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Jimin



Todo ha Estado mejorando.

Desde que jungkook y yo, literalmente nos unimos aquel día todo ha ido mejorando, ya no siento tantas energías negativas a mi alrededor y es un alivio, siento que puedo respirar y salir más libremente fuera de casa. Él ha sido muy amable y atento, el jardín de la casa a recuperado sus colores gracias a él, además de traerme obsequios siempre, cocina para mi postres deliciosos. Es mejor de lo que pensé que sería.

Por cierto, desde ayer que byul desapareció y no he sabido más de el, supongo que debe andar por allí cazando o que se yo, es imposible saber lo que pasa por la mente de ese gatito.

Así que el camino a casa de Lisa hoy es solitario, voy a verla porque me pidió el favor de llevar a los niños hoy a la iglesia, al parecer harán una especie de ceremonia o algo, que se yo.

La verdad la idea de ir a la iglesia no es muy agradable que digamos.

Nunca me gusto ir.

No es que no crea en Dios, es solo que los miembros de la iglesia no me generan confianza, tratan a las personas como si fueran lo peor solo por no pertenecer al Evangelio.

Que suerte que no saben que soy Gay... O al menos eso pienso yo.

Al carajo, como si me importara que me llamaran pecador.

- oh, minie, gracias por hacerme este favor. - me dijo Lisa apenas llegue ya los niños están listos, así que no tuve ni que entrar dentro de la casa.

- descuida, esta bien - respondi amablemente - como están niños? Kai Momo?

- estamos súper tio jimin! - gritaron al unísono, son unos niños con mucha energía la verdad. Kai es un niño de 8 años, su cabello es rubio y su piel es súper blanca, Momo por otro lado tiene 7 años y su cabello es de color negro al igual que el de Lisa.

Kai se parece mucho más a su padre hoseok... Nunca pensé que ellos se fueran a separar pero supongo que así es la vida, ni modo.

- bueno, será mejor que vayamos caminando, nos vemos lis - me despedí de ella moviendo mi mano, Kai y Momo hicieron lo mismo.

El camino hasta la iglesia no es tan lejos, en menos de media hora estaremos allá.






















Efectivamente, llegamos después de un momento, logramos encontrar asientos disponibles en la parte de atrás, sentarse en las primeras filas es demasiado peligroso, no quiero que el padre me llame para pasar al frente.

Que oso, eso sería el colmo.

No pasó mucho tiempo para que la ceremonia comenzara, al parecer es para purificar el camino y alma, además del pueblo, debo suponer que es por todo lo que ha pasado aquí, y todo lo que se ve y escucha. Y hablando de eso... Desde que entramos he sentido mucha picazón en el cuello, y me he sentido mareado tambien... Es extrañoo.

Me falta aire.

Comienzo a sentirme asfixiado ¿que mierda? Mire a todos lados, ya que, de pronto siento como si mi cuello estuviera siendo apretado por alguien , esto debe ser una maldita broma.

Diabolik | KookminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora