PLEGARIAS

CAPITULO 20

El día de mi cumpleaños lo pasé básicamente con mis hermanos y Mateo recorriendo un poco de Buenos Aires, fue lindo, no les voy a mentir, me sentí muy feliz.

Guido y Kevin no se quedaron mucho tiempo, ellos tienen su trabajo allá en Estados Unidos, los entiendo, no me enojo, la pase lindo mientras estuvieron.

Se preguntarán mi mamá, en que anda? sí apareció por lo menos para mi cumpleaños? la respuesta es sí, con un mensaje a las once de la noche, pero bueno, por lo menos algo mas que el año pasado.

Últimamente estoy viviendo una vida muy diferente a lo que estaba acostumbrada a vivir, antes no hacía otra cosa que estar sola encerrada en mi pieza, consumiéndome, ahora me junto mucho con mis amigas y no me separo de Mateo, y lo raro es, que no me asfixia en ningún momento su compañía.

Esta casi instalado en el departamento, no vamos mucho a su casa porque esta su papá con la pareja, y preferimos estar solos, y la verdad, a mi no me molesta para nada que sienta que mi casa es la suya.

Descubrí que una de las cosas que mas me gusta hacer es acompañarlo al estudio, podría estar horas ahí adentro sin aburrirme, mientras él está grabando aprovecho a escribir, de hecho el en este momento está trabajando con su productor, yo sentada en un sillón muy cómodo que hay.

No solo escribo acá en el word, sino que le estoy agarrando la mano a las rimas, a los poemas, a las canciones, es otra forma de desconectar, y la verdad, me parece brillante.

...

- vamos hermosa? - preguntó el chico pasando su mano por la pierna de la protagonista

Esta lo miró y cerró la computadora de inmediato.

- terminaste? - habló frunciendo el ceño confundida

- no, pero estoy muerto

- *sonríe de lado* bueno, vamos - parándose

Se despidieron del productor del artista y volvieron al departamento, no sin antes pasar a comprar algo para comer, no solo estaban cansados, sino también estaban muertos de hambre.

- escribiste algo más? - preguntó Mateo mientras comían

Sabe lo de las canciones, no lo del "diario intimo".

- no, estoy bastante estancada, me sale siempre lo mismo

- si tranqui, es normal

- y a vos que te pasa? estas serio desde que volvimos del estudio

- *suelta un suspiro* no se, yo también me siento como estancado

- por? si esta re linda la canción que estas haciendo

- *niega con la cabeza con mueca de desagrado* como que no me convence nada

- y bueno Matu tomate tu tiempo, vos mismo lo dijiste, es normal

- hace mucho no saco un tema, quiero sacar algo

- bueno pero mejor sacar algo de lo que estes 100% seguro, antes que sacar algo por sacar

- si ya se

- igual no se que no te convence, a mi me encanta la que estas haciendo

- si?

La chica responde asintiendo con la cabeza.

- a mi me encantas vos

- *se muerde el labio* cállate - tratando de ocultar su cara, ya había sentido el calor de sus cachetes colorados

- *suelta una carcajada* hasta cuando te vas a seguir poniendo nerviosa con las cosas que te digo?

- hasta que me dejes de gustar, en unos días seguro

- ah, si seguro - acercándose

Estaban comiendo en la cama, sentados enfrentados, con la caja de pizza de por medio, aunque en la caja solo quedaban los bordes de las porciones, que Mateo no los come, y Nicole ya estaba llena.

Unieron sus labios en una carcajada, y se besaron lo suficiente como para tener que correr eso que los estorbaba, y poder terminar el encima de ella.

Se siguieron besando hasta que la ropa sobró, y se encargaron de ir sacándosela hasta quedar totalmente descubiertos.

Mateo ya no estaba encima de Nicole, ella había tomado el control, y dando vuelta la situación se posicionó arriba de el, y ya penetrada, empezó a moverse generando suspiros de satisfacción, de parte de ambos.

El chico no tardó mucho en volver a ser el cuerpo dominante, y en cuestión de segundos dejó que la habitación se inunde de el sonido del choque de sus pieles, y de gemidos provenientes de la chica, aunque a el se le escapaban algunos de vez en cuando.

- te amo - soltó Nicole en un suspiro ahogado, mientras llegaba al orgasmo

Lo largó casi por inercia, casi sin darse cuenta, por eso para ella pasó desaparecido; pero Mateo no lo esperaba, y aunque le encantó escucharlo, lo tomó por sorpresa, nunca antes ninguno de los dos se lo había dicho, por más de que ya hacía un tiempo de que sentían amor el uno por el otro.

Al terminar se recostaron como siempre, ella en su pecho, el acariciándole el pelo, y cada tanto bajando a su brazo, provocándole piel de gallina por el tacto tan suave. Se habían puesto a mirar la serie.

- lo dijiste en serio o porque estabas caliente? - preguntó por fin el chico después de un rato de silencio

- que? - lo mira confundida después de poner pausa

- a lo que me dijiste antes

- no entiendo

- *suelta una carcajada* era porque estabas caliente - confirmó el mismo su pregunta

- no entiendo lo que me decís, que te dije? en que momento?

- el te amo Nicole

- aaaaaaaaahhhhh - vuelve a recostarse en su pecho - si que se yo

- si que se yo? - pregunta indignado sacándole el control, antes de que la chica despause la serie

- *lo mira nuevamente y alza los hombros* que preferís? que te lo diga porque lo siento o porque estaba caliente?

- me chupa un huevo lo que prefiero, por que lo dijiste?

Nicole soltó un suspiro, lo costaba demasiado asumir y demostrar lo que le pasaba, hasta ella estaba sorprendida de haber largado esas palabras.

Y aunque si, no se las pudo contener por la calentura, lo ama, de eso no cabe dudas, y ella sabe que a el le pasa lo mismo, pero el miedo está intacto, no se le va.

- deja Nicki, no importa - se resignó el chico volviendo a poner lo que estaban viendo

- no - sacándole el control para pausar nuevamente - es obvio por que te lo dije

- no, no es obvio, sino no te preguntaría

- vos me amas? - preguntó insegura, antes de responder ella su verdad

- te pregunté yo primero, pero ya me respondiste sin decir nada - pareciera enojado

- no, no te respondí

- respóndeme entonces

- obvio que te amo - largó tratando de soltarse - mucho, como pensé que no iba a poder amar a una persona nunca en mi vida, y menos en tan poco tiempo

Mateo sonrió inmediatamente, en el fondo sabía lo que a la chica le pasaba, se notaba, pero escucharlo de su boca era hermoso.

- ves que cuesta pero lo largas

- *le pega suave en el hombro mordiéndose el labio* sorete

- yo también te amo hermosa de mierrrrrda - agarrando su brazo para llevarla hacia el y poder besarla