🍓 Capítulo Diecinueve 🍓

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Llevaba una semana, en medio de eso había podido enviar un adelanto a Seokjin quien estaba feliz. Jimin también se sentía feliz, debía admitir que él sexo era algo relajante, ahora entendía un poco mejor al pelinegro, este siempre decía sentirse liberado después de cada cogida.

Aunque ellos no lo habían hecho aún. Sabía que tarde o temprano lo harían, pero no entendía el porque que Jungkook seguía retrasando lo inevitable.

— Carajo, ¿en verdad me molesta que un mocoso no quiera cogerme?— bufó con una pequeña mueca.

— Si — dijo Taehyung.

Jimin saltó de su asiento repentinamente.

— ¡Qué haces aquí!

— Venía a pedirte prestado tu abrigo — señaló el armario — Pero me dormí mientras te esperaba y creo que caí de la cama — murmuró.

— Maldición Kim, voy a ponerte un collar de cascabel.

— Oye— susurró con un pequeño sonrojó — No puedes hacer eso, Hobi se pondría celoso, solo puedo usar el que él compró para mí.

Y Jimin se sonrojo está vez.

— Eso no era necesario Taehyung, no era algo que debía saber — suspiró— Toma el abrigó y vete.

Con una gran sonrisa, el castaño buscó en el armario el abrigó y lo tomó.

— Oye Jims.

— Mmm

— El sexo es algo gratificante, por no decir que es sensacional — sonrió — Pero las cosas aumentan de nivel cuándo se involucran sentimientos.

— Qué -

— Pasa de ser una aventura a ser algo más íntimo en el cual se involucran sentimientos mutuos o unilaterales.

— Taehyung…

— Nunca digas nunca Park — le guiñó antes de salir de la habitación.

Jimin se quedó pensando sus palabras con su ceño fruncido. Eso hasta que Jungkook llamó su nombre.

— Que carajos — susurro saliendo de su ensoñación mientras se ponía de pié.

Camino de su escritorio hasta la ventana donde se encontraba el menor apoyado en el marco de este esperando por él.

— Jeon.

— Dime qué ya estás libre — sonrió.

— ¿Libre para que?— frunció su ceño.

— Para nuestra siguiente sesión Hyung.

— Oh eso, no creo poder hoy, tengo que ir a visitar a mis padres y-

— Sabes algo — interrumpió — Si hay cosas que me molestan en la vida, y una de ellas es tener que esperar, cuando quiero algo, lo tengo y ya — suspiró — Por ello seré directo, solo te lo dejaré pasar esta vez Hyung, espero no tengas una nueva excusa para el viernes.

— ¿Qué?

— Pensaba ir lento, pero no me dejas opción — sonrió de lado — Nos vemos el viernes — le guiñó antes de cerrar la ventana.

— Mocoso del demonio, quien carajos se cree — bufó Jimin.

🫐🫐🫐

Y

en efecto, su excusa no fue la mejor, está vez no pudo huir tan fácilmente de él.

— ¿Te gusta?— preguntó dejando las llaves sobre la pequeña mesa en el centro.

Jimin asintió.

— Este terreno era de mí abuelo, siempre quiso construir una casa aquí, cuando falleció papá cumplió eso. Veníamos aquí en el verano en familia, aunque eso ya no es frecuente.

Yo te ayudo|• KookMin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora