Capitulo 50

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 ¿Estas segura de que puedes estar aquí? 

-Claro que sí. Estoy bien. -respondió Venecia, ignorando las advertencias y consejos de Azul de que se quedara en cama.

-Casi mueres, eso no me parece bien. -replicó Ronnie.

Venecia suspiró, sin poder evitar que todo su peso callera en el bastón de mano que Leila le había dado. Estaba hablando parada, como un intento de probar que podía hacerlo.

-Si eres inmortal, ¿Cómo es que casi mueres? Creí que tu herida cerraría rápidamente como la de los vampiros en las películas. -apuntó Noah mientras se sacudía polvo que volaba de los árboles.

-Mi alma es inmortal, mi cuerpo fue rescatado antes de morir completamente, él tiene diecisiete y es mortal, gracias a él puedo estar aquí, de lo contrario no podría pisar la tierra u otro mundo que no sea el mío porque no tendría un ancla.

-Increíble. -dijo Jack con los ojos brillantes. - Y...                                                       -No voy a traerte un ángel, demonio ni nada.

Él bufó y apartó la mirada, Nina lo golpeó en el brazo.

-Vamos a trabajar, falta sola una semana para el solsticio, tenemos que calentar.

No hay trabajo. -afirmó Will secamente. Estuvo los ultimo tres días sin hablarle, pero siempre cerca.

-De hecho, si -dijo Charlie mientras cruzaba la puerta y se reunía con los demás en el campo. -hay uno que no pude completar porque no me dejaron entrar. -se quejó cruzándose de brazos.

-  ¿Qué? -preguntó Nina con curiosidad.

-Un bar de lesbianas. Casi me lanzan con algo cuando intenté entrar.

Jack y Noah rieron.

-Genial, Nina y yo iremos.

-Ni hablar. -dijeron Jack y Will al unísono.

-  ¿Por qué no? -preguntó fulminándolos con la mirada. Estaban uno al lado del otro con los brazos cruzados y la misma expresión desafiante. Se los podría hacer pasar fácilmente por hermanos.

-Porque tú estás herida. -señaló Will, por primera vez dirigiéndose a ella, aun sin mirarla.

-Charlie, cuando te hieren ¿a cuántos días vuelves a trabajar? -preguntó mirándolo.

-Dos. -afirmó él.

Will le lanzó una mirada asesina, Charlie apartó la mirada.

-No se diga más. -dijo ella orgullosa.

-Iré con ustedes. -apuntó Jack.

-No puedes entrar.

-Tu no pensaste en las alternativas Charlie.

-  ¿Cuáles? -preguntó Nina.

-Me vestiré de chica. -dijo él con un gesto dejando en claro que era evidente. Ella sonrió.

-Deberás ponerte peluca. -Matt empezó a señalar con los dedos la lista de indicaciones.

-Claro que no, maquillaje, atuendo y ya. No es raro ver a un hombre convertido en mujer.

Venecia frunció el ceño mientras acomodaba sus ideas.

-Tal vez esto sea raro para ti… ya sabes, el mismo género o cambio de él. -dijo Will suavemente.

-Oh no, claro que no. En mi época había gente junta del mismo género, aunque se creía antinatural. Si es cierto que no vi cambio de género.

-  ¿Lo apruebas?

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