3 • Amor

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Tomura volvió a girarse sobre si mismo. Esperando encontrar la posición adecuada para dormir una siesta, pero no podía.

Las ultimas noches le era imposible dormir, un sentimiento muy deprimente inundaba su pecho y lo obligaba a mantenerse despierto hasta que el resto de reclusos del pabellón comenzaran a moverse para inicial el día y una vez que aquello sucedía el ruido era demasiado para ignorarlo, entonces debía permanecer despierto.

Se levantó ya que tampoco parecía ser posible dormir una siesta gracias el molesto ruido del resto. Se apoyó en la barandilla del balcón, su cuarto estaba en el segundo piso. Vio a Isamu-san jugando cartas con su grupo y decidió que tal vez no era tan malo jugar a las cartas un rato.

-¡Señor Shigaraki!.- Gritó el anciano levantando la mano para jugar con ellos.- Mira esa cara, no hace una semana que el señor Dabi se fue y ya te ves demacrado.

El menor rodó los ojos y se sentó en la mesa mientras agitaba su cabello para despabilar.

-No creí que fuera tan deprimente que él se fuera...

El hombre se sacó el cigarrillo de la boca y lo miró con una sonrisa.- ¿Un hombre como usted? ¿Preocupado?

Tomura levantó la mirada al techo y suspirando asintió.

-Hay una brecha muy significativa entre ser un criminal y un terrorista. La gente no lo dejará en paz, no permitirán que viva tranquilamente. Si, me preocupa, no lo negaré.

Isamu se volvió a reír con el cigarrillo en la boca.- Que hombre tan cursi. Un día destruye un porcentaje de este país y al siguiente se preocupa por su amorcito.- El hombre soltó una carcajada seguida de su grupo de amigos.

Tomura aceptó que era verdad. Cuando se trataba de Dabi si podía ser un poco cursi, honestamente era la primera persona a la que amaba de aquella manera. Quería a todos los miembros de la Liga incluso podría decirse que quería a Midoriya, pero amar... Solo a él. Por eso tomar la decisión de soltarlo le dolía, aunque por fuera parecía tener su semblante lúgubre de siempre, por dentro había una verdadera batalla de sentimientos entre lo que deseaba y lo que creía correcto. Y que irónico era, alguien como él queriendo hacer lo correcto.

Rápidamente un recuerdo lo invadió. No había sido tanto tiempo luego de conocerse. Justo antes del ataque al campamento de la UA.

-Si no vas a seguir ordenes entonces no me sirves.- Expresó su yo de 20 años tomando por sorpresa a un Dabi de 23 años y colocando su mano en el cuello del mayor amenazando con juntar sus cinco dedos para desintegrarlo ahí mismo.

Dabi soltó una risita.

- Pues... Como yo lo veo, te sirva o no, no tienes muchos aliados.- Comentó sin el mas mínimo miedo en estar al borde de la muerte.

 Tomura permaneció firme sin apartar su mano y entrecerró los ojos.- Da igual eso. No quiero a un tipo como tu, solo intentas usarme para alcanzar tus propios fines.

-Tu haces exactamente lo mismo.- Dabi volteó a verlo sintiendo como el espacio entre el quinto dedo de Tomura y su cuello se separaban solo por milímetros.- Pretendes que seamos tus peones, pero no tienes lo necesario para ser un líder. 

-¡Cállate! Te eliminaré ahora mismo si no te vas de la liga por las buenas, lo harás por las malas.

-Todoroki.

Se hizo un silencio en el bar donde se habían reunido solo ellos dos. Aquello lo tomó por sorpresa, estaba algo confundido.

-¿Que?

-Dije que te diría mi nombre en el momento apropiado. Mi nombre es Todoroki Touya, el hijo mayor del héroe profesional Endeavor. Y es por eso que estoy aquí, para destruirlo.

All for Them [Shigadabi/Dabishiga Fanfic]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora