Cede: 17 de Junio, 2010. Chicago, E.U.A.
El Héroe Perdido (9)
- Bueno, llegamos vivos - comentó Leo -. Ahora, ¿cómo encontramos a los espíritus de la tormenta?
Alicia estaba aún despabilándose, pero Jason vio un movimiento fugaz debajo de ellos. Al principio pensó que era un avión pequeño, pero era demasiado diminuto, oscuro y rápido. El objeto se dirigía a los rascacielos trazando una espiral, zigzagueando y cambiando de forma... y, por un instante, adoptó la figura humeante de un caballo.
- ¿Y si vemos a dónde va ese? - propuso.
Se encontraban siguiendo al espíritu de la tormenta cuando bajó en picada a la cuadrícula de calles del centro. Festo intentó seguirlo, pero sus alas eran demasiado anchas. El ala izquierda golpeó el borde de un edifico y cortó una gárgola de piedra antes de que Leo parara. Con urgencia, Alicia le pidió a Piper que tradujera. Le pareció que la chica lo hacía a regañadientes, pero probablemente eran imaginaciones suyas, ¿verdad?
- Dice Alicia que vayas por encima de los edificios - comentó -. Lo seguiremos desde ahí.
- ¿Quieren conducir este cacharro? - dijo Leo, pero hizo lo que le pidieron.
Al cabo de unos minutos, vislumbraron al espíritu recorriendo las calles a toda velocidad sin objetivo aparente: soplando sobre los peatones, agitando banderas, haciendo que los coches giraran bruscamente...
- Genial - soltó Piper -. Hay dos.
Tenía razón. Un segundo venti dobló la esquina del hotel Reinassance y se unió al primero. Se entremezclaron en una especie de danza caótica, subiendo disparados a lo alto de un rascacielos, torciendo luego una torre de radio y volviendo a bajar en picada hasta la calle.
- Esos tipos no necesitan más energía - comentó Leo.
- Supongo que Chicago es un buen sitio para salir - intervino Piper -. Nadie va a cuestionar a un par de vientos malos más.
- Más de un par - dijo Jason -. Miren.
El dragón dio vueltas sobre una ancha avenida situada junto a un parque a orillas del algo. Los espíritus de la tormenta se reunían: al menos había una docena, girando alrededor de un monumento artístico público.
- ¿Cuál creen que es Dylan? - preguntó Leo -. Tengo ganas de echarle algo.
- El monumento se parece al de mi sueño - dijo Jason con misterio.
Alicia se encontraba analizándolo. Era una fuente pública con dos monolitos de cinco plantas que se elevaban a cada lado de un estanque de granito. Los monolitos parecían construidos con pantallas de vídeo que emitían la imagen combinada de una cara gigantesca que arrojaba agua al estanque. Mientras Alicia miraba, la imagen de las pantallas dio paso a una cara de mujer con los ojos cerrados.
- Leo... - llamó el rubio detrás de ella con nerviosismo.
- La veo - contestó el conductor -. No me gusta, pero la veo.
Entonces las pantallas se oscurecieron. Los venti se arremolinaron en una sola nube con forma de embudo y pasaron rozando la fuente, donde levantaron una tromba casi tan alta como los monolitos. Llegaron al centro, hicieron saltar una tapa de desagüe y desaparecieron bajo tierra.
ESTÁS LEYENDO
El canto del Sol | Jason Grace
FanfictionDespués de la Batalla de Manhattan, la mayoría tuvo finales felices. Pero otros no. Alicia Cotzomi es parte de esa minoría, pues su voz fue arrebatada. Las circunstancias no son capaces de ayudar a la semidiosa en la ardua tarea de recuperar el ha...