudiéramos alejarnos, me susurró con humor— Apenas son las 4, ¿no es un poco tarde volver a las 10?
Ignoré su comentario, decidida a mantener mi postura. Nos despedimos del grupo y salimos a la calle. Una vez afuera, Khan y yo nos detuvimos por un momento y suspiré, pensativa.
— Creo que quiero hacer lo que propusiste en el gym—, le dije con una sonrisa traviesa. La emoción se encendió en los ojos de Khan mientras asentía entusiasmado.
Sin perder tiempo, detuvimos un taxi rápidamente y nos dirigimos a casa, listos para nuestra tiempo juntos.
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El peso del silencio
FanfictionEn la vibrante ciudad de Mumbai, Kajol y Shahrukhcomparten un lazo que ha resistido las pruebas del tiempo y las complicaciones de la vida. Mejores amigos desde la adolescencia, su amistad evolucionó silenciosamente hacia un amor secreto que se ha m...