Laika kids stories

Enfermo

––¡POSTEEEEEE!––Coraline gritó lo más fuerte que pudo hacia la ventana de la habitación de Huevo. Kubo le miró sonriente mientras Norman le veía con resignación a que no podía presentarse como una persona normal

La respuesta al llamado de la peliazul fue el silencio, que se vio interrumpido en pocos minutos con el tono de llamada del teléfono de la chica. Coraline busco el aparato en su bolso antes de colocarlo en su oreja

––¿Qué quieres enana?––al otro lado de la llamada le habló una voz lastimera. La chica puso una mueca al escuharlo

––¿Estás tan mal como te oyes?...––una afirmación en el mismo tono lastimero fue su respuesta––...anímate y abrenos, los chicos y yo estamos afuera––

––Denme un segundo––le dijo a su amiga antes de cortar la llamada

La mirada del trío se fijo en la ventana de la habitación, la cual fue abierta de pronto, Huevo asomó su cabeza para ver a sus amigos, extendió una de sus manos y dejó caer unas llaves, las cuales Kubo atrapó

––¿No era más fácil abrirnos la puerta?––preguntó Norman viendo hacia arriba con una ceja alzada

––Agradezcan que salí de la cama, solo suban y devuelvanme las llaves––dijo el castaño antes de volver a cerrar la ventana

El tres jóvenes fuera de la casa se vieron entre sí con una leve preocupación

––Debe sentirse muy mal––opinó Kubo mientras caminaban hacia la entrada de la casa

––Lo que se debe estar es muriendo, ese chico nunca se enferma––dijo Coraline a la par que su amigo japonés abría la puerta

El trío entró al hogar de los Trubon, y tras volver a cerrar la entrada, caminaron tranquilamente a la habitación de Huevo

Norman abrió la puerta y fue el primero en entrar, encontrandose con su amigo más alto hecho un ovillo de mantas sobre su cama

––Hola chicos––el muchacho se sentó con desgano en la cama, les sonrío de forma perezosa

––Te ves horrible––habló Coraline antes de que uno de los otros dos pudiera corresponder el saludo. Norman le dio un codazo a su novia

–Me hubieras visto en la mañana––rió el muchacho

––Pues ¿que te paso? Tu nunca te enfermas––Kubo se sentó al lado del castaño

––Comí un queso en mal estado, no me di cuenta hasta que vomité––respondió en una mueca de asco, que remplazo rápidamente por su expresión agradable––¿Y eso que vinieron?––

––Winnie nos dijo que estabas enfermo, así que quisimos venir a comprobar que no te vas a morir––dijo la pecosa mientras se sentaba al pie de la cama, viendo a su amigo con una sonrisa

––Trajimos snacks y la computadora de Norman para ver películas––Kubo sacó varias cosas de su mochila, bolsas de chucherías, cotufas y una botella mediana de refresco

Huevo vio todo lo que trajeron y luego les vio con una expresión plana

––No sabían que mis entrañas tenían diarrea explosiva cuando compraron eso ¿cierto?––

Los tres se quedaron en silencio, apartando la vista a otro lado de la habitación. Huevo dejó salir una carcajada al saber la respuesta

––Dame un refresco, si vomito ustedes me sostendrán el balde––

––Sostener nada, iré por un balde para que lo tengas al lado––declaró Coraline mientras se levantaba para salir de la habitación

A los 2 minutos la chica regreso con un balde mediano y se lo entregó al chico enfermo

Al final, Huevo solo vomito una vez, al terminar la película