secret
segunda parte
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-¿¡Betty!?
Las amigas de Betty parecían realmente sorprendidas de verla con nosotros, pero pronto esa confusión se fue transformando en una creciente molestia.
-¿Qué haces aquí? Con... él. -Verónica me señaló y suspiré.
Mi novia me miró, se encontraba tensa y yo sabía por qué, esta conversación le asustaba bastante, incluso más que hablar con sus padres. Ella podía estar sin ellos, pero ¿sin sus amigas? Jamás, eso la destruiría.
Me acerqué a su oído para susurrar:
-Tu puedes hacerlo, princesa.
Negó levemente y yo asentí. Miré a mis amigos e hice una seña con la cabeza para irnos.
-Nosotros las dejaremos solas... -murmuré mientras Cheryl y Reggie se acercaban a la puerta.
-No, por favor, quédate. -me pidió Betty cuando intenté alejarme.
La miré con algo de duda, no creí que quisiera que esté con ella mientras hablaba con sus amigas, puesto que ellas me... detestan.
-¿Segura? -consulté y ella asintió-. Bien.
Verónica y Toni cerraron la puerta y se acercaron a nosotros con la mirada fija en mi novia, quien parecía a punto de largarse a llorar.
-¿Qué está pasando? -Toni fue la primera en romper ese silencio que comenzaba a darme escalofríos.
-Yo... -Betty tomó aire profundamente- tengo varias cosas que explicarles, lo sé, pero empecemos por lo importante: Jug y yo somos novios hace dos meses y medio. -informó. La sorpresa cubrió las facciones de sus amigas en menos de dos segundos.
-¿Por qué nunca nos contaste? -preguntó Verónica.
-No quería que se molestaran conmigo y no volvieran a hablarme. Sé que hice mal en esconderles esto, pero... Jug me ha gustado desde tercer grado y, aunque sé que pactamos odiarlo, yo no puedo evadir lo que siento. -murmuró.
Comencé a acariciar su mano, la cual se aferraba un poquito más a la mía con el pasar de los minutos. Estaba nerviosa y hasta el más idiota de todos lo notaría a kilómetros.
Ambas chicas se miraron durante unos segundos y luego soltaron un suspiro, volviendo a mirar a Betty.
-B... te amamos y eso jamás va a cambiar. Estés con Jughead o no, no vamos a enfadarnos contigo por algo tan banal como un chico, sin ofender. -Verónica me miró por dos microsegundos.
-Exacto, eres nuestra mejor amiga, B, nada va a cambiarlo. Solo hubiésemos querido que nos lo dijeras antes, él fue tu primera cita, novio, todo, y somos tus mejores amigas, debíamos estar ahí para ti. -bufó Toni.
Una pequeña sonrisa se asomó por mi cara al recordar que yo era la primera experiencia de Betty en el mundo de las relaciones. Quería estar con ella toda mi vida, la amaba tanto.
-Gracias por entender, chicas, en serio, las amo. -murmuró mi novia, soltando mi mano para acercarse a sus amigas y abrazarlas.
Las tres se unieron en un abrazo y sonreí al ver que Betty tenía a unas amigas que la amaban. Si no la apoyaban, iba a molestarme y eso no es algo que les conviene a las personas.
-Mucho amor y todo eso, pero ahora que tenemos que pasar tiempo con este, -Toni me miró raro- exijo una cita con Cheryl. -condicionó y sus amigas rieron.
