All for Them [Shigadabi/Dabishiga Fanfic]

10 • Decepción

Hacia tiempo no estaba ahí, ya se había olvidado de como funcionaba. La reja se deslizó por las vías y se cerró detrás de él.

Se sentía una mierda. Todos lo saludaban animadamente y burlándose de que haya vuelto, pero no estaba de humor, menos aún cuando levantó la mirada al segundo piso y se encontró con unos ojos carmesí muy enfadados.

Tenko volteó a mirar a Isamu.- Que el novato no se acerque, tienes mi permiso para que lo golpeen.

Isamu se rio.- ¿Novato? Creo que sabe perfectamente que no tiene que acercarse al jefe.

-Hizo algo imperdonable... Puedo tolerar muchas cosas pero mi niña es sagrada y su única tarea era cuidar se ella...

Isamu tocó su hombro.- Volverá a buscarla. Estoy seguro que él piensa exactamente lo mismo. Con un delito así no estará mucho tiempo aquí.

Tenko suspiró.- Por su bien espero que eso sea cierto.

Touya sabía lo decepcionado y enojado que estaba su esposo. No quería empeorar eso, y claro que no iría a molestar al jefe del pabellón, no era un novato aunque lo quisieran tratar como tal.

Se dirigió a su cuarto asignado, su compañero era uno de los lacayos de Tenko, al cual había golpeado un par de veces cuando llegó. Ahora parecía 3 veces más musculoso y mucho más intimidante. 3 años en pasión pueden cambiar mucho a una persona.

-Hey no no, aquí no, no quiero problemas con el jefe y sus perros guardianes.- Dijo el tipo cerrándole el paso.

Touya rodó los ojos, no quería una riña el primer día pero realmente Tenko no era el único enfadado por lo que había sucedido, él también estaba enojado consigo mismo y si tenía que desquitarse con ese tipo por muy musculoso que fuera, entonces lo haría.

-Apártate, quiero recostarme. Me asignaron esta celda y no voy a llevarles la contraria a los guardias. Quiero salir lo antes posible de aquí.

El tipo lo dejo pasar, sabía que tendría que dejarlo, tampoco quería problemas con la directiva. Aunque las miradas furtivas que los perros falderos de Isamu y Tomura no le producían ninguna tranquilidad.

Permaneció en la cama reflexionando y haciendo una lista mental de sus quehaceres para mantenerse entretenido. Debía hablar con Konketsu, debía llamar a Shoto y preguntar por June, sabía que hasta que las heridas de Keigo y Enji no sanaran entonces la niña permanecería con su hermano menor y eso le resultaba tranquilizador. Aún así debía salir pronto de ahí para volver con su hija... Golpeó la pared al recordarlo, recordar lo estúpido que fue aquel día.

Enji simplemente había entrado a la casa de Shoto y parecía que deseaba disculpar por la disputa en la casa rogándole que volviera para volver a la normalidad. Pero no fue el caso, llegó y explicó que él era un hombre diferente, que no le haría daño a su nieta pero que aún así creía que cuando se trataba de quirks de fuego él era el mejor en entenderlos. Touya se rio en su cara, no solo por que le resultará hilarante que él creyera eso sino por que era claro que el verdadero prodigo de los quirks de fuego era el mismo, después de todo perfeccionó su don sin la necesidad de maestros ni una academia para héroes.

Aun así, sin importarle realmente eso le comentó que ya había hablado con el Comité de Seguridad Nacional sobre la custodia de June. Recordaba la mirada de Kiego, se había enterado de eso junto a Shoto y él, parecía muy enfadado por no habérselo consultado antes. Aunque eso viene en la letra pequeña del contrato al casarte con Todoroki Enji, la seguridad de que hará daño a su familia y tomará decisiones por su cuenta.... Pensándolo bien, no tenía derecho a juzgarlo, había hecho exactamente lo mismo.

Al final de la charla comenzaron las discusiones, los insultos y eventualmente los golpes. Keigo intento frenar la pelea recibiendo golpes aunque también los dio, a su esposo enfadado por lo que había hecho, quitarle la custodia de su hija a Touya, era imperdonable. Shoto también trató de detener la riña aunque siendo honestos parecía bastante satisfecho luego de golpear a su viejo. Y más o menos, así se desenvolvieron los acontecimientos.