Ellys Vega está enamorada perdidamente de su vecino desde pequeña...
Siendo una chica sumamente tranquila, se asoma al corazón de un chico lleno de problemas, con un pasado y secretos confusos, que no lo dejan creer en el amor...
En un entorno llen...
Evan Diler, chico que no sentía nada por mi, pero el en mi, si causaba deseos indeseables llenos de desesperación y locura.
Mis frecuentes cercanías a el siempre eran algo reveladoras e insensatas. Siempre mis palabras las callaba con sus orgullosos rechazos Sarcásticos, sin nada de pureza.
Intentaré esta última Vez acercar me un poco más y darle un empujón a ver si llegaba a tener un buen resultado esta vez.
Si no, podría entender al fin; Que la oscuridad que abarcaba su luna. Mí brillante amanecer como el sol, jamás podrían intentar unirse. Aunque ciertas fábulas dijeran lo contrario.
🖤🤍
Casi era hora del castigo, las manos me sudaban y solo pensaba y practicaba repetidas veces las cosas que quizás le diría.
No quería ser una chava salida, solo una en la que el pudiera confiar, no ver me igual al resto. Que viera en mi algo mas allá de mis miradas...
Llegó la hora, el salón se abrió. Entramos todos, menos el.
Pensé que no llegaría hasta que ya dentro sentada en una silla lo vi entrar con su bolso de lado, su pelo algo alborotado, su chaqueta negra y esos hermosos ojos que me fascinaban.
Mis ojos quedaron fijamente puestos disimuladamente a el.
Mis pensamientos empezaron a estallar, es impresionante como nuestras emociones pueden alterar las palpitaciones de nuestro pequeño corazón.
Cruzaba mis piernas, movía repetidamente mis pies de un lado al otro.
Nos dieron la tarea de limpiar las mesas y los estantes donde estaban los libros, y algunas cosas más.
Nos dirigimos todos, hacia la gran biblioteca...
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Tomé mi pañuelo y empecé a limpiar y con resistencia pasiva intenté no mover mi cuerpo del lugar, esperar que él se me acercara o algo parecido.
Pensé...
Tentativamente nuestras miradas empezaron a conectar. Pero como siempre ya se había estropeado todo.
Eran las 5.00 pm y ya debíamos salir del castigo.
Tiré mi cuerpo en la silla llena de obstinación, ya habia pasado la hora y ni siquiera hola le dije.
"Que torpe". --Me dije en ese instante.
Agache mi cabeza al darme cuenta que todos salian, inclusive Evan...
