Capítulo 24: Decisiones firmes

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Los días han pasado desde nuestra última conversación y, mientras reflexiono sobre todo lo que Apolo ha tenido que enfrentar, me doy cuenta de la fortaleza que hay en él. A pesar de las dificultades, siempre mantiene una sonrisa en el rostro y rara vez deja ver su molestia, incluso en los momentos más difíciles. Sin embargo, últimamente, la presencia insistente de Harry ha estado poniendo a prueba esa calma.

Me encuentro en la biblioteca, sumergido en un libro sobre encantamientos avanzados, tratando de concentrarme en mis estudios mientras Apolo asiste a una clase extracurricular para mejorar sus calificaciones. Pero mi tranquilidad se ve interrumpida cuando noto que Harry se acerca a mi mesa.

Una sensación de incomodidad se apodera de mí mientras veo a Harry acercarse, y sé que no quiero tener una discusión con él. Decido que lo mejor es alejarme antes de que las cosas se salgan de control.

Guardo rápidamente el libro en mi mochila y me levanto de la mesa, tratando de pasar desapercibido mientras me dirijo hacia la salida de la biblioteca. Sin embargo, antes de que pueda llegar muy lejos, Harry me detiene con una voz cargada de malicia.

—¿A dónde crees que vas, Malfoy? —me pregunta con una sonrisa desafiante, bloqueando mi camino con su presencia intimidante.

Mi corazón late con fuerza mientras busco una manera de salir de esta situación incómoda. No quiero enfrentarme a Harry, pero tampoco puedo permitir que me intimide.

—No tengo tiempo para tus juegos, Potter. Déjame en paz —respondo con firmeza, tratando de ocultar mi nerviosismo bajo una máscara de indiferencia.

Sin embargo, Harry no parece dispuesto a dejarme ir tan fácilmente. Sus ojos brillan con una mezcla de hostilidad y satisfacción mientras se acerca un paso más.

—Oh, pero creo que tenemos mucho de qué hablar, Malfoy. ¿Qué tal si discutimos sobre tu lealtad? —me provoca, su tono lleno de veneno.

Una sensación de irritación comienza a burbujear dentro de mí mientras luchó por mantener la compostura. No quiero caer en la trampa de Harry, pero su persistencia me está poniendo al límite. Me tenso cuando siento la mano de Harry sobre la mía, su tacto frío y firme contra mi piel. Mi instinto me dice que debo apartarme, que no debo permitir que me arrastre a su juego, pero una parte de mí se siente intrigada por lo que tiene que decir.

—No tenemos absolutamente nada de qué hablar, Potter —le digo con voz firme, intentando liberar mi mano de su agarre—. Déjame en paz.

Pero Harry no me suelta. En cambio, su expresión se vuelve más seria, y puedo ver una chispa de vulnerabilidad en sus ojos.

—Draco, por favor, necesito hablar contigo. Sé que he sido hostil y desagradable contigo, y lo siento. Pero necesito que me escuches —me ruega, su voz llena de sinceridad fingida.

Una parte de mí quiere creer en sus palabras, pero otra parte sabe que no puedo confiar en él tan fácilmente. Sin embargo, decido darle una oportunidad, aunque sea por curiosidad.

—Está bien, Potter. Habla —le concedo, permitiendo que me guíe hacia una mesa cercana donde podemos sentarnos y hablar.

Harry toma un profundo aliento antes de comenzar a hablar, sus palabras fluyendo con una mezcla de arrepentimiento y desesperación.

—Draco, he estado pensando mucho en nosotros últimamente. Me he dado cuenta de que te he perdido, y eso es algo que no puedo aceptar. Eres una persona increíblemente maravillosa y me gustaría tener la oportunidad de volver a intentarlo —me dice, su voz llena de convicción fingida.

Siento un nudo en el estómago mientras escucho sus palabras, mi mente luchando por mantenerse clara ante sus halagos. Sé que Harry tiene un don para manipular a las personas, y no puedo permitirme caer en su trampa otra vez.

—Lo siento, Harry, pero ya no siento lo mismo por ti. Nuestro pasado está detrás de nosotros, y es mejor que sigamos adelante por caminos separados —respondo con firmeza, negándome a dejarme engañar por sus palabras dulces.

Sin embargo, Harry no se da por vencido tan fácilmente. Comienza a lanzar una serie de halagos y promesas, intentando seducirme con sus palabras vacías. Pero yo sé mejor que dejarme llevar por su manipulación.

Las palabras de Harry me golpean como un puñetazo en el estómago, pero me mantengo firme, decidido a no dejarme llevar por sus manipulaciones.

—¿Acaso él te hace reír? —pregunta Harry con una mirada desafiante, como si estuviera buscando una grieta en mi armadura.

Me tomo un momento para reflexionar sobre su pregunta, dejando que los recuerdos de los momentos felices que he compartido con Apolo pasen por mi mente. Finalmente, respondo con convicción:

—Él no me hace llorar, no me hace sentir que no valgo la pena. Él es un hombre bueno y nunca ha hecho algo de lo que yo me sienta molesto o dolido. Más bien, intenta conquistarme cada día, y tú nunca hacías eso —declaro con determinación, dejando en claro que he tomado mi decisión y que no volveré a caer en sus juegos.

El rostro de Harry se tensa ante mis palabras, su expresión pasando de la confianza a la incredulidad. Parece atónito de que haya sido capaz de resistir su encanto, pero yo sé que mi lealtad y mi corazón pertenecen a Apolo.

—Draco, por favor, dame otra oportunidad. Prometo que puedo cambiar, que puedo ser mejor para ti —insiste Harry, su voz cargada de desesperación.

Pero ya he escuchado suficiente. Me levanto de la mesa con determinación, negándome a escuchar más de sus mentiras.

—Lo siento, Harry, pero ya he tomado mi decisión. No hay vuelta atrás —le digo con firmeza, antes de alejarme de él y salir de la biblioteca, dejando atrás el pasado para siempre.

Una sensación de alivio me invade mientras me dirijo hacia la clase de Apolo, sabiendo que estoy en el camino correcto y que tengo a la persona adecuada a mi lado.

Una vez que Draco se aleja con determinación, Apolo sale de entre las estanterías de la biblioteca, sintiéndose aliviado por lo que acaba de presenciar. Aunque ha estado preocupado por la influencia de Harry en su pareja, ahora se siente reconfortado al ver la firmeza con la que Draco ha rechazado los intentos de manipulación.

Apolo se siente agradecido por tener a alguien como Draco a su lado, alguien que no se deja engañar por las artimañas de Harry y que defiende lo que tienen juntos. Aunque ha luchado con la inseguridad en el pasado, ahora se siente seguro en el amor y la lealtad de Draco.

𝑪𝒐𝒏𝒔𝒕𝒆𝒍𝒂𝒄𝒊𝒐𝒏𝒆𝒔 & 𝑬𝒔𝒕𝒂𝒄𝒊𝒐𝒏𝒆𝒔 || 𝑨𝒑𝒐𝒍𝒐×𝑫𝒓𝒂𝒄𝒐Donde viven las historias. Descúbrelo ahora