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A Harry le tomó dos días regresar a la carretera, deteniéndose cuando era demasiado para Sophia, asegurándose de que se mantuvieran hidratados, tuvieran comida y un lugar donde Sophia pudiera dormir. Estaba oscureciendo y Sophia se estaba poniendo cada vez más pegajosa a medida que llegaba la noche, Harry cerró los ojos con miedo cuando no vio la casa rodante ni siquiera la motocicleta de Merle. Habían abandonado el área, mirando brevemente a la niña; ¿Seguramente no había manera de que Carol dejara voluntariamente a su pequeña? ¿Podrían estar más lejos, fuera de la vista? Endureciendo sus hombros, si se hubieran ido, estaba bien, solo tendría que rastrearlos si pudiera, si no, se aseguraría de que Sophia viviera tanto tiempo como pudiera protegerla.

"¿Dónde están todos?" Preguntó Sophia, con lágrimas ya formándose en sus ojos, la idea de ser abandonada era aterradora para la niña que solo quería a su madre.

Entonces Harry notó las palabras escritas en el parabrisas del auto, y sus labios se torcieron, arrodillándose a su lado, dijo después de darle un codazo, "Mira hacia allá, creo que alguien te dejó un mensaje", bromeó, Sophia miró ansiosamente en el dirección a la que Harry estaba apuntando y miró con los ojos muy abiertos. Sobre el capó del coche había patatas fritas, galletas saladas y zumo. Escritas en el parabrisas estaban las palabras 'S. H - quédate aquí vendrá todos los días.'

Sophia le sonrió a Harry, acercándose a él en un abrazo, estaba sucia, cansada pero eufórica, y sabía que vería a su madre pronto. "¡Ellos vendrán!" dijo con convicción.

"Lo harán, ahora ¿por qué no vas a descansar?" Sugirió Harry, señalando hacia el auto naranja, ella podría dormir cómodamente en la parte de atrás sin ningún problema.

"¿Adónde vas?" Preguntó Sophia con temor, no quería estar sola nunca más.

"Voy a ir a recoger suministros, con suerte encontraré un par de botas de tu talla", Harry le dio un golpe en la nariz y sonrió. Sus zapatos estaban arrugados, malolientes y sucios después de terminar en el agua. De hecho, ambos estaban sucios, arrugados y malolientes, pero las duchas eran cosas del pasado como gran parte de todo lo que habían dado por sentado. Aunque podía encogerlos, sólo necesitaba encontrar un par que una niña pequeña pudiera usar para correr y mantener sus pies seguros.

"¿Crees que todos los demás están bien, Harry?" Preguntó Sophia mirando a su salvador. Sabía, incluso siendo joven, que él le había salvado la vida. Dos veces, una por el andador y cuando terminó casi ahogándose.

"Sí", dijo Harry de inmediato, "Estoy seguro de que están bien dondequiera que estén. Pero algo debe haber sucedido para que se fueran de aquí y regresaran solo una vez al día". Harry explicó que no deseaba mentirle.

"¿Caminantes?" Sophia cuestionó la inocencia que aún cubría su voz.

"Tal vez", dijo Harry asintiendo brevemente, "Estoy seguro de que lo descubriremos pronto. Ve a comer y descansa un poco". le dijo, antes de caminar hacia el área que había estado limpiando antes de que toda esta mierda sucediera. Es bastante fácil de decir ya que las 'X' que había pintado con tiza en los autos todavía estaban allí. Los labios de Harry se torcieron cuando sintió que Sophia lo seguía.

"¿Me contarás más historias?" Preguntó Sophia viendo a Harry mirar dentro de una camioneta SUV negra con una persona muerta dentro. Mantuvo a Harry dentro de su vista en todo momento, tal como su madre querría que ella también la quisiera, eso y no quería desviarse demasiado.

"Hmm, ¿qué quieres oír?" preguntó Harry pensativamente mientras registraba todas las bolsas, la mayoría de ellas montones de ropa para niños pequeños o ropa realmente asquerosa con patrones llamativos, y en una maleta encontró algunas que realmente le servirían a Sophia, así que las agregó a la gran bolsa negra que había estado llevando a todas partes.

WALKING DED WIZARD- TRADUCCIONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora