𝐍𝐞𝐯𝐞𝐫 𝐅𝐨𝐫𝐞𝐯𝐞𝐫

036. Deseo

Nam Ra

Maldita idiota que soy...

El abre la cortina y sonrió con nerviosismo, el me responde con una sonrisa falsa también,

—— Podía ver tus pies, Nam Ra. — después de todo, el sigue con su sonrisa y desvió la mirada sintiendo su cara a solo centímetros de la mía. Trago grueso. Tengo que salvarme de esta o pensará algo más —

—— Me perdí... — ¿Eso es lo único que puedes decir, Lee Nam Ra?. El sonríe y asiente aún con su cara delante de la mía — Ya deja de mirarme.

—— Te dije que fueras a investigar este lugar. ¿Acaso no puedes vivir sin mi? ¿Por qué estás escondida escuchando conversaciones ajenas? — hago todo para no mirarlo y sintiendo mis mejillas comenzar a calentarse. Así que pregunté lo primero que me vino a la cabeza —

—— Bueno, ¿Y tú por qué fuiste a hablar a solas con esa mujer? ¿Por qué ella se cree tan especial? ¿Acaso pasó algo entre ustedes dos para que ella tenga tanta confianza contigo? — el se aleja y me observa con su sonrisa que derretía a cualquiera —

—— ¿Por qué preguntas?

—— ¿Por qué no me respondes? ¿Qué? ¿Acaso es algo tuyo? Puede que nuestro matrimonio no sea real, pero me parece una falta de respeto que me hagas esto. Me invitas a que te acompañe al trabajo y luego veo cómo otra se te tira encima y te coquetea, eso es humillante y no está bien. Ahora entiendo el porqué hablabas tan bien de mi, sabías que estaba aquí, me pregunto qué dirías si no estuviese, es más. Explícame. ¿Por qué le dijiste que no me tolerabas? ¿Por qué hablas con ella? ¿Qué pasa entre ella y tú? ¿Se tienen tanta confianza o qué?

—— ¿Celosa, Nam Ra? — bufé al oír eso —

—— ¿Yo? ¿Celosa? ¿Por qué estaría celosa de esa modelo de piernas largas? ¿Eh? ¿Qué? ¿Me preguntas porque te sientes interesado en ella? Pues...vete con ella. No tengo idea de para qué vine, tengo tantas cosas que hacer y yo aquí perdiendo el tiempo viendo cómo ¡Ja! Mi supuesto esposo coquetea con otra mujer. — indignada me crucé de brazos y le di la espalda sin parar de murmurar sobre ellos, antes de irme, el mismo me toma de el brazo y pega mi espalda contra la pared. Tal gesto, tal movimiento me hizo sentir aún más descubierta. Me mira en silencio con su sonrisa, el lo disfrutaba, pero yo no. Ni siquiera se que me sucede con este hombre tan apuesto y alto que tengo delante. Desvíe la mirada ya rendida y sonrojada —

—— Nam Ra. — lo miró a los ojos unos pocos segundos y acerca su rostro de nuevo a mi — Yo solo te pertenezco a ti. — susurra para que solo yo lo escuche y se gana mi mirada — Solo tuyo. Solo de tu propiedad...tanto que...podría despedirla a ella, mi mejor empleada si tú solamente me lo pides. — mis piernas comienzan a temblar y sentí que casi me desmayaba cuando sentía que se acercaba más y más. —

—— Yo...No te dije que la despidieras...pobrecita. — intento no tartamudearle y sus ojos bajan a mis labios y yo lo noto. ¿Quería besarme o solamente estaba jugando conmigo? Mis ojos también miran los suyos y me siento deseosa. Siento las ganas de besarlo elevarse y me doy cuenta de que estoy comenzando a desearlo. Que deseo al hombre que está delante de mí. Siento mi corazón acelerarse y paso mi lengua por mis labios esperando a que pasara lo siguiente sin estar en mis cinco sentidos. Nuestras narices de tocan y no puedo evitar preguntar — ¿Solo mío? — pregunté entre susurros —

—— Solo y todo tuyo. — susurra en respuesta, saque todas mis fuerzas para agachar la mirada y evitar que me descontrolara. No se que en qué estuve pensando. ¿Por qué deseé de esa manera al tipo que tengo que poner tras las rejas? ¿Me volví loca? —

—— Yo... — me observa esperando a que le diga el porqué me eche atrás de esa forma — Tengo que ver a Tstegtseg. Yo...la dejé sola... — había tomado una decisión, tengo que evitarlo. Tengo que alejarme de él antes de que sea tarde y terminé enamorándome de la persona equivocada —

Logró salirme de ese ambiente dominante suyo en donde solo habita su deliciosa colonia y sus ojos hacia mi. Trato de acelerar el paso porque me siento perseguida, pero nuevamente y torpemente olvido que mientras que yo con mis piernas cortas doy 15 pasos, el con un solo paso ya está delante de mí de nuevo.

Toma mi muñeca y eso me hace detenerme. Observo el suelo y hago todo para no observarlo. No quería volver esto más difícil. Quizás por las cosas que comienzo a sentir con el no e hecho mi trabajo. E estado encantada y si sigo así terminaré enamorada, solo le veo un mal futuro a todo esto. Así que me alejo.

—— No tienes porqué temer. Yo... No soy ellos, jamás te haré daño. — me dejan pensando esas palabras — Si soy lo único que tienes y te da miedo, está bien...pero quiero que sepas que jamás te haré daño. — no puedo evitar mirar sus ojos. ¿Qué están diciéndome? ¿La verdad? ¿Me están mintiendo? Se ven tan sinceros, que me siento como hace unos minutos atrás de nuevo, me recupero y miro en otra dirección —

—— Yo... Tengo que ir con...ella. — suelto su agarre — Ya regreso...Señor Ryu. — veo que llamarlo así el no notó, dio un paso atrás con un suspiro y asintió. Mirando el suelo sigo mi camino pensando en todo aquello agitada. ¿Qué pasa si solo me enamoro? No solo pasará eso...Mi familia va a odiarme, estarán en mi contra, no podría encerrarlo y el me odiaría al saberlo... no se cuánto tiempo seguiré jugando este juego de llevarme bien con el y no hacer nada para investigarlo. Solo se que lo lograré si estoy lejos de él... —

Entro a una habitación donde estaba esa mujer y mi prima. Mi prima cae al suelo llevando sus manos a su cuello sin poder respirar

—— ¡NO! — lanzo mis cosas y corrí hacia a ella. Me siento en el suelo espantada. No puede ser, no... — Nam...quiero decir...Hillary. No... ¿qué pasa? ¿Qué tienes? — veo que su cara se torna roja y grito asustada — Oye, ¿qué te pasa? Dime, ¿qué es lo que te pasa? — escucho las risas de esa mujer y volteó molesta — ¿Se volvió loca? ¡Haga algo! ¿Qué le hizo?

—— Ustedes dos... ¿cómo planean proteger a Shi Oh si una confía mucho en la gente y la otra solo sabe llorar en el suelo? — ríe y niega — Eso la dejará paralizada por tres horas. Ella estará bien. — solo pienso en mi familia, mi prima acaba de llegar y me sentía culpable de que algo le pasase y mi tía sufriría de perder a su hija. Ella nunca me lo perdonaría... —

—— O-Oye. Vamos, tienes que levantarse. Esto no es nada para ti. Vamos. — la mujer se aleja de ambas y Nam Soon saca la lengua con los ojos cerrados y eso me hace soltarla. Estaba actuando. Ella misma se levantó como si nada hubiese pasado. Esto a veces me hace pensar si Sulli también es igual de catastrófica que ella y me lleno de terror —

—— ¿A quién llamaste llorona? — preguntó Nam Soon haciendo que ella se volteara asustada — No te metas con la esposa de mi jefe. — la toma con sus dedos y la lanza al sofá — Siéntate, ahora Nam Ra y yo queremos hacerte unas pruebas a ti también. — me levanto y me cruzo de brazos asintiendo. Veo que ella nos mira asustada y sonrío —

—— Tu... ¿Cómo es que eres tan especial para Shi Oh si te confías mucho y luego estás haciendo lo único que sabes hacer: Llorar sentada en el sofá? — negué con una sonrisa y Nam Soon asintió con otra sonrisa —

Al menos esto sería divertido