Polos Opuestos

8. Lo siento

Era media noche, Salma ya estaba durmiendo, es más, todo el mundo por la hora que era y además mañana se iban todos a sus casas y debían descansar, pero ella no podía. La cara de Ruslana llorando, esa imagen de dolor en su expresión no se le quitaba a la pelinegra de la cabeza, pensaba que eso se lo había provocado ella, y le dolía aun más.
Sin pensarlo se puso sus zapatillas y salió del cuarto. Volvió a dirigirse hacia su habitación esperando no volver a ver salir de allí a Omar, o peor que ella este en el cuarto de él, ¿y si con lo que le dijo la lanzo a que este con él definitivamente?

Sabia que si llamaba despertaría a Bea, así que le mando mensajes para que saliera.

(Mensajes Móvil)
- Estás despierta. - le pregunta Chiara, tiene la esperanza de que se conecte por favor.
- Me gustaría hablar contigo por favor. - le vuelve a escribir. Piensa que puede estar incluso dormida, y cuando se va a dar la vuelta, ve como se abre la puerta.

Ruslana tiene la cara de haber llorado por un largo tiempo, y Chiara no puede evitar lanzarse a sus brazos y pedirle perdón continuamente al oido mientras ambas lloran.

Deciden que lo mejor es ir a algún lado donde estar tranquilas y poder hablar bien.
No se siente la misma comodidad de siempre, saben que las dos tienen que decirse cosas.

- Empieza tú porque por lo que he visto tienes cosas que no me has dicho. - Dijo Ruslana pegándose las rodillas al pecho.
- Cuando fui y vi que estabas con él, besándote, me sentí fatal. Me gustas más de lo que pensaba y no creo que sea capaz de veros juntos porque sé que no estas así conmigo. - dice la morena mirando hacia abajo.
- ¿Por qué no me lo has dicho antes?
-No me he dado cuenta de que me molestaba tanto hasta hoy. - Ruslana se mueve hacia ella y se pone de cuclillas para que la vea desde abajo, a la vez que le coge las manos.
-Lo siento, no quería hacer que te sintieses mal, de verdad que voy a hacer lo que te dije, pero estoy siendo muy cobarde, y tienes razón en lo que me has dicho, con esto estoy haciendo daño a gente que quiero. - dice ella con tono triste.
- No no, perdón por lo que te he dicho no creía nada de eso, solo estaba enfadada y lo siento. - dice cogiéndole más fuerte de las manos.
- Kiki llevabas toda la razón, y lo siento de verdad, has dicho lo que pensabas y era lo más justo. Me gustaría que veamos que tal va esto. - dijo tímida.
- A mí también. - dijo acariciando la mejilla de la chica. Ambas se sonrieron y se quedaron mirándose mientras la luz blanca de la luna se les reflejaba. Ruslana estaba pensando que no había visto unos ojos tan bonitos nunca. Chiara dio el paso de acercarse a la boca de ella, justo antes de eso la miró a los ojos y enseguida fue hacia su boca.

Se echaron de menos, llevaban desde el día anterior sin verse, y cuando lo hicieron no fue como pensaban.
El beso fue aumentando y la morena tiró de la mano de la otra chica para que se sentara en sus piernas para que así fuese más fácil y pudiesen estar mas cerca. Empezaron a acariciarse y a intensificar el beso, ambas querían más, pero sabían que no era el momento ni el lugar.

Siguieron en esa misma posición, se habían echado de menos y estuvieron hablando de qué harían en las vacaciones, de vez en cuando se distraían con pequeñas caricias que se hacían o por besos robados.
Justo esa noche donde no se pudieron separar Ruslana se prometió mentalmente que dejaría de tener tanto miedo y haría lo que de verdad quería.

Nada más llegar a la habitación le escribió a Omar diciéndole que necesitaba hablar con él antes de que se fuesen, y ella a partir de ahí no pudo dormir nada.
Estaba esperándolo en el patio donde habían quedado, estaba cagada y se sentía mal, pero sabia que era lo correcto.

- Hola. - dijo él tocándole el brazo a la chica que se encontraba de espaldas.
- Hola, perdona que te haya hecho venir a esta hora.
- Supongo que será para algo importante. - ella puso cara triste y él ya sabia perfectamente lo que venía, así que hizo lo que mejor creía que debía hacer, abrazar a la chica.
- Lo siento mucho, - dijo ella mientras lloraba sin parar. - Perdóname, de verdad, que lo siento.
- No hay nada que perdonar, no me puedo enfadar porque no sientas lo mismo que yo. - Le dijo tranquilo, él lo había aceptado desde el momento en el que no quiso oficializar, y no estaba enfadado.

Siguieron así un rato hasta que él ya se tenia que marchar, quedaron en que serían amigos y eso hizo que ella se sintiera mucho mejor.
Su avión salía en 2 horas, pero tenia que irse ya o no le daría tiempo a facturar, pero antes tenia claro que debía hacer una cosa.
Fue corriendo hacia la habitación de Chiara, y aunque seguramente estuviese dormida toco a la puerta, no podía irse sin despedirse y contarle lo que había pasado, aunque fuese de forma resumida.

- Rus, qué pasa, es muy pronto. - dijo la chica adormilada. Lo único que obtuvo como respuesta fue un beso, el cual hizo que se despertase de golpe. - - - -Pero y esto. - dijo sonriendo.
- Lo hemos dejado, hemos acabado bien, y quería que lo supieses antes de que me vaya, y que cuando volvamos tenemos que hablar porque yo quiero intentarlo y- fue cortada por la otra chica que fue ahora ella la que la beso y la pegó mucho mas a ella. La pelirroja se separó, ya que se tenía que ir, pero se prometieron que al volver hablarían sí o sí.

La chica entró dentro como en una nube y solo se encontró con la mirada de Salma con los ojos como platos.

-Riendo le dijo- Ya te contaré, pero más adelante. - la chica no entendía nada, pero le tomo la palabra de que cuando pudiese lo haría.

Nota:

Bueno que, que os parece, hoy he subido dos como celebración de que Ruslana ha sacado por fin su canción, que la podéis escuchar en Amazon music. Pero además, que a mi es que cuando me cortan en el drama no me gusta jajajajajaja.

Espero que os haya gustado, comentadme que os ha parecido, que creéis que pasará cuando vuelvan.

Nos vemos mañana :)