Lena.
El gran día de la inauguración había llegado, ya era lunes a las siete de la mañana y me encontraba en la puerta de mi escuela que estaba decorada con globos rosas y azules.
Me siento nerviosa y a la vez tan feliz que no puedo dejar de sonreír al ver que una cuantas mamás traen a sus niñas a tomar clases.
Entre ellas veo a Annie que trae de la mano a su hermana pequeña Sofía de apenas unos cuatro años.
A esa edad el cuerpo de las niñas son más flexibles para poder aprender todo lo que la danza puede ofrecer.
__¡Amiga, te ha quedado hermoso!
__Chilla Annie emocionada abrazando a la Morenita que asiente.
__Y por dentro está mejor todavía.
__Aseguro contenta dándole el pase a las demás madres que traían a sus pequeñas.
Ya con toda la matrícula completa nos dirigimos hacia el gran salón donde todos las niñas con el atuendo de ballet se colocaban en línea recta como les indiqué.
Las madres miraban a sus alrededores con admiración porque pinté las paredes de rosa y azul pastel y tenía un inmenso espejo que nos permitiría vernos al bailar.
También había cuadros de bailarinas en todas las posiciones.
La música suena y yo comienzo con las primeras lecciones. Me sumerjo en mi danza a la vez que las niñas me imitan con emoción.
La clase dura dos horas los días lunes, miércoles y viernes por las mañanas ya que la mayoría de las niñas tienen escuela a las doce de la tarde.
Por lo que no interfiere.
Con una última voltereta culmino mi instrucción. Sonrío cuando las niñas, las cuales son en total de diez niñas.
Espero ganar buena fama para que mi matrícula aumente.
Alicia, Tina, Gaby, Bella, Karol, Sofía, Danna, Paola y Antonella son los nombres de estos ángeles.
Las despido con una emotiva sonrisa mientras sus mamis que se quedaron a ver la clase porque al ser la primera vez deseaban ver de que se trataba.
Ese echo no me molesta, sé que me ganaré la confianza de las mamis.
Cierro mis instalaciones con una gran felicidad y salgo ya cambiada con mis jeans negro zapatillas blancas y una blusa azul atando mi larga cabellera azabache en una coleta alta.
Exhausta pero satisfecha me voy caminando rumbo a mi pequeño aunque acogedor departamento.
Mi estómago gruñe dándome a entender que es mi hora de almuerzo.
Sí ya son las doce y media.
Me dirijo hacia la cafetería Rose Coffe dónde trabajé un tiempo.
Al ingresar una gama de deliciosos olores impactan en mi olfato que me aguan la boca.
Le sonrío a Annie que no la veía desde la mañana solo que al ir hacia una mesa libre me topo de frente con el pica flor de Dominik que no me deja avanzar.
__¿Podrías darme permiso?
__Digo irritada tanto por su presencia como por el hambre que cargo.
Él sonríe como modelo de propaganda y sé que no me dejará ir tan fácilmente.
__¿Cuando me dejarás invitarte a salir a pasear por ahí?
__Dice Dominik coqueto intentando tocarle un mechón que se había salido de la coleta de la Morena.
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Inevitablemente... Tú (Saga Amores Rancheros #1)
RomanceLa vida de la dulce y tímida Lena Crafor da un giro de 180° grados cuando sus padres mueren en un accidente automovilístico quedando sola y con una gran tristeza. Ella se muda a un pueblo escondido de la civilización llamado Torrence Blein que aunqu...