Imagina Con Rosé

¿Mal día?

Me quité mi abrigo y mis zapatos dejando salir un suspiro.
Hoy no había sido un buen día.
Y estoy cansada y estresada, lo único que quiero es a Rosé.

Esperaba que estuviera en casa para que me recibiera con un abrazo.
Sin embargo, no pude encontrarla en el primer piso de la casa.
Pero, por suerte, si estaba en casa.

Lo supe al recibir una notificación de su "Live" en instagram.
No quería interrumpirla pero sabía que no me sentiría mejor si no la veía un par de minutos.

Podía escuchar su risa desde nuestra habitación.
También su hermosa voz.
Caminé hacia el sonido y pude verla allí adentro.
Así que me quedé un momento mirando desde la oscuridad del pasillo.

Estaba con su abrigo puesto.
Tenía su cabello recogido.
Pero mi cosa favorita siempre ha sido su hermosa sonrisa.

Aunque hoy no sentía esa felicidad que siempre siento al verla.
Mi día había estado tan estresante, que no me sentía para nada bien.

Me recosté contra la puerta y esta sonó, haciendo que Rosé mirara.
Aún sonreía y sus ojos comenzaron a brillar aún más al verme allí.
Sin embargo, su ceño se frunció.

—Ya regreso, blinks~ —Dejó el teléfono en la cama y se acercó.

Su boca se abrió levemente al ver la tristeza reflejada en mis ojos.
Rápidamente me tomó entre sus brazos.

—¿Mal día? —Susurró en mi oído acariciando mi espalda.

Me sentí un poco tensa por el repentino abrazo.
Pero rápidamente me dejé llevar por su calor.
Escondí mi rostro en su cuello y sollocé.
Aunque pronto la tristeza se esfumó al estar en sus brazos.

—Si... —Murmuré sintiendo sus besos en mi rostro.

—¿Qué puedo hacer para que estés mejor? —Acariciaba mi espalda. —¿Quieres que acabe el Live para estar contigo?

—Estoy un poco cansada... —Respondí y asintió.

—¿Quieres que vaya a la otra habitación para que tengas un poco de silencio?

—¡No! —Dije rápidamente. —No quiero que te vayas, ¿podría simplemente recostarme a tu lado?

—Claro que si —Besó mi mejilla y chocamos miradas, ya me sentía un poco mejor.

Ella tomó mi rostro entre sus manos y se inclinó para darme un beso.
Fue algo tierno y dulce.
Hoy en la mañana tuve que salir tan pronto que solo nos dijimos "adiós" con un fugaz beso.
Así que ahora lo que más necesito es un poco de su amor.

—Ya estás aquí en casa, ya no debes estar triste —Acariciaba con suavidad mi espalda. —Estoy aquí para que estés mejor, solo dame unos minutos para hablar con los fans y luego estaré toda la noche contigo

—Eso suena bien —Asentí y le di un corto beso antes de caminar a la cama.

Ella tuvo total cuidado de no mostrar mi rostro.
Me recosté en su regazo con una sonrisa.
Rosie se disculpó con los fans por la demora.

Sus dedos acariciaban mi cabello.
Su risa sonaba cada cierto tiempo.
Era el escenario perfecto.

Pensé que hoy me pasaría el día completo con un puchero en mi rostro.
Sin embargo, al estar con Rosé eso rápidamente cambió por sonrisas.
Sentía mi cuerpo inundado de felicidad.
Todo gracias a la chica que amo.

Pronto mis ojos comenzaron a sentirse pesados.
Y su voz y sus caricias solo me ayudaban a sentirse más calmada.

Solo un par de minutos después, Rosé miró su regazo y ahí estaba yo dormida.
Habían pasado ya más de 20 minutos así que se despidió de los fans con una sonrisa y un par de besos.

Tenía una gran sonrisa en el rostro.
No solo por el amor de sus fans y los lindos comentarios.
Sino también por la ternura que le causaba su novia en su regazo.
Apagó su teléfono y continuó con las caricias.

—Te amo mucho, mi pequeña —Susurró dejando un par de besos. —Espero que duermas bien y te levantes de mejor ánimo