All for Them [Shigadabi/Dabishiga Fanfic]

20 • Tolerancia

June se miró al espejo del baño. Tenía un feo golpe en el ojo, no se preocupó porque ya estaba acostumbrada. Sacó un pequeño estuche con maquillaje, usó los cosméticos para tapar el moretón. Se había hecho casi un arte tapar heridas, y eso que era muy mala en clases de artes plásticas.

Caminaba con confianza, pensaba que si lo actuaba terminaría por creérselo y aunque fuera una mentira eso era suficiente para no desmoronarse. No había nadie en los pasillos eso significaba que llegaba tarde a la siguiente clase.

-Oh señorita Shimura, siempre llegando tarde a mi clase, si no le interesa no se moleste en venir la próxima vez.

-Lo siento, Sensei.- Dijo dando una leve reverencia y tomando asiento en su respectivo lugar.

Sintió los murmullos y risas de sus compañeros, le molestaba, cada vez le molestaba más. Decir que había tenido paciencia con esa gente era subestimarla demasiado, todos los días intentaba ignorarlos y poner la otra mejilla. Era una chica hermosa que tenía un quirk muy fuerte, todos comenzaron a burlarse producto de su envidia, ella lo entendía y por eso hacía la vista gorda aguantando todo, incluso los golpes.

-Shimura-chan ¿Quieres ir al karaoke luego de clases? Dijiste que tus padres estaban de viaje de negocios, no creo que haya problema ¿Verdad?.- Preguntó la chica junto a June.

Esa chica tenía el cabello como algodón de azúcar, su nombre era Azaki Nohara. Había sido la única amiga de June durante su estancia en esa escuela, la Secundaria Zetsumei. El director era miembro de La Liga de los Villanos, rápidamente hizo entrar a June y hacer que sus datos de identificación mantengan un perfil bajo para evitar a los héroes, era probablemente la única escuela a la que podría asistir de manera civil.

-No me he sentido bien, tal vez debería volver temprano a casa...- Dijo con una sonrisa.-Lo siento, Nohara-san.

La chica negó con la cabeza y una sonrisa en el rostro.- No te preocupes, en otra ocasión será. 

Era una buena amiga a decir verdad, siempre intentaba hacerla sentir bien y ayudarla en las tareas que le resultaban difíciles a ella. Quería a Nohara, pero si algo no sabía esa chica era mantener un secreto, por eso mismo no le decía lo de los golpes, todos se enterarían en un santiamén y eso solo empeoraría las cosas.

Trató de enfocarse en la clase y olvidar todo, como hacía siempre. También tuvo que pasar por alto los insultos condescendientes del profesor que parecía tenerla de punto, creía que era una chica problemática.

De repente se sintió un leve temblor, las ventanales se movieron un poco y todos voltearon a ver. El profesor observó la ventana, se sentía una vibración que en cuanto todos quedaron en silencio se escuchó una explosión seguida de mucho viento, todos los alumnos corrieron hasta las ventanas movidos por el miedo y la curiosidad.

Había mucho humo y escombros volaban por los aires.

-¡Chicos! Quédense donde están, no sabemos que esta pasando. Confiemos en los héroes, ellos nos dirán qué hacer.- Dijo el profesor tratando de mantener la calma en su clase y rápidamente su temple se desvaneció al ver flamas azules a la distancia.- ¡Mantengan la calma! ¡Iré a preguntar qué hacer, todos quédense en este salón, nadie salga!

June volteó a la ventana y lo supo de inmediato, eran las flamas de su papá y solo podía preguntarse ¿Qué buscaban? ¿Cuál era el plan? Por la distancia, podía imaginar que esa muralla de fuego servía como perímetro que separaba el centro de Tokyo del resto de distritos y prefecturas. Si ese era el caso, entonces su objetivo se encontraba en la ciudad y no en Musutafu como habían amenazado.

-Es la Liga de los villanos... Esas asquerosas ratas siguen apareciendo y reproduciéndose.- Dijo un compañero que estaba pegado a la ventana.

-Nunca entenderé por qué simplemente no los mataron en la guerra.- Comentó otra compañera.