LIKE IT OR NOT [CHESTAPPEN]

I'm glad we're doing this

Sergio y Max salieron del auto frente al departamento de Sergio.

—Gracias por esta noche. Realmente hiciste que ese evento fuera más llevadero. Y luego... de hecho me sentí parte del equipo.— Los ojos de Max se posaron en sus zapatos como si le avergonzara admitir eso.

—Lo eres.— Sergio se encogió de hombros.

Max miró los ojos color whisky de Sergio. Su cabello estaba ligeramente despeinado. Tenía las mejillas cubiertas de rosa, probablemente por el alcohol.

—Dios, eres hermoso.— Resopló Max.

Los labios de Sergio se abrieron y sus cejas se alzaron.

—¿Por qué pareces tan sorprendido por eso?— Preguntó Max.

—Yo sólo... quiero decir... ¿Te has visto?— Sergio hizo un fuerte gesto hacia el dios griego que era MaxVerstappen. —Y honestamente, comparado con Daniel, soy — su frase fue interrumpida por el dedo de Max presionando sus labios.

—No.— El tono de Max era bajo. Le recordó a Sergio antes de que comenzaran a 'salir'.

El dedo de Max se deslizó de los labios de Sergio, su mano ahora ahuecando el costado de su cara. Pasó su pulgar por la mejilla antes de inclinarse.

Sergio se inclinó hacia los labios de Max. El beso fue suave y gentil, y sabía sutilmente a alcohol.

—Mañana por la noche, déjame invitarte a salir.— Dijo Max, a sólo unos centímetros de los labios de Sergio.

Sergio solo asintió, todavía atrapado en el momento.

—Estaré aquí a las siete.—

Sergio asintió de nuevo mientras Max se alejaba.

Sergio tenía tantas ganas de acercar a Max de nuevo y llevarlo a su edificio, al ascensor y a su cama, pero en cambio, vio como Max volvía a subir al auto.

Se mordió el labio inferior mientras veía el coche desaparecer por la carretera. Dios, estaba perdido.

.｡*･ﾟﾟ。・♡

A las siete menos diez Sergio estaba listo. Se había sentido mal por acortar el día con Carlos, pero Carlos fue muy comprensivo y lo animó a divertirse con Max.

Sacudió la cabeza mientras se miraba en el espejo. Nunca imaginó que Carlos lo alentaría a divertirse en una cita con Max Verstappen. Se inspeccionó en el espejo. Max se negó a decirle a dónde iban, por lo que Sergio optó por pantalones y una simple camisa blanca con botones. No demasiado elegante, pero tampoco demasiado informal.

Las palabras de Max de anoche vinieron a su cabeza. 'Dios, eres hermoso. Se miró a sí mismo tratando de no pensar en cómo se comparaba con Daniel. Él tenía a Max, no Daniel.

Con otra sacudida de cabeza, se alejó del espejo y bajó las escaleras.

Max vio a Checo salir por las puertas de su apartamento y su estómago dio un vuelco. Le resultaba desconcertante poder sentirse tan emocionado de ver a alguien. Era muy diferente del temor esperanzador que solía sentir cuando veía a Daniel.

—Hola, precioso.— Max deslizó un brazo alrededor de la espalda de Sergio y le dio un suave beso.

—Hola.— dijo Sergio cuando se separaron.

—¿Listo?—

—¿Me vas a decir adónde vamos?— Preguntó Sergio mientras él y Max subían al auto.

—Ya lo verás cuando lleguemos allí.— Max sonrió. Sergio notó la forma en que sus manos agarraron el volante.

—Estás nervioso.—