Capítulo 14: Dar Espacio

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Desde que la noticia de mi  relación con Draco se propagó por toda la escuela, las cosas se han vuelto un poco complicadas. No puedo evitar sentirme culpable por haber arrastrado a Draco a esta situación, especialmente después de todo lo que ha pasado entre nosotros. Harry, por otro lado, ha estado negando vehementemente cualquier rumor sobre él y Draco. Lo entiendo, pero a veces me pregunto si está tratando de proteger su reputación o si realmente está tratando de ocultar algo más.

Aunque me duele admitirlo, sé que he cometido muchos errores con Draco. Desde nuestro pasado hasta el presente, he sido egoísta y he actuado de manera impulsiva. Me di cuenta de que necesitaba darle espacio a Draco para que pudiera aclarar sus sentimientos sin sentirse presionado por mí.

Hablé con Blaise y Pansy sobre la situación. Sus consejos fueron reveladores. Me recordaron que Draco es orgulloso y que a menudo se aleja cuando enfrenta problemas.

— ¿Apolo, estás seguro de que darle espacio a Draco es lo correcto?— Blaise me pregunta con preocupación.  — Sé que quieres ayudarlo, pero a veces necesitas ser un poco más insistente con él.

— Lo sé, Blaise, pero esta vez siento que es diferente — respondo sinceramente. — No quiero forzarlo a estar conmigo si no está seguro. Necesita tiempo para resolver sus sentimientos.

Blaise asiente lentamente, pareciendo entender mi punto de vista. — Entiendo. Solo asegúrate de que sepa que estás aquí para él cuando esté listo.

Pansy se une a la conversación, agregando su perspectiva. — Draco puede ser terco, pero también necesita saber que tiene a alguien en quien confiar — dice con seriedad — Hazle saber que estás ahí para él, incluso si no está listo para admitirlo.

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Con esa lucha interna en mi mente, me encuentro frente a la encrucijada de la incertidumbre. Por un lado, siento la urgencia de respetar el espacio de Draco, de no agobiarlo ni presionarlo con mis propias expectativas. Sé que necesita tiempo para procesar todo lo que ha sucedido, para encontrar claridad en medio del caos emocional que lo rodea. Pero por otro lado, hay una voz dentro de mí que clama por acercarme a él, por hacerle entender lo importante que es para mí, lo mucho que valoro su presencia en mi vida.

Después de mucho reflexionar, decido seguir mi instinto y preparar una pequeña cita en uno de los jardines más serenos de la escuela. No será un encuentro romántico, ni tampoco una declaración de amor. Simplemente quiero pasar tiempo con él, como amigos, y ofrecerle un momento de intimidad diferente a los que ya hemos compartido.

Selecciono con cuidado el lugar, buscando un rincón apartado donde podamos disfrutar de la tranquilidad y la privacidad que necesitamos. Coloco una manta en el suelo, adornada con cojines y velas, creando un ambiente cálido y acogedor. Preparo algunos aperitivos y bebidas, pensando en los gustos de Draco, con la esperanza de que se sienta cómodo y relajado en mi compañía.

Mientras organizo todo, mi mente sigue dando vueltas en círculos, debatiéndose entre la necesidad de darle espacio a Draco y el deseo irresistible de estar cerca de él. Pero finalmente llego a la conclusión de que esta cita es mi manera de demostrarle que estoy aquí para él, que siempre estaré dispuesto a escucharlo y apoyarlo, sin importar las circunstancias.

Cuando todo está listo, me siento en la manta, nervioso pero lleno de determinación. Espero a que Draco llegue, con el corazón latiendo con fuerza en mi pecho. Estoy decidido a hacer todo lo posible para que se sienta amado y comprendido, para que sepa que siempre puede contar conmigo, sin importar cuánto tiempo necesite para encontrar su camino.

Ambos charlamos de diferentes temas que nos llamaban la atención, era como si pudiéramos decir cualquier cosa y entendíamos lo que el otro quería expresar, sin duda alguna era algo bastante agradable y era cómodo saber que podíamos ser nosotros mismos. Sin embargo el ambiente cambió de forma un poco abrupta, sobre todo cuando Draco mencionó los detalles de nuestra primera vez en la sala de los menesteres, una oleada de recuerdos inundó mi mente, trayendo consigo emociones que creía haber enterrado profundamente. Recordaba la sensación de estar allí, rodeado por la magia de aquel lugar especial, y cómo cada momento compartido con Draco parecía brillar con una intensidad única.

𝑪𝒐𝒏𝒔𝒕𝒆𝒍𝒂𝒄𝒊𝒐𝒏𝒆𝒔 & 𝑬𝒔𝒕𝒂𝒄𝒊𝒐𝒏𝒆𝒔 || 𝑨𝒑𝒐𝒍𝒐×𝑫𝒓𝒂𝒄𝒐Donde viven las historias. Descúbrelo ahora