Amarte para siempre

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⚠️Recordatorio: Este fic trata temas delicados, así hay alguna sugerencia/queja sobre la narración o algo en particular, hacédmelo saber. Sin más, espero que os guste el cap!

Alice no pudo dormir en toda la noche.

Su mente la carcomía, y es por eso por lo que pidió a la morena mayor dormir sola esa noche. Esto no pasó desapercibido para Chiara, que también se comía la cabeza desde la cama de arriba.

Aunque, por otra parte, la inglesa no era tonta. Sabía que le pasaba algo a Alice, le preguntaría al día siguiente. De todos modos, aún tenía que hacerle una propuesta a la chica, ¿no?

-¡Venga, arriba!- Dijo Noemí abriendo las cortinas de la habitación, mientras todos los presentes se quejaban de la luz.

Poco a poco la habitación se fue vaciando, quedando solo Alice.

Desgraciadamente, no pudo dormir en toda la noche, pero tuvo que levantarse a duras penas.

Se dirigió a los vestuarios a lavarse un poco la cara y despejarse, fue en ese momento cuando vio la cara que tenía: unas ojeras horrorosas. Se las maquilló rápidamente y se fue a la cocina, donde todos la miraron.

-Buenos días.- Dijo ella, sonaba apagada, normal, no había dormido nada.

-Buenos días.- Le iban respondiendo todos sus compañeros.

-¿No vas a desayunar?- Le preguntó el uruguayo cuando la chica se sentó, sin ningún alimento con ella.

-No tengo hambre.- Mintió la chica. Definitivamente lo ocurrido en la noche pasada la trastornó. Había vuelto a caer en el hoyo del que tanto le había costado salir hacia unos años.

-Tienes que comer algo.- Dijo Chiara, que llevaba observando a la chica preocupada desde que le había visto esa cara.

-De verdad, no tengo hambre. Ya picaré algo más tarde.- Volvió a mentir la francesa, dedicándole una pequeña sonrisa a Chiara para que no se preocupara, pero no le sirvió de mucho, porque la menorquina se encontraba llevándole una manzana a la mesa, para después sentarse a su lado, que estaba vacío.

-Insisto.- Dijo la chica dejando la fruta en la mesa, y tocándole el hombro con cariño.-Come, por favor.- Añadió susurrando. La facilidad que tenía Chiara para leer a Alice era indescriptible.

Alice se llevó la manzana a la boca, mientras que su mente repetía en bucle las frases que no le habían dejado dormir en toda la noche.

Le dio un mordisco, y tuvo que dejarla de nuevo en la mesa porque la situación le sobrepasaba. Se levantó y tiró la manzana a la papelera, para irse, como la noche anterior, a los baños. Esta vez no le dio ni tiempo a encerrarse, pues una muy preocupada Chiara casi le pisaba los talones. En el momento en el que Alice iba a abrir la puerta del baño, el brazo de la menorquina agarró el suyo para girarla y abrazarla, dejando que la chica se rompiera en sus brazos.

-Perdón.- Dijo susurrando en el abrazo, cuando logró calmar sus sollozos.

-No me tienes que pedir perdón, mi amor.- Y se metieron al baño para poder hablar tranquilamente sin que las cámaras acecharan.

Alice suspiró cuando se apagaron los micros, para empezar a darle las explicaciones que la contraria se merecía escuchar.

-A ver...- Dijo intentando buscar las palabras correctas.- Sabes que, eh..., ayer cenamos... Ratatouille, ¿no?- Dijo la morena menor, mientras se le volvían a cristalizar los ojos. La menorquina al notar esto, le dio su mano para intentar calmarla.

-No me tienes que contar nada si no quieres, de verdad.- Le aseguró la chica, a lo que Alice negó rápidamente.

-Te lo quiero contar, en serio.- Chiara asintió a esto.- Vale, pues te lo cuento desde el principio, espero que tengas tiempo.- Las dos rieron ante esto, por suerte al ser sábado no tenían nada, hasta las cuatro de la tarde del pase de micros, claro.