Wanpisu

Capítulo 23: El Viaje a lo Desconocido

Con el antiguo artefacto en su poder, Koemi, Koko, Kiyomi y Yûko se prepararon para emprender un viaje hacia lo desconocido. Sabían que debían encontrar respuestas sobre el artefacto y su conexión con la antigua civilización que habían descubierto en la cueva.

"¿A dónde creen que deberíamos ir?" preguntó Koko, mirando a sus amigas con curiosidad.

"Creo que deberíamos buscar a alguien que pueda ayudarnos a entender el verdadero poder de este artefacto", sugirió Yûko, ajustando la mochila en su hombro. "Alguien que tenga conocimientos sobre la historia y la magia antigua."

Kiyomi asintió. "Estoy de acuerdo. Pero ¿dónde encontraríamos a alguien así?"

Koemi recordó una historia que había escuchado en su infancia sobre un sabio ermitaño que vivía en lo profundo del bosque, lejos de la civilización. "He oído hablar de un ermitaño sabio que vive en las montañas. Se dice que posee un conocimiento profundo sobre la magia antigua y la historia olvidada."

"Entonces es allí a donde debemos ir", dijo Koko con determinación. "Si alguien puede ayudarnos, es él."

Con sus mochilas llenas de provisiones y el artefacto cuidadosamente guardado, las chicas se adentraron en el bosque, siguiendo el sendero hacia las montañas que se alzaban en el horizonte. El aire fresco y el sonido de la naturaleza los acompañaban en su viaje, infundiéndoles un sentido de aventura y emoción.

A medida que avanzaban por el sendero, se encontraron con diversos desafíos: arroyos que debían cruzar, colinas empinadas que debían escalar y densos bosques que debían atravesar. Sin embargo, no perdieron el ánimo, sabiendo que estaban en un viaje importante y que debían perseverar.

Después de varios días de viaje, finalmente llegaron al pie de las montañas, donde encontraron el inicio de un sendero que llevaba hacia lo alto. Con determinación, comenzaron a ascender, enfrentando el desafío con valentía y resolución.

A medida que subían, el paisaje cambiaba a su alrededor, revelando vistas impresionantes de valles verdes y picos cubiertos de nieve. El aire se volvía más fresco y puro, y el sonido del viento susurrando entre los árboles los acompañaba en su ascenso.

Después de un día de caminata agotadora, finalmente llegaron a la cima de la montaña, donde encontraron una cueva oculta entre las rocas. Una sensación de anticipación los invadió mientras se acercaban a la entrada, preguntándose qué los esperaba dentro.

Con el corazón latiendo con emoción, las chicas entraron en la cueva, listas para enfrentar lo que sea que encontraran en su búsqueda de conocimiento y sabiduría antigua.