Charles
A veces atribuimos cierta personalidad a ciertos rasgos, muchas veces la gente fea nos genera más rechazo y actuamos con más cautela, mientras que las personas linda nos generan ternura y nos hacen actuar de maneras más amable. Por eso es más probable que caigamos en la estafa de alguien bello, por que estamos con la guardia baja.
Así de superficiales somos como seres humanos
La imagen de Ameliel riendo como una desquiciada no salía de mi mente. Cuando corrí al bosque al oír un grito desgarrador no estaba preparado para presenciar la imagen de la mujer que quería encima de un cadáver con las manos llenas de sangre
Y esta vez a diferencia de la vez con la criada se veía que disfruto matar a lo que fuera eso
Toda la imagen de ella que tenía se desmoronó, la veía como a alguien puro a quien proteger pero esa solo eran mis ideas. Ameliel no me dio razones para creer nada solo yo me deje llevar por su belleza y olvidándome de cuando un arcángel mato a todos lo primogénitos de Egipto, me hice una idea divina y santificada de ella.
Ahora me encontrábamos en el comedor, ella tenia mucha hambre por haber usado tanta energía, no podía mirarla a los ojos, porque apesar de todo yo seguía sintiendo mucho por ella. Y lo que más me molestaba de toda esta situación es que ella con cada acción me recordará que yo solo era un ser inferior, que no me necesitara.
Se que no estaba dormida cuando le propuse matrimonio, y eso dolió, pero más dolio darme cuenta que ella iba a ser el amor de mi vida y ella iba a seguir viviendo para luego olvidarme.
-¿Nos dirá que pasó?-el caballero rompió el silencio que reinaba, me parecía inapropiado que un caballero se sentará a comer con nosotros pero no era mi casa, no opinaba
-No les incumbe -la respuesta cortante de Ameliel hubiera bastado para callar a cualquiera, bueno a cualquiera menos a este caballero, aparentemente
-tienen a la luna y al alfa de la manada es de nuestra incumbe...
El fuerte este estruendo lo hizo callar, yo no creía prudente intervenir
Ameliel clavo con tanta fuerza el cuchillo en la mesa que la atravesó por completo
-lo único que les incumbe saber es que traeré a los hijos de la diosa Luna devuelta, vivos -se levantó enojada-nada más
Al salir yo no sabía que decir, el barón Edward increíblemente sonrió
-Es un ángel-menciono
-¿que?
-¿como lo sabes?
El caballero y yo lanzamos al mismo tiempo diferentes preguntas
-cuando era niño ví a uno, tenía esa misma actitud pacífica pero a la vez iracible, solo se ponen así cundo se trata de su dios
-¿Entonces su dios esta involucrado?
-no lo sabemos
-es probable-respondi al caballero, este se paro y salió sin despedirce, no estaba acostumbrado a esta manera tan suelta de compórtate
-Disculpalo, al ser un beta, el más cercano al alfa le es muy difícil toda esta situación
-ni me lo diga, yo me retiró también-doble mi servilleta en la mesa y me levante -buen provecho
-Gracias, espero un descanse gran duque-sali de ahí, me sentía agotado, pero quería verla, no parecía estar muy bien
Voy hasta donde le asignaron una habitación, escucho un llanto tenue, sin importarme lo que pudiera pasar ingrese, ella rápidamente pasó la manos por la cara
-Charles-e hizo algo que no esperaba, correr abrazarme, la lleve para sentarnos en la cama-no puedo más
-tranquila preciosa-correspondi su abrazo y empecé a acariciarla para que se sintira mejor-¿que pasa?
-él, él no deja de jugar con mi cabeza, no deja de hacerme la existencia cuadros- no entendí a quien se refería pero cuando mencionó su nombre algo dolió dentro de mi-Reulan no parara hasta deshacerse de mi
-yo no permitiré que eso pase, prometi protegerte y lo haré cueste lo que cueste
-que puede hacer un humano contra un dios
-uno por amor todo lo puede-ella sonrió dulcemente y apoyo su cabeza en mi pecho
Pensé que no diría nada, y así fue por mucho tiempo
-¿alguna vez amaste a alguien más ?
-no puedo tocar a nadie, me causa repulsión-ella hizo una mueca-tu eres la excepción
-¿entonces no?-me reí un poco y negué
-no Ameliel, eres la primera y la única
-yo tampoco llegue a amar, si tuve dos personas a quien quería mucho pero nunca pude amarlos -no me sentía incómodo escuchándola, era muchísimo mayor, obviamente tendría historia, pero no me importaba, es más me gustaba que se abriera así a mi, que me de esa confianza
-¿como eran ellos?
-eran muy diferentes entre sí, Lucifer para él que fui creada, y Azael el ángel más frío que existe-trague duro, eran dos sobre el que había leído, el rey del infierno y el ángel de la muerte. Se escucha muy irreal
deje el tema por mi bien y Ameliel no insistió, su cuerpo se empezó a relajar
-Charles-arrastraba levemente las palabras, tenía sueño
-si preciosa
-si aun sigue en pie tu oferta, me casaré contigo
Permanecí en silencio procesando su palabras pero no pude responderle por que dio un pequeño cabeceo y termino dormida en mis brazos, la acomode en la cama y dirigiéndome a la salida
-siempre estaré esperandote
Mencione saliendo de ahí solo para hallarme con el caballero con los ojos amarillos y radiantes
-de esto nada terminará bien
Frunci el ceño molesto, ya estaba cansando su irreverencia
-de que hablas
-un alma marcada tiene límite de tiempo y el reloj ya empezó a correr
