nota 1

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Nota 1, Ángel Martínez Zapata.


"Mis bolsillos duelen, esto no es más que una historia de ficción."

La única razón por la que me estaba sometiendo a eso era para saber más del médico, pero no me interesaba en lo absoluto su relación con Ana María y otro tipo de detalles. Es que creía que iba a ser un tipo de informe bibliográfico detallado del doctor porque lo que estaba buscando era información. Que aprovechados, no tenía ni idea de qué hacer con el libro que se encontraba frente a mí.

Froté mi cara con decepción y agité mi cabello para luego mirar al techo. Es que ni siquiera encajaban las descripciones, el esposo de Ana María era un herrero que adquirió conocimientos de medicina. El médico era el señor Bartolomé y también a quien al parecer adoraban los guanes. ¿Será eso lo que la persona que hizo el cuadro trataba de representar? Mi curiosidad me ganó y volví a leer la frase.

"Solo observó en silencio como milagrosamente la gente sanaba una extraña y recurrente fiebre solo con bañarse en el río. Cuando todo terminó, los indígenas le rindieron homenaje frente al río sacrificando un animal pequeño el cual no logró distinguir."

Eso me pareció interesante. Así que los guanes adoraban a Bartolomé porque los curaba, ahora bien, ¿de qué? Esto se conectaba con mi teoría de que aparte de las enfermedades de la época, que no niego que pudieron afectarles, existía otra cosa. Y todo apuntaba a que el señor al ser mayor quería dejar de sucesor a Adalberto. Era increíble notar como le manipulaba mediante su pasado para que aceptara ser médico. Sin importar si era real o no, se me hacía un acto repugnante.

Estuve un rato debatiendo conmigo mismo si continuar o no con la lectura para optar por continuar independiente a qué tan ficticio se tornara. Era un tema que me interesaba.

La verdad del Jordán, el informeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora